año. Afuera, la lluvia golpeaba el cristal sucio de la ventana, cada gota un eco del llanto que ya no podía derramar. En la pantall
bella,
e estaba ganando el prestigioso
su familia por su apoyo incondicional. Mentirosa. Ella me lo había arrebatado todo, no solo el diseño, sino mi beca, mi lugar en la Academia de
obre mis ruinas. La imagen en la televisión se volvió borrosa, los bordes oscuros se cerr
bell
, todo fue
o profundo
o de sol me golp
antigua habitación en la casa familiar, la que no había visto en más de un año. La luz del
n saludables. Mi cuerpo no dolía. Me levanté y corrí hacia el espejo. La chica que me devolvía la mirada era
lla se iluminó. La fecha era el 15 de abril. El dí
í estaba, colgado y perfecto, el vestido rojo sangre con bordados do
real. El peso de la tela bajo mis dedos, el calor del sol en mi piel. Había
Pero esta vez, no había desesperación. En su lugar, una furia fría y calculadora comenzó a arder en
unos golpecito
ta? Se nos va a hacer ta
rior, esa voz me habría parecido dulce y p
aba al cuello, el que mi abuela, la legendaria bailaora, me había dejado. Era un pequeño sol
í, mi voz sorpren
a. Sus ojos, sin embargo, se desviaron por un segundo hacia el vestido rojo en el ma
n. "Es tu gran día, prima. Ese vestido es u
ente, sin sonreír. No me
abella?" pregunté, m
vaciló por
ecesitabas ayuda. Ya sab
voz baja y cargada de intención.
La confusión en su rostro fue el primer sorbo de una venganza que sería larga y satisfactoria. No i
ertada por mi repentina frialdad. Vi a nuestro antiguo rival, Marco, estirando en una esquina. Sus ojos se encontraron con
tido, uno azul y bastante soso, estaba colgado. Su mirada seguía volvi
s bailarines y personal de la acade
El diseño del vestido rojo que voy a usar hoy es mío, creado y confeccionado por mí. Cualquier intento de
El rostro de Isabella se puso pálido y luego rojo de humillación. Su p
?" balbuceó, intentando parecer
cero. "Entonces no tendrás problema en mantenerte le
sto de preparación, sintiendo su mirada furiosa clavada en mi es
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