o de los acontecimientos en la corte. Sabía que debía forjar nuevas alian
una reina de nombre. Debo ser u
ltad; sir Tristan. Juntos, trazaron una estrategia para consolidar su posición en la co
stucia será nue
n momento íntimo con la señorita Donatella. Las sombras del celo se de
estás traman
quien, en lugar de dejarse consumir por la envidia, decidió
sonrió co
, Donatella. Pero yo
la corte de su esposo. Con cada movimiento calculado, tejía su influencia mientra
er hija del enemigo, así que en un principio su plan consistía en hacerse conocer en eventos y fiestas... Nadie podría negarse si el mismo rey convocaba un festín para celebrar la p
ara el evento de gala más destacado del año. Arabella, ataviada con un vestido deslumbrante que resaltab
alguien tan radiante? -
ó otra-. Luce diferente, parece que su relación con el rey ya no es ta
asuntos de estado la destacaba como una líder no solo en título, sino también en habilidad. Se sintió satisfecha consigo misma, pues a pesar de no haber sido favorecida por su padre y muc
rse a Lord Harrington, quien en muchas ocasiones h
de explorar las artes en nuestra ciudad?
erla de pie justo en frente y sin el m
ha sorprendido con su conocimie
ostrando su inteligencia en cada palabra pronunciada. No solo se destacaba por su belleza, sino p
iluminar cualquier conversación -se escuchaba
corte. Sus intervenciones eran como obras de arte, meticulosamente di
bre música como sobre asuntos políticos? -recl
e extendía a cada rincón de la cultura y la sociedad. La corte, cautivada por su sabiduría, la aclamaba como la verdadera reina de la inte
efieres, Lad
o... No es exactamente lo qu
s todos los asistentes contemplaba
la variedad es lo que hace la vida
a frunci
la sofisticación deben mantenerse, i
ncia. No todos aprecian la sutileza, algunos prefieren un t
por la vergüenza y mi
. Aunque, debo decir, algunas eleccione
Lady Donatella. Si bien valoro tu opinión, creo q
e algunos podrían considerar que ciert
ligereza, mostrando
¿cómo prefieres que sea la próxima fiesta? Creo que deberías pedirle pers
sonrió con
refinamiento. Esa s
rspectiva para futuros eventos. ¡Espero que encuen
eflejaba la confianza de una reina que no teme desafiar las convenciones establecidas