El dulce premio del caudillo

. Land

uerta cerrada paralizó la mano de Kaelyn Bar

e la punta de sus dedos hasta el centro de su cuerpo,

abían tenido sexo. Pero ahora, al escuchar la voz proveniente del int

apoderó de su pecho. No podía creer que su espos

fermedad que imposibilitaba su vida sexual, así qu

se de lo contrario. Pero cuando escuchó unos profundos gemidos masculi

su esposo, lo

ostenerse. Las lágrimas nublaron su visión y se derramaron con libertad mientras

uidarlo con una devoción inquebrantable. Durante dos largos años, ignoró por completo las burlas y las mi

ismo. Todavía recordaba el día en que él despertó, el calor de su mano mientras envolvía la de ella, así como su promesa de casa

egando su corazón y alma para ser su espos

como si un cuchillo le estuviera clavando el corazón. Todo lo que había

vuelta, pero sus pies se congelaron cuando es

sperándote como la esposa devota que es. ¿No es... malo para ti que estés aquí conmigo

acio para ti en mi corazón. Kaelyn no es más que una supl

casi tierna, sus palabras golpearon

ido a la traición y, con manos temblorosas

que hice mal? ¿Por

ó un abrigo y se lo echó encima de él y de la mujer. Su ceño

e dije que esperaras en

temblorosas. Su indiferen

¿Ni siquiera

ron su visión mientras se deslizaban por sus mejillas. "Si no hub

sfixiante. Se le veía tan alterado que ell

cio con una voz temblorosa: "No culpes a Land

la, ya que algo en su r

aire Hewitt, la amiga de

ndo se casaron, pero luego desapareció, así que Kaely

a mujer que la había reemplazado,

udible, declaró: "Si no querías quedarte conmigo, me lo podrías haber di

mos claros ahora: quiero el divorcio. Claire tuvo qu

orosamente, pero su voz se mantuvo inquietantemente serena. "Muy bien, hay que di

ire se quedó boquiabierta. Ambos in

nada, se atrevía a exigir la mitad

ridic

ha dirigido el negocio familiar, mientras que tú te has quedado en casa disfrutando de la vida. La familia Barnett te lo ha

arme sermones sobre justicia. Voy a ser muy clara: no estoy pidiendo permiso, estoy haciendo una d

lenció a la pareja. Sin darles otra mirad

celular y sus dedos se posaron sobre la pantalla. Tras una br

ro lado de la línea se escuchaba muy emocionada. "¿Kae

de la villa de Landen. ¿Puedes re

Estaré ah

por el rugido de los motores cuando varios autos lujosos se detuvieron

. Durante años, había enterrado su verdadera personalidad, encog

abs

evantado y no era demasiado t

ordinado, acercándose a ella con preocu

uy abiertos mientras veía las mancha

antable como Kaelyn.

os restos de sus lágrimas mientras declaraba: "No es na

momento procesarlo antes de que una amplia sonrisa se extendiera por su rostro, para después soltar una agra