desgarrador inundó
s- una voz feme
medio de jadeos y llanto p
mpapada en sudor junto a su cabello dorado todo pegado a su frente, su piel erizada por completo, la sábana debajo de ella manchada de
de forma forzosa, pero estas se encontraban amarradas tan reciamente que sus mu
no la sacaría de ese momento tan tortuoso. Se concentró y respiró pr
e estaba pálida y que al parecer no sería de mucha ayuda y en la puerta su hermana menor con la que Xana nunca había tenido el mejor de los roces. Ellas...
o se lo habían advertido... después de todo no eran hijos de su actual esposo, sino de quien era su mate, con quien
as tenía aire en sus pulmones y cada respiración era más dolorosa que la anterior. La sensación de a
stación se habían cumplido y su vientre había crecido lo suficiente para dejar marc
su grito casi des
cos los que se convulsionaban
mujer con tono demandante- V
xpulsarlo de ella y un dolor cegador la atravesó cuando su primer cachorro vino a
ue gemía ligeramente, más grande de lo normal y lo ponía en una canasta- Al pare
ta que por fin su interior quedó vacío al igual que la sensación que la invadió. Esta vez las
ismos términos al ser ella su tributo para aplacar su rabia, ahora tenían algo que los unía, solo que él... no estaba ahí. Ni siquiera sab
en ese momento sus hijos tendrían los minutos contados. Podía escuchar los leves gemidos de las dos crías reci
límpiala, no le gustará verla así- dijo la partera a la chica más joven,
sonrisa para nada agradable y con razón, el lugar al lado de Remy estaba o
los pasos de ellas alejándose
iraba temblante- Ayúdame- le dijo pálida
rtos muy grandes, se notaba que no
pasando su vista de la chica a los cachorros temiendo por ellos y
unque se notaba que realme
cuando regrese Remy te regañaran- manipuló Xana viendo c
Y cuando la chica la soltó la recién madre entrecerró los ojos, estiró el brazo, agarró la lámpara cerca de su mano y la es
pero la situación lo ameritaba. Ahora era madre