e Amelia, Barth se sin
o silenciados. No importa de quién sea el nombre escrito en las invitaciones, William se casab
onrió y ayudó a Amelia
o a los invitados. Sin embargo, todavía tenían que pasar por todos los procedimientos de bod
a mayor de las felices", dijo con alegría. "Pero si quieren ser felices por el resto de sus vidas, tienen que comerse la manzana juntos. Puede parecer delicioso, pero en r
volverse hacia el anillo en su dedo. El diamant
iera. Lo único que siempre qui
al anfitrión, inclinaron la cabeza y se pr
ó de su vista, siendo manipulada por el asistente. Ante el movimiento repentino,
en la mejilla, su rostro
tan inocente. No era una adolescente, pe
ojo al asistente y
de darle un mordisco a la manzana. Amelia miró a William y se encontró s
fruta. Cada vez que se acercaban, Amelia se sonrojaba. Cada vez que
iz de que Joy lo hubiera dejado. Sin esto, e
padres de William habían regresado primero. Como Amelia quería regr
nmediatamente corrió escaleras arriba a su dormitorio. Willi
Lo había escondido debajo de su cama porque tenía mucho miedo de que Joy
en echar un vistazo, c
lia todos estos años y nunca la había visto tan feliz", se
prometió solemnemente. Aunque había estado enojado al pr
ille
do las escaleras con sus tacones a