día
rir nada, para seguir con mi normal vida, para no p
o calladas mientras nos diriji
rando a Anna. Sonríe dándole una rápida mirad
y boquiabierta. Las risitas de las tres a m
chico, pero nada serio. Nunca he sido el tipo de chicas que necesita
- Sabrina responde antes de yo hacerlo.
cio un "Vamos"al verificar qu
desde las diez de la mañana dándome la tabarra para qu
n sol hace una buena combinación
s los domingos por la mañana a est
lla pilla, mientras yo me quedo sentada en un
jer que encontramos por internet, la cual había vis
que aunque no este muy lejos, no sabemos qué nos podemos encontrar ni cómo reacciona
rido, pero siempre me echaba hacia detrás pensando en q
i cara en mi manos. Me concentro solamente en m
oz de Adriana sue
ás de un árbol. Mi ceño se frunce comenzando a
cidad. Por instinto, tapó sus ojos con mis manos, y la giro
agacho cogiendo su cara y la inspecciono co
que agua salada comience a bajar por sus m
arse a nuestro abrazo. Las tres lloran descons
idad con ella. Su respuesta ante mis miles de preguntas fue:
onaba para asentir mo
s, nos apresuramos para llegar a casa y u
ocurriendo de verdad, pero no puedo permiti
-
ila llena de todo tipo de cosas, para abrir
ontraba enfermo en un pueblo al lado de este, y luego de repetirme mil vece
dos de los móviles y llamamos a dos taxis para ll
ez haber salido, mientra
idos. Yo con polvos, rímel y un poco de colorete, t
mayas, deportes y sudaderas con unos
n ha llegado, así que se montan en e
ga en el que iríamo
es el que lleva el gps, y
a idea. Los tres sabemos lo que sienten el uno por el otro, y
de confesa
pasará algo
al escuchar la pregunta que hace el moreno, pero en el caso contrario, mirando
giendo eso como una respuesta, un
o " El bosque". Todo era muy similar a Marleb. Las casas son blancas y ma
and
hombro. Su cuerpo se tambalea hacia el lado contrario
es carcajadas, el moreno acerca su mano empujándola, produciendo un fuerte golpe entre su culo y el suelo.
dar paso a la seriedad, porque al
r de tener el gps, no conseguimos encontrarla ha
ndo una foto mental para no pod
Blanca, con las rejas y tejado marrón
de Devin me pone más nervi
cabeza sobre como escapar si la mujer nos quiere raptar y matar,
é si intent
todos miramos a Gala, la cual alza s
erá para siempre. ¡Esta chica no es
uerta. Los cinco nos quedamos quietos, con la vista fija e
chica de ojos celestes, cabello moren
speccionan con el ceño f
nos muestra una
isa?- la chica me mira vo
gunta Ares! La voz de mi m
re la puerta de par en par deján
eguntar el nombre de la
aces miradas a mis amigos antes de int
adelanta mientras
de poner