n silencio. Una fuerte fragancia permaneció en su nariz, ¡pero un e
iera un poco decepcionado. Lo pensó de nuevo y de repente recordó qu
era un día indefenso
on un odio interminable. James le quitó el corazón y la felicidad. A p
encontrar la verdadera
r de ella. Incluso cuando la sostenía en sus brazos, todavía sentía que ella tenía frío por todas partes. Por lo tanto, rara vez la ab
o aniversario de bodas. ¡Nos
rió con burl
esión normal. Ella solo frunció los labios y una leve sonrisa apareció en las comisuras de sus labio
o. Hace dos días, recibí dos botellas de romanee-conti1995. Quería beber una botella hoy y abrir o
ones sociales, no podía creer que él pudiera comprar un vino tinto tan caro porque muchas person
a marca de vino tinto, pero en ese momento se enamoró de este tipo de aroma fragante y hermoso, con olor a rosas, cuero y especias. Ella estaba muy feliz. Lo prob
e gusta, te traeré dos botellas más tarde y te dejaré disfrutarlas lentamente". En ese momento, ella
nte lo recordara después de me
dije casualmente. Realmente no quiero beberlo
con un toque de melan
te sientes
deliciosa comida en la olla. Lo agitó sua
iendo. ¿Cómo puedo no sentirme incómodo? " Con una sonrisa amable, las cejas de Louie se relajaron. Su piel clara era tan suave c
que escúchame". Renuncia a tu trabajo y quédate en casa p
labras de Charles, y él ya había puesto una
debido a sus palabras. Sin decir nada, Louie bajó los
urrido. Charles no se sintió infeli
la música, y solo condujo en silencio. ¡Loui
rsección, Louie vio una figura f
on salto
sostenía la ventana se apretó inconscientemente. Re
ara mirar a Charles. Tenía miedo de que él viera su diferenc
en su expresión. Él frunció el ceño ligeramente y miró en la direcci
nalmente
y regresó despu
ba muy nerviosa y no lo ocultó en absoluto. ¿Sabía que James había reg
e. Cuando la luz de la carretera cambió, encendió el auto y giró bruscamente a la izquierda. Por accidente, Louie casi golpea la ventan
o se quejó
uie se preguntó si Charles había visto a James en
aprovecharía la oportunidad para burlarse y advertirle, ¿cómo podría hablar con ella ta
stás demasiado emocionado d
r agudo en el corazón, como si hubiera sido cortada suavemente por un cuchillo, que no había sido fá
a? Ella guardó silencio, mordiéndose los pálidos labios. S
a, Charles de repente se dio la vu
asunto
labras. Agotada, cerró los ojos y se apoyó contra el respaldo de la