ue pensaba que podría hacer alguna locura si me dejaba sola), mi mo
suelto a llorar de forma incontrolable tanto así que tuvieron que lla
, tomaba un baño y volvía a dormir para después comer y volver a dormir así estuve una semana entera, hasta que un día mientras desperta
stra hija sumida en esta tristeza -Puedo escuchar como mi madre trata de aguantar el l
lo que le hizo a nuestra hermana – Mi hermano A
a tu hermana -Responde mi padre en
. Puedo pedir unas semanas en el trabajo y ocuparme de ella -Comenta mi hermano Pierre con una
ia y no podía dejar que renunciaran a sus vidas en Francia por cuidarme, tengo que dejar atrás este do
emás no me quedaré sola doña Regina estará aquí conmigo -Y cuando digo esto puedo ve
niña, siempre m
ue decir me quedaré contigo y no puedes discutir, por lo menos déjame
avor, ma
de que estas mejor y no me discutas señorita! – Responde mi padre
inuar con mi vida el mundo no se acaba solo porque un hombre sea tan miserable como para dejar a su futura esposa en el altar- A pesa