as no son
a And
años
rfecto mundo de Camila cercenaba su pensamiento sin descanso alguno, la mantenía en medio de un limbo en el que todo a su alrededor le lastimaba la piel. Sentía el cora
mpleto, no podía perdonar su traición, no lo haría por su propia hija, ella no quería enseñarle a Sofía una lección equivocada, las mujeres no tenían por qué soport
adres cuando estos se negaron a aceptar su relación con Santiago, hizo de lado sus estudios cuando salió embarazada para dedicarse al hogar, había perdido todo p
ver a su marido se lo arrojó a los pies. Con el rostro humedecido por las lágrimas derramadas y los o
esto? -cuestionó el hombre sin entende
sa! -bufó encolerizada, sintiendo que lo que c
sa y no pienso mover ni un solo dedo de aquí! -sen
que nunca me iba a enterar de que me has estado engañando todo este maldito ti
de sorpresa al verse descubierto, sin em
ana -siseó acercándose a ella-, no pienso dejarla a ella y tú no puedes dejarme porque si lo haces me qu
declaró Camila, impulsada por la rabia, aunque e
irió Santiago con una son
fuerza mientras un pitido ens
aldito problema, yo no pienso seguir sacrificando mi vida por un hombre que no vale ni mierd
orra, entonces tendré que hacerlo yo -declaró al tiempo que s
o sus palabras fueron cortadas por el
o de aquel vestíbulo solo se podía escuchar el chasquido que hacía el cuero al impactarse con otro cuerpo más resistente, los gemidos y
la mente de Camila pasaban todos los recuerdos de los momentos en los que él la hab
el verdadero rostro del ser aparece ante la vista: descarada, fiera, infundiendo temor.
do costara, ella se iría con su hija
azo-, yo hago lo que se me pegue la gana y tú tienes que quedarte callada, si no te puede
ió su pregunta, a lo cual su esposa hizo un movimiento casi
e Camila se abrier
No! ¿Cómo iba a borrar esos recuer
la niña de tres años al tiempo que se acercaba a la pequeña para tomarla en brazos, a pesar de su muy corta edad, Sofía había demostrado
dos de su cuerpo para que Sofía no se diera
n, ven, vayamos a tu cuarto. -Se acercó y se la arrancó de los brazos
mar a Sofía solo había sido la de acentuar
su noche apenas había empez
su hija y un par para ella, sacó el dinero que había reunido de las compras, los documentos de su hija y los de ella y salió de esa casa
hija que sin decir ni una sola palabra ent