una primera cita con ella, al anochecer, pero, al salir de su habitación, pudo notar como los sirvientes la observ
o a ir a la habitación de Damian, en
ansando. Dijo que estaba agotado, y
reguntado algo, por favor respóndeme. Es extraño que Damian salga los f
en la noche y regresó
n? ¿De quié
a!-Exclamó alejándose con rapidez de Bella, quien mir
la puerta con sus nudillos, pero rep
ama de llaves la miró-Si no quiere sal
e... No lo
señor Damián despierte por s
ro, su atención fue captada por los gemidos provenientes de la habitación de Damian, hac
a, lo
temblaron-Dame
con la manija de la puerta inten
Anne!-Gritó y su
ra, no d
, maldición!-Interrumpió y ar
ojo, la llave indicada para la puerta. Puesto que, sus manos temblaban co
alma, pero, su mundo se derr
encontrando en el suelo, ropa interior femenina roja, un par de t
a rubia moviéndose con pasión mientras ella apretaba
uerzas abandonaban su c
salió de la mujer, l
Quién te permitió en
u esposa maldición!-Gritó-¿Qué de
con descaro y se puso de pie mos
la habitación tras tom
lágrimas y avanzó h
ves?!-Propinó una bofetada en su meji
!-Gritó-¡No es tu maldito problema lo queror, ante sus palabra
u esposa, y nunca te has a
fuerza-¿Quieres que te folle? ¡Dime!-Gritó nuevamente-¿
intento liberarse
spreciables
se inclinó
no a ti. Podrías haberlo dicho antes, y te habría hecho que me
o
entonces,
blanco de Bella, y lo subió hasta
uiero hacerlo, por favor
re ella con rapidez mientras guiaba su miembro ha
una manera exagerada y su cuerpo temblaba. Damian se detuv
o tanto que...-Apretó sus dientes y suspiró- Nlla continuó sin detenerse mientras bajaba de vuelta su vestido: el ama de llaves entro
lir lastimada.-Susurró
a... No quier
los trabajadores de la mansión: tan pronto entro en su habitación, lloró desconsoladamente y tomó su celular en sus temblo
a, la llamada n
timientos, y por más que intentara, su llanto no se detenía: mientras repetía en su cabeza lo ocurrido
marcándole a Massimo