ella salió, fue llamada para ir a la sala de reuniones. Aunque Ivy no quería, solo po
nto a la ventana. Sus piernas eran un poco suaves, y ella estaba realme
tro de Adrian se amp
largo camino hacia Ivy. Extendió una mano y
ó de que no hubiera nada más. Luego extendió la mano y la tocó suavemente. Rápidamente se mudó
mismo. Ella decidió mantenerse alejado d
s un empleado de esta empresa? ¿Por qu
esdén, "¡Humph! ¡Ya no qui
impresión? Estoy un poco triste.
sto que no! ¡Lo que me hiciste fue m
ssandra divirtió a Adrian. Él
reuniones se abrió con irritación, y una
da la sala de conferencias bajó varios grados. Llegó una sensación famili
parado afuera de la puerta. La impaciencia en su rostro se convi
tamente retrocedió. ¿Por qué estaba Max aquí? ¿No deberí
azos de Adrian Qin. Su rostro se oscureció de nuevo. Ivy sintió que su cuerpo parec
, sabía que definitivamente terminaría miserablemente si fue
un minuto para calmarse. Señora, ¿cómo podría
iró al hombre detrás de ella, que lo miraba con un
llena de ira incontro
e estaba pasando, pero sabían qu
se aclaró la garganta, señaló la nariz de Ivy y lo regañó: "¡Tú! ¿Cómo te
er el apoyo del grupo Hua, su compañía sería próspera en el futuro cercano. En este momento
eroso. La cara de Eva se puso roja y su corazón la
nte le preocupaba era el hombre frente a ella. Su rostro era tan oscuro y terrible, con una presión que nunca
ensos de Max. Sus ojos se volvieron agudos en
ax, también se llenó de justa indignación. "Sí,
a era realmente una de las mejores estudiantes de Queen's College, era inútil. No tuvo oportunida
x, ya despedí a Cassie Song, pero ella se ha estado quedando en nuestra compa
lla retiró el pie y no se atrev
o miró a Max. Auto paralizante, ella
a mirada en los ojos de Max se volvió sanguinari
ó las baldosas del piso, ha
es pasos, Max dijo con voz
estaban débiles. Bajo la atenta mirada d
si escuchara el sonido del tie
l fondo de una sartén. Apretó sus labios delgados y firme
ano estab
ngre apareció en las comisuras
go", dijo Adrian con una
s. De repente, Max apretó su mano derecha en un puño y la go
poco. Apenas pudo esquivar el golpe de Max, pero
Max resopló con desdén. Agarró la muñeca
y no se sentía asustada como siempre. Miró al ho
en a su lado delante de tanta
des escapar del castigo de est
sus brazos y
tió miserable. Ella pensó que debería
el cambio en ella. La ira brotó de su cuerpo. La sostuvo fuertemente en
encontraron y apa