ción, limpiando el lugar con su luz. El despertar en la lujos
staba sumido en un sueño profundo. Como se había quedado despierto hasta tarde la noche anterior, le costó mucho abrir los
na rompió el silencio esa mañana y despertó a Amelia
lorar el entorno desconocido, se quedó pasmada cuando no pudo reconocer dónde se encontraba y peor cuando vio que estaba rodeada por un hombr
atención en la habitación, al parecer,
a ella y señalándola con una mano adornada de joyas verdes. "¡Te advertí
volvió para mirar al hombre que estaba junto a ella, se quedó congelada, realmente no se lo esperaba. Por alguna razón, no podía dejar de verlo, se sentía inevitablement
á, no sobreactú
". Justo cuando intentaba explicarse, Lucian fue
reíble de explicar la situación. Entonces, de la nada agarró a Amelia entre sus brazos y
razara aunque no pudo evitar fruncir el ceño y preguntarse por qué ese desconocido la llamaba su novia. ¿O acaso había
ró la garganta e intentó negarlo, pero no
te y le dejó la cabeza en blanco. El terror en su inte
s consecuencias de beber demasiado, lo menos que esperaba era que las cosas devinieran en seme
él, adolorido
l!". Luego se limpió los labios y maldijo en s
dolor en su lengua, Lucian se acercó a ella y la atrapó entre sus brazos de nuevo, luego le dijo en voz baj
ó mucho los ojos y lo agarró por el br
é había pasado después? Ella no tenía ningún recuerdo en absoluto y, a pesar de que no creía en las p
go se volvió hacia el hombre en silla de ruedas y dijo: "¿Ves, Ni
An y tú debes casarte con Shelly cuando cumplas los 30. ¡Ahora que estás de regreso, debemos cumplir con esa promesa!", le
que estaba pasando; aunque sus ojos reflejaban una inocencia pura, podía sentir
n mí!", respondió Lucian con firmeza mientras s
que esbozó una sonrisa complaciente y le susur
das, Lucian captó su
tunidad era cooperar con él. Amelia no era el tipo de chica que se emborrachaba así con fr
o deberían obligarlo...", suplicó mientras
ego posó su mirada sobre Nico
La mujer estaba histérica, así que agarró la mano de Nic
de los hombros de Amelia. "Pero he decidido casarme con ella, es m
cian sobre sus hombros, pero no pudo evitar sentirse mal cua
jer frente a ella la trató mal, podía comprender
que se ha puesto Shelly ahora; estoy segura de que podrías enamorarte de ella con solo verla", siguió parloteando la mujer de mediana edad
Esta vez habló lentamente y luego añadió con un brilló particular en los
la declaración de amor de Lucian. ¿De verdad estaba fingiendo? Bueno
rferir con su decisión, mejor regresemos a casa". Nicolas dio un largo suspiro y luego se volvió
se arruine la vida así. ¡Más tarde de arrepentirás!". Dicho eso, a