Jen
mios con estas presentaciones, mi actuación fue espléndida
o el tiempo que es
-le dije al chó
le sonreí mientras me baja
onrisa- gracias por mantener el secreto y buscarme
tarde, Sam debe estar esperándome para vernos el fin de semana, pero logré terminar antes y decidí venir a casa, lo extrañaba mucho. S
voz baja. Todo se dio tan rápido que tomé
orar ahora que me tomaré un descanso de dos semanas en la compañía de ba
mi llegada y, tal vez seducirlo un poco. Tenemos unos meses sin
apa» me repetí
jer que se parecía a la de mi hermana Paulette y detuve
casa a estas horas?» cas
o -escucho la voz de la última persona que esper
pero no quise dárselo. No era como las otras chicas, no me vendía a nadie, quería que mi trabajo hablara por mí y así ha sido por cinco añ
oz melosa de la mujer trataba de convenc
, no puedo hacer
con una mujer de cabello rubio en su regazo totalmente desnuda. La
insistió cuando me vio por el rabil
y luego se besan vorazmente- pero, no puedo
ué mi celular en automático y les grabé sin saber el verdadero motivo del porque lo hacía, cuando tuve las pru
ne que se
penas ahora cuando tengo minutos aquí de pie como un
uí? -dijo el f
ndo darle u
esposa quería darte una sorpresa- Paulette s
o de limpiar mis lágrimas, pero salían más- sabrá Dios
da- se jacta mientras se baja de la cama
por favor dile a tu amante que se largué porque no respondo! Somos
r- no te hagas la desentendida, sabes que vamos de mal en peor- me dice de manera d
as te revolcabas con otras y una de ellas es mi herma
n soledad, quiero ser más fuerte que esto, pero más lágri
él, no quería verlo más, sin embargo, no le importó me giró y me vi
ó y me miró con desaprobación- pero la niña perseguía su sueño,
ue se acostara con mi herman
ierda- quería detener las lágrimas, pero seguían cayendo
lo pasaban dos cosas: mi espos
mbre joven y guapo que tiene ganas de que su mujer lo seduzc
te- apreté las manos en puños queriendo romperle la nar
ería ser tu vida! -me repr
no me di cuenta del monstruo con
garre se apretó y me zarandeó fu
años vi el verdadero rostro de mi esposo.
que la voz no me temblará, p
de sus habitaciones alarm
que puedes hace
le dije con toda la rabia que sentía- ¡Quiero el maldito d
dio en su mirada. No
di cuenta an
er estado tan cieg
ogro estaba muy cerca de las escaleras y p
o único que pude hacer fue proteger mi
mi cabeza y vi a Sam Kessler verme desde lo alto de las escaleras sin una pizca de remordimi