tulo
sta no le queda al nombre rústico. Volteo a ver a Wade qu
usta?
resionante -volteo-Discúlpame, es qu
a la silla de madera con delicadeza,
rvo su atractivo rostro mi
a, yo digo cosas como
e maldad-Eso es una confesión
te dije con
r a mi madre Elizabeth o madre que para mi son térm
cir por su tono que es la chica agradable-Aquí está su c
s manos y bajo mis
ay
daba esas clases de cocina. Observo a Wade
mí. Carraspeo-Wade, ¿puedo pedir? -él alza su
a que la chica ven
me recomiende o decida y
me sorprenda -habla con un t
y se va de nuestro lado-¿Sabes como se lla
un poco aquí y ella no me atiende muc
e pocas veces es
cuando vengo es a comer algo rápido y es
mo un ti
ra en mis manos -A pesar de que eres millon
evitar su mirada. Lo observo de reojo y su
s cejas
sobre eso o me dejara la impresión de que eres -su ton
na palabra. Alzo mis cejas y aplasto mi boca, miro tod
llevarse grandes bocados de papa rellena con carne a la boca. Siento su mirada
y la
estuvo genial, gracias por la invitaci
ue alguien
el segundo piso y Arel
breme la puerta, rápido-mi mira
lve a decir y
e está a pocos pasos de mí, veo en direcci
uiere decir que
z ya se
e, lo único que puedo ver es como trat
ue escucho de él y e
ias, muchísi
ometida, pero ¿Qué paso? - voltea a mí
blé normal y gentilmente, pe
ue si te puedo decir es que te salve de una-su cálida sonrisa
io del corredor y ella saca sus llave
con la mano y
me de que ella y él no estén dentro. La decoración de abajo ahora me parece m
pena y ya concéntrate tarada,
gantados del lugar y siento todas las miradas en mí, los susurros son estresantes
que se
ta
cerca de ella -Sabía yo que
mente, mientras agarra un mechón de cabello rubio-Pongamos esto así. Tú eres de aquí y yo de otro lado, pero ¿sabes cuál es la diferencia ahora que estoy aq
azo po
os y rápidamente doy con el, pero hay
no sea lo que
ada Elizabeth junto a un Matías algo normal, pero con los labios hinchados. Toco la ventana
ustedes? -pongo
de que quiero, no, no quiero, n
a es lo que menos importa, la cuestión es no irme con Wade. Giro hacia l
miro fijamente sin parpad
sera y entro rápidamente. Balbucea algo q
caminar hacia el a
exy, lastima que no m
la vía. Puedo ver hacia atrás a un Wade jalando su cabello, el cabe
puede que mujeriego y tú tienes la intención de preguntar s
S MI MENTE, NO MI MA
de que te estás dici
.
del hielo, sabe
vill
i alrededor, detengo mi vista en la casa a
odo queda e
rovisor-Como no respondiste en tod
pe m
e y es
o me dices que
ncia y ya pre
ídos ante tal grito de
r no se note
adre. Está no es mi casa, pero es donde vivo y como ustedes no tienen camas ni donde do
quiero ahorita es pelear co
quí hubiese empezado desde ahí y estaría bien, ya
me inte
del coche antes de que proteste en mi con
a la entrada, los sigo y me abrazo a mi misma por e
de ropa, solo espera aquí que llevo a tu madre al cuarto y regreso por ti-asiento.
o h
en, quiero d
lguien de mi categoría podría comprar algo así. Camino hacia las gigantes ventanas a mi izquierda y obs
, no pue
dormir -Matías apúrate, deja de hacer cosas con mi madre -bajo mi cab
o mis ojos. Lo sigo escaleras arr
manos en las rodillas y lo veo cruzado de brazos-¿Qué? Como y no engordo, tampoco hago
gra con dorado y una figura de un lobo aullando en oro en la parte de arriba, él a
uerme co
sarás -me da unos pantalones de
orro hacia la cama, me tiro y reboto en ella, el techo es de color blanco, tengo puertas a mi derecha y a mi izquierda, los conductos del aire en una esquina
ncuentro es con un armario enorme lleno de ropa y zapatos de hombre, todo tipo de relojes y pulser
grande de brazos si él no
ajo de este, las abro y me encuentro con afeitadoras, depiladoras, una máquina de cortar cabello, en otro encuentro toallas, me voy a el armario d
ongo un bóxer que encuentro envuelto dentro de la ropa, luego los pantalones y de último la franela, agarr
e duer
debe estar en su casa durmiendo plácidamente s
sando en
sentidos, el frío y ese olor encantador me hace
.