s que intentaba olvidar la escena de su padre inerte sobre su
se encargó que Gabriela creciera siendo una niña completamente
ó del baño, necesitaba algo fuerte para calmar su dolor, sin dudarlo un segundo al estar co
mejillas, pronto se detuvo en la zona de bares menos exclusiva de l
estaba metiendo, caminó por inercia propia hasta estar dentro de una pequ
re calvo al ver a la joven e
e rápidamente, giró y vio como el hombre que hace unos segu
retrocediendo dos pasos hacia atrás, golpeando su cuerpo c
fiesta apenas comienza -exclamó ot
quivoqué! -vociferó Gabriela, al senti
viniste a provocarnos, y no es justo con nosotros ¿Verdad muchacho
nte a su bolsa, y sacó el gas pimienta que su padr
le había dado clases de karate, incluso de defensa personal, solo que en ese momento estaba total
er que Alan abría la puerta del auto para bajarse, estaba realmente fu
e que salió de casa, hasta el bar
loca al entrar ahí?, definitivamente debe estar loca -vociferó A
a había tomado de la cintura, Gabriela ágilmente se había soltado, y desocupado c
iste a mi amigo se quedará así? -dijo otro hombre mi
o! -exclamó Gabriela jala
a bastante ruido, escuchó perfectamente los gr
a con seguro, así que sin importar absolutamente nada, levantó una
en plena tormenta, al ver que varios hombres i
golpeó fuertemente en su nariz, los otros hombres al ver que Alan golpeaba a su amigo se abalanzaron encima
, al ver que al frente suyo estaba u
giró para encontrarse con los ojos color ave
ntó Alan tomando a G
ada, se colocó de pie, y se hizo aún lado de la espalda d
lamó Alan mirando fijamente a Gabriela, quien asin
isa y una leve sonrisa de satis
le gustaba pelear ni mucho menos, solo que
nte, tomó sacó y salió, su mirada viajó a
ó Alan tomando a Gabriela del brazo
conozco -exclamó Gabriela a
beza, en verdad Gabriela era
pero te recuerdo que soy el que te
os como platos al ver que Alan caminaba lejos de ella, s
omar algo fuerte!, ¿Podrías lleva
elular y texteo a Ethan.
que le hiciera olvidar, olvidar la muerte de su padre, olvidar q
ompleto silencio hacia el bar, donde pidieron dos botellas
s, su mirada eran realmente inquietantes, por su cabeza pasó el recuerdo
nsumiendo por completo, ver a Gabriela justo enfrente de él
lla lo siguió, estaba agradecida por lo que él había hecho,
ar, en par. Alan tomó a Gabriela del cuello,
las prendas cayeron lentamente, haciendo q