o, el cual era verdaderamente cómodo, pero Trevor la m

el poco tiempo que llevaban casados, él ya había tenido el descaro de tomar la mano de otra mujer delante de ella. Aunque reconoció ciertos celos en su corazón, Charley

rlos directamente. Gemma estaba confundida, pero eso no fue suficiente para interrumpir su charla. En ese momento, Cha

ue Trevor. Allí sentadas en el auto, Gemma enterró su rostro en las manos mientras

os acontecimientos, preocupada por qué parte de la conversación habr

el que te miró, pues yo también me siento ave

se quedó

con él. Acaban de casarse, ¿y ya se atreve a tener una amante?

delante de Gemma, así que de ninguna manera iba a dejarlo pasar sin emitir comentario. "Cariño, en un futuro cuando no sepas cómo lidiar con problemas de este tipo, tienes que acudir a mí. Tengo mucha experiencia en ahuyentar a amantes: l

n principio", declaró Charley a punto de romper en llanto. En realidad, fue la indiferencia de Trevor lo que

público. ¿Qué tal si te invito a

o va a cambiar nada, y tod

anta importancia! ¿Podrías

, Trevor

frialdad. "Mis padres quieren conocerte, así

a Charley. Al entrar al comedor, Trevor la encontró sentada a la

era un cabello oscuro, brillante y hermoso, el cual no requería de mucho ma

r estaba observándola, la tos

está mirando cómo desayuno?', se preguntó,

mina de desayunar tranquila", le aclaró Trev

que parecía tranquila desayunando, estaba sumamente nerviosa, como si

, recogió su bolso y se precipitó hacia la puerta. Le incomodaba el simple hecho de estar

l ceño fruncido, observándola mientras se

tra el pecho y replicó:

ustada como para admitir que no

tarea de conducir. Este movimiento brusco la impulsó hacia adelante y la obligó a sujetarse del respald

sa de los padres de Trevor, la esc

ia y los exuberantes jardines que la enmarcab

ad, en un terreno contiguo a una planta

ra de hormigón, sino que e

mano y entraba. Al ingresar a la sala, la madera del piso rechinó bajo su p

xterior, la casa era bastante espaciosa;

para vivir a su antojo; al fin y al cabo,

só de que una mujer estaba bajando del ático. Entonces, alzó la mi

n lujo ni tenían nada de exclusividad. Sin embargo, por el costoso anillo de diamantes q

u mano mientras le preguntaba

en no había podido apartar la mirada desde que la había visto. La chica sintió que había causa

había convencido de que esa era la forma más apropiada de dirigirse a

e el papá de Trevor cocine, así que no se lo hagas notar si no te gusta la comida, ¿de acuerdo?", bromeó Mic

lidez del corazón de Michelle y pensó cuán afor

a sido injusta; sin dudas, al homb

te empezó a sentirse incómoda

pactante", expuso una impetuosa voz de mujer. Charley se volvió para ver

mos, has venido", le reprochó Michelle frunciendo el ceño, tras escuchar sus pal

ante esa frialdad y se acercó a