cuidad de Londres, Abril se paraliza e
ignific
r las cosas bien, te lo suplico, está se
iones de acostarme
go, escucha los latidos de mi corazón-coloca s
ud de su abuela y el absurdo recurso que utilizó él para ayudarla. De pronto, se le acerca y la mira con mucho detenimiento cómo preguntándose, ¿d
o. Si no quieres, no hacemos nada, solo no te vayas, por favor-la suplicante mi
miedos. A pesar de ser una mujer fuerte, es una joven inexperta, hasta ahora a sus 23 años se mantuvo virgen, evitando a toda costa entrar en una relaci
amente, la respiración de ambos se acelera y el beso se torna más profundo. Al bajar del e
que me hiciste? -murmura A
fue usted-responde ella
más t
n la hace salir de la profunda quimera donde se había sumergido
y cargada de números detalles, pétalos de rosas, globos por todos lados en tonos, rojos, blancos y rosas. Sonríe, por
en, relajado y sereno. Detalla sus finas y delicadas facciones con agilidad, se pregunta: ¿cómo un hombre con él puedo fijarse en ella? Habiendo ta
lar, percibe muchas llamadas perdidas de su madre y Rita.
l, que
as cuatro de
losa, espero haber resarcido todo el mal, que te pude haberte he
tú se pudo fijar en una mujer como yo? No me estoy haciendo menos, pero se
e menos me importa, mi corazón te eligió a ti n
ndo todo m
vía co
uc
nte y mi todo, Abril Wilson. Cuando vas a ent
le
escucha mi nomb
fe y yo tu
problema, me b
e trabajar, mi fa
dinero, t
o estoy contigo por dinero y lo sab
a eso es el dinero par
el trabajo, no puedo
me olvidaba lo
No quiero que pienses,
otro bufete para ti
ta,
el trabajo no te preocupes. De n
le, tal como la soñé-se suaviza Abril
na y las estrella
ás l
i mundo
regunta Abri
gresa a
abitación de hotel donde disfrutan en este momento, vuelven a unir sus cuerpos y hacen nuevamente el amor con
o des
uyendo que su madre estaba en el hospital, p
hasta Rita te estuvo llamando y tú no contestabas, Abril, es la prime
amá, no volv
nes n
ela? -evade muy háb
nta Abril, llevas
o mamá, me tengo que al
madre, quedando muy pensat
nsar que se estuvo negando a experimentar todo lo vivido, por culpa de su difícil carácter, que por lo general le juega en contra
*
e, en el
ción y sonríen. Sandra, la mira extr
é fu
te en
aditas co
ajando-escurre velozmente sus insinua
brupta llega Madison y se i
nder Lutter, al igual
te refieres? -se ha
bien de qui
oy ad
traes con ella, los he estad
s sin sentido, ¿ahora rec
s inevitable para mí no sentir celos cuando me siento amena
on, si sigues con tus dramas,
é me tra
illas hacerlo. Entiende de una vez por todas, qu
la mosquita muerta
oficina o
rdad-baja Madison la mirada con rab
dis
este punto, intuye es muy difícil no enloquecer por un hombre tan elegante como él, Alex en cambio no puede reprimir su s
os documentos, pa
, querida, ve
nir y darse cuenta. De paso, no soporto
hacer algo
ías a trabajar con
en enviaré es a Madison.
ero pro
, ya apacíguate
rdo-acce
, es la primera vez que tiene una relación formal con un hombre y vaya que