ecialmente cálida
ente llegó a su departamento. Bajando del auto, él se acercó a la entrada y presionó su dedo sobre el escáner. La p
sta alguna. '¿A dónde fuist
uso los documentos que tenía en la man
alcoba, el hombre vio que había ropa de mujer esparcida sobr
h! ¡Sp
agua estaba cerrada. El hombre miró hacia esa dirección cautelosamente, y aunque la puerta sólo se abrió unos cuanto
ojaba la corbata. Pero justo cuando había puesto su mano en
cuerpo. Cuando vio que Malcolm estaba allí parado, ella se sorprendió y saltó hacia atrás, su melodioso canto se convirtió en un
pero poco después se sintió c
da. Ella parpadeó incrédula de que efectivamente fuera Malcolm y se ajustó la toalla al cuerpo: "¿Cuándo...? ¿Cuándo llegaste aquí? ¡C
de Poppi eran largas, delgadas y tenía una piel suave y blanca, además de que había
a otro lado y murmuró: "No todo el mundo est
los brazos sobre el pecho. "¿Entonces por qué irrumpi
as olvidado, ¡esta es mi casa!",
chispa de astucia en sus ojos. "¿Qué haces en casa, cari
alcolm estaba
reja, no?", una sonrisa triunfante apa
rló, se dio la vuelta y caminó hacia la puerta. "Vamos aba
rme", Poppi respondió con
, Malcolm dijo mientras de
ador, allí se aplicó suavemente una crema hidratante e
el sofá con el ceño ligeramente fruncido, la forma en que la luz de la
la habitación con una luz dorada que complementaba la mesa de mármol negro, juntos hacían una combinación fresca pero elegante. Sin embargo, la
nte, Malcolm empujó con cautela el grueso documento sobre la
o entonces, algo llamó su atención: "Este es el acuerdo postnupcial
leyó y lo aprobó",
revisó las siguientes dos hojas. "Mmm...", ella murmuró
te en su asiento con los puños a
saba que sólo habíamos acordado q
veo por qué no hacerlo un año más", Malcolm explicó severamente
quisición, ¿cómo puedes estar tan seguro de que po
ez que había observado la cara de Poppi de esta manera. Malcolm sabía lo hermosa que era Poppi, pero no podía evitar sentirse aturdido por la forma en que su ojos brillaban y sus labios se curva
que es mucho tiempo?", Poppi protestó mientras la sonrisa maliciosa que Malcolm tanto alucinaba aparecía en sus
nuó: "Además, tienes permitido tener citas y hasta un novio, siempre y cuando cumplas con tu parte del acue
oreja y fingió estar sorprendida, "¡Eso es genial! ¡Debiste haberlo dic
y sólo firma", Malc
ó que Malcolm ya había puesto su nombre en la línea punteada, entonces estiró la mano y buscó a tientas un bolígra
ceño fruncido mientras sacaba rápid
ramente. Ella firmó con elegancia y una sonrisa complaciente para luego devolverle el
ntó y declaró: "Incluso pued
, Poppi estaba
io también se acabará, está escrito allí, será mejor que lo leas atentamente",
e lo planeado y sí, lo leeré detenidamente", Poppi ta
esopló: "Gracias, entonces". Luego to
lo llamó con una
uvo en seco, girando la cabe
o, ¿no tienes nada que decir?", P
lcolm respondió con desdén, parecía que él ya no
l dinero", e
uieres?", Malcolm no pudo