tapa de su vida en la que, su cuerpo, su gente e instinto le exigirán un heredero. Un bucle sin fin, en el que una
ar, una decisión difícil. El ambiente es hostil, a las mujeres no se les exige de igual forma, ya que su papel está decidido desde el inicio. Las
paldo. Sus hembras también son protegidas por el alfa, es mal visto incluso en los alfas el tener más de una pareja, ya que deben
otros machos harán hasta lo imposible por enlazarse, ya que representa la perpetuidad de su sangre. Esto incluye a las parejas de otros,
de Njord no está tan preocupada. Desde que se pudo valer por sí mismo a los ocho años, se le permitió permanecer a la misma comunidad que su madre, la p
rd no ambiciona ninguna hembra, por lo que tiene la opción de viajar para encontrar una, eso en caso de que otro macho no lo enfrente primero
liaridad que les han entregado los dioses a su gente, el don de dar vida a pesar de ser machos. Hay viejos alfas a los que se les humilla de esta maner
rada, las comunidades cercanas se acercan a Njord, dando vueltas a su alrededor para percibir alguna hormona que les indi
ambién, reconocen el peligro en su belleza, además de un instinto de competencia. El cual, Njor
ras dejarán de enseñarle, los machos de entrenarle, toda la comunidad le hará a un lado. Sus padres, a pesar de
de buena gana los cambios que sufrirán sus cuerpos al ser tomados cómo hembras. Estos cambios no son inmediatos, se darán con la continua copulación, lo que significa aún más pelear
ómo hembras, le son instruidas desde temprana edad. Njord está consciente que incluso algunos machos menores son más diestros que él en combate, s
o tras de esto. Los obsequios de otras comunidades también le han sido entregados, con permiso del alfa, algo poco común hacia un macho. En c
pronto pasará por ello, siempre le pare
rarse a su alrededor. Una vez las hormonas dan aviso, las peleas por probar quién es el macho más fuerte comienzan, si quienes pierden
ibe y lo derrote. Por supuesto, esta no es la opción más popular, para empezar la población es escasa. Por lo que
bras menos deseadas, suelen viajar o cantar para mostrar sus atributos, aunque se debe aclarar que aún las menos deseadas tienen una apariencia etérea. La
r una hembra que les derrotan. En otras ocasiones, se da mientras cruzan territorios desconocidos, una vez son derrotados es más fácil dominarlos. La dif
achos que son sometidos por otro lado, pelearán contra el otro macho por su honor en cada ocasión, hasta quedar en cinta. Solo entonces aprenderán a bailar para su pa
para pensar que es debido a él, pero sabe que el alfa estará ocupado manteniendo el orden con los otros machos que ya se han enlazado, ya que deben de procurar por los más jóv