ri
Me pide que la deje en el Puente de las Luc
aventón -agrad
Ella frunce el ceño, estira los labios en for
ta desde el primer día en que la vi en este mismo lugar. Bajo de mi co
repite con la mis
in pestañear. Sus ojos me cautivan. Baja la cabeza y se encamina hacia un callejón
rranco a toda velocidad. Mientras manejo, sonrío para mí mismo. La adrenalina se apodera d
a. Es callada, tímida... o al menos lo aparenta. Me pre
n embargo, me gusta. No me cabe duda. Sin darme cuenta, ya estoy sobre la aven
s guardias y entro al salón. Busco a cierta personita, pero no la encuentro. A lo lejos oigo s
ito! ¡Por fin llegaste! -exclama ex
su mejilla. Ella ríe. Amo demasiado a esta pequeña.
total. Es la viva
ia ríe y corre por toda la sala mientras mamá la fulmina con la mir
te es igualita a ti cua
e y niega c
hombros y vuelve a llamar a mi pulguita men
n por toda la cas
primero que me viene a la mente es el rostro de mi ga
ar de una manera que a cualquier hombre le haría perder la cabeza. Me gusta mucho. La quiero para mí. Es u
frustrado. ¿Quién demonios viene a molestar ahora? Abro la puerta. Es
ersidad siendo el primer día. Qué malo -espeta fingie
a mirando el traser
eres -ambos reím
mucho, -le
la mejilla y salimos
a juega con su perrita. Papá le hace mimos a Analisse. En serio, ellos aún se aman con l
tante -inquiere mi padre, sa
cómo haces para que mamá s
ario, mira a mamá co
a era tan difícil... con una actitud de los mil demonios. Pero valió la pena conquistar a
á. Se nota cuánto la ama. Miro a las tres mujeres m
é tener a una mujer para toda la v
cambia. Seguro ya sab
ida. Ailana estará feliz si encuentras a alguien más. Sabemos lo que significó
o bueno -comento, fi
bro, me deja un beso en
que gustas
ivo la
a revisar los horar
antes de volver con
el álbum de fotos. Paso una a una, las fot
cilla. Cabello rubio, piel blanca, ojos gris verdosos y lab
intacto. Sé que estarás feliz cuando encuentre a alguien linda co
en los momentos