menos bella de lo habitual. Rachel era tan encantadora que
l con furia, y luego se burló de la astuta. "¡Si ella no puede hac
oz, escuchó una hermosa pero ext
n se a
vo con cuidado el paraguas para Clark, mientras que este último solo echó un vistazo a Vi
, y luego una pizca de sorpresa cruzó por su ro
vo frente a ella. Miró a su alrededor con sus ojos fríos y profundos y dijo: "Si alguien se atr
que todavía estaba tirada en el suelo. Cuando escuchó lo que dijo,
culpando por tratar a mi hermana así? En realidad, estábamos bromeando. Es
los ojos de Clark. Fue entonces cuando se
jer. ¿Por qué? ¿Por qué me tratas así ahora? Nancy no pudo evitar derramar lágrimas, y luego señaló ferozmente a
quiero repetir lo que dije. Y te atreves a maldecir a mi prometid
edó clavada en el lugar. Al final, ella huyó cubriéndose la
erosa y fría de Clark y no se atrevieron a mirarlo
sería la esposa de Clark, no se habr
Fuera de
rada fría. Esas damas asustadas se subie
ordenó Clar
dillada en el suelo en silencio, y n
¿Por qué no te vi ser tan obediente y
intió muy incómodo cua
ian estaba a punto de golpear a
de esta mujer hizo que sus o
. "Señor. Ji, realmente aprecio tu ayuda antes. Pero ahora so
stente detrás de Clark. Pensó en su corazón: '¡Qué m
jó enojado. Su rostro se puso rígido, pero no se movió. P
cabeza. Rachel levantó la vista y e
ón del paraguas y vio la delicada barbil
a la mujer arrodillada en el suelo, soste
e hizo que las personas que presenciaban
del exterior. Se dio la vuelta y sollozó a Teresa, "Mamá, ¿por qué Clark se casaría co
ió el ceño y lo regañó: "Mírate a ti mismo. Límpiate rápidame
guntó: "Mamá, ¿quieres decir que todavía
rá con él a menos que sus padres lo permitan. Ahora puedo hacerla arro
vivir una vida feliz, por lo que Rachel solo
e detuvo gr
nstante. Clark incluso podía escuc
el extraño color rojo en su rostro. Inmedia
ayarás por la fiebre. ¿Estás seguro de que todavía no
pondió Rachel obstinadamente.
Luego se acercó a ella e intentó levant
una noche. Estaba inconsciente, pero aún así se arrodilló en el sue
los ojos de Clark. Pensó para sí mis
ió lentamente de
hel: "Señorita Rachel, Sra. Teresa dijo que la lluvia se detuvo y que ya no tienes que arrodillarte. Como te has dado cuenta de tu cu
fría a Rachel, indicándole que