seúntes caminaban por allí con paraguas en mano, la lluvia golpeteaba por encima de sus cabezas con
argo pero no mantenía mucho el calor. La misma se arregló un pa
a su cabello largo castaño recogido en un turbante para cuidarlo del friz que le daría si se mojaba con las gotas de lluvia. A pesar de ll
enitencias cuando hacían algo descabellado, como lo era para él estar en condiciones poco estéticas, verse horrible no era algo propio de una dama, y eso ha
n poco más íntimos y personales con cada cliente que se los pidiera
o se podía permitir verse ni por un segundo en mal aspecto, n
emente no pudieran aguantar más, era increíble saber que todos ellos esta
er una excusa en la cual meterse, es decir, ir varias veces a la semana sin levantar sospecha, so
de agua, sobre todo porque sabí
ipo de seguridad, por lo que le pidieron identificación a pesar de conocerla muy bien, ya que sin esos documentos no se podía otorgar el pase a las inst
ar la atención, por eso los hombres mayores la contrataban más, y es que su piel se veía tan lozana que se hacía casi impo
je en el cual se incorporase. Su larga cabellera rozaba lo que eran sus glúteos, pero lo hacía de una manera sutil,
tante que se hospedara en el hotel Lander, también dando su opinión a distintas cosas y a veces ayudando co
o en su ambiente laboral la querían demasiado, teniéndola en alta estima a pesar de las muchas
no en el cual trabajaba. Ellos al ir luego en la noche la encontraban allí bailando exóticamente en el tubo y moviendo su cuerp
es, quienes en serio la tenían mimada desde todo punto de vista, y aunque no tuviera mucho tiempo para sí misma, de todas formas disfrutaba lo que hacía diariamente para su sustento y entretenimiento, eran ambas cosas, porque no po
ermitía en lo absoluto hacer nada más que mirarla toda la noche y esperar incansables turnos para
se le hacía por completo imposible, en especial cuando sabía que tenía e
endrías- le dijo su jefe apenas entrar,
s, además, solo falta un minu
te-contestó el hombre de estatura pequeña y bigot
uitando el abrigo de sus hombros, dando a conocer el traje que l
s por el bonito diseño con incru
el diseño empleado en la tela. Ella solo secó un poco sus tacones, los pasó por una alfombra para limpiarlos por debajo, buscó su antifaz
cuenta que las que se presentaban después de ella perdía bastante público, solo porque muc
lo que decían sobre ella, que era una descarada que disfrutaba del sexo,
como música p
petía cada semana para no parecer que siempre hacía lo mismo, pero esa era una de las favoritas de la gente, en serio dej
el escenario mientras que los invitados
tación terminase, siempre dando las gracias con una ovac
asadas al menos dos horas en las cuales las demás chicas eran
quisieran hacer, de manera que ninguna de las chicas se atrevía a l
no fuera hermosas, pero por alguna razón, siempre la veían más a ella que a c
ciaban seguido, pero ella no tenía la culpa de ser
informaron que ya había como siempre una fila esperando por
que son personas raciona
ien estaba con los brazos en jarras mirándola con algo de reproche, y es que para él nada
je, una simple conversación o por el contrario llevándolo consigo cuando se
nor de edad, pero no dijo nada, solo entró en la habitación del sótano con el
que atenderlo de la mejor forma si no quería malas reseñas de su parte ni una p
u belleza, y no le parecía un mal negocio, no desde que comenz
ía para nada que ella participara allí, pero cuando la vio actuando, quedó paralizado,
ero una vez que le tomó el hilo, hizo d eso su propio estilo, de manera que no se parecía su actua
do que estarían dispuestos a hacer cualquier cosa por ella, en más de una ocasión lo habían mencionado, y aunque daban miedo ciertos hombres, ig
simplemente marcharse o atenerse a las consecuencias legales, las que no eran del todo cóm
e podían ser llevados a prisión, sobre todo teniendo el poder monetario
a población respecto a tener o no poder monetario, la frustración estaba a otro nivel cuando los más pobres no tenían absolutamente nada para salir de la situ
azón a alguien, los juicios casis siempre estaban comprados, de mane
no pensaba en estas cosas banales, entonces estaría en problemas y muy serios, ya que lidiar con personas e
todo era sistemático, como si de alguna manera fueran robots en vez de personas, era tocar la combi
del tipo carnal, sino en realidad de lo que iba más allá, al
las odiaba porque sentía que no eran del todo reales. Rech
lientes, del último ya era su
nde fue su sorpresa cuando se dio cuenta de que era el
an elegido, pero el hombre antes de mí me
joven como para estar buscando este tipo de servicios- dijo ell
petición un tanto extraña, quisiera que ya no se burlaran
co como una
no... Pero por favor
partido sobre ella, así que s
ñana a las diez, y