undos y expresivos y su cutis naturalmente impecable irradiaban una belleza casi celestial a primera vista. Su carácter sereno y distante le recordaba mucho al de su
hombre, ella permaneció imperturbabl
. El temperamento de esa chica reflej
ente a un avión privado. Declan
rones antiguos, las lámparas de araña tachonadas de cristal e incluso, el techo diseñado para imitar un cielo estrella
volaban y de pronto habló: "Esta ruta ll
en trabajo de parto al llegar a Foiclens. Tuvo que dar a luz en el hospital más cercano, donde se declaró un incendio. Le dijeron que su recién nacida no había sobrevivido, perdida entre las llamas. Pero ella juró haber oído los llantos de un bebé y nunca dejó de creer que su hija es
ste lugar, su economía no era ni de lejos tan poderosa. La familia Reed, aunque rica dentro de e
o solo no vivían en la villa Cloudstream, sino que pertenecían al
elegante arquitectura, cuyas paredes estaban cubiertas de
athe: la Mansión Hillside. Era tan prestigiosa que solo lo
nte: "Señorita Harper, esta es la
ión, un hombre y una muje
eguía siendo evidente. Sujetaba a la mujer, que vestía con tonos suaves y llevaba el cabello largo recogi
lie, la mujer en cuestión, estudió el rostro desconocido de la joven, pero un i
a mientras las lágrimas corrían por sus mejillas. Después de más de dos dé
itual actitud severa, tranquilizó a su esposa con dulzura. "Ahora que nu
sensación de familiaridad, especialmente por el hombre. Esta
eros padres. Hemos pasado años recorriendo la villa Cloudstream sin darnos cuen
untó, dudando: "¿Ere