un salto. Tenía que asistir a una reunión con sus padres, le habían avisado el día anterior, aunque no sabía para que querían reunirse
aron, estaban sus padres y su hermano Marcus, pero también estaban Julio y A
Jaume sorprendido -¿Qué e
-le dijo su padre-. Ayer nos dimos cuenta d
olo es asunto mío, a vos
chos problemas últimamente para seguir co
rriendo y terminarán descubriendo a nuestro pueblo. Llevamos mucho tiempo viviendo en paz, si nos descubren
tienen miedo, jamás se atreverían a ir
s -. Tenemos firmado desde hace cientos de años un tratado de p
e ese trata
die echará de menos, gente sin familia y sólo para poder alim
con esto? -preguntó Jau
de humanos, no podremos seguir trayendo a tantos , así que si no vas a usar a la humana para el fin con e
Me la entregasteis, ah
nuestra familia. No entiendo que un vampiro tenga a una humana a su alcance y ni l
ero
Está es mi última p
de sus esclavos humanos. Para así hacerlos definitivamente de su propiedad y que todos supieran que pertenecía a algún miembro de esa familia. Sabía que tenía que hacerlo
o sabía por qué en el fondo si le importaba su bienestar. No deseaba hacerla sufrir ni que nadie le hiciera daño y esos sentimientos que
piel el sello de su familia, así que tomo una decisión, nada más lle
mpoco le dio importancia. La observó durante unos instantes como dormía y no quiso despertarla, se le veía dormir tan plácidament
un inexperto. Lo que tenía claro es que, después de ese día, ella le odiaría para siempre, estaba seguro de