Juliet. - dijo el
anquila. - No necesita
que no participa en el
ebido a su gran
o! Llevé mi man
atención relacionada
miedo al tacto exactament
unto de seguridad. Y
scuchaste muchas cosas
o hizo que se encerrara
liva, temblando de nuevo
igante en él y en ti en ta
segurar que Theo esté
todavía necesitan contin
has salido del ambien
portante enfocarse en cui
una mezcla de culpa y a
on Theo antes, aliviado de
o. Nunca fue un prob
n de terminar desarrollan
ivo hasta el punt
r aliviada, Julie
niño y tu presencia
. Rowell tomó mi mano y la apretó
meo con fuerza. No había
sintiendo. Necesitaba de
mere
no a una reunión q
r a una cita médic
Solo pude hablar co
ión con el gerente de su
ra
e a ti misma, Juliet. G
quiso Dios. La vida de
quiso. Sé que es difícil
algo por él ese día,
amor y d
razón. Debo pensar p
a Romeo saludando desde la
, bebé. Este es un contr
de Theo y nuestro acuerdo p
me senté a su lado, encont
universitarios? ¡Theo tenía cuat
si
urn! Deberíamos
que podíamos hace
a de mi abogado. c
la cabeza al hombre se
Sus padres? ¿Esto es
liet. Se inclinó y
. "Yo cuido a mi
ía como si fuera a e
e volteé y cerré mi b
para siem
ó emocionado. solo
tan simple como frmar.
aba en la misma habitación q
s mía ahora. Más lágrimas cayeron
scuché la puerta abrirse, un
hacia atrás y vi a los pa
eron formalmente. Guy y G
n lío! Negué con l
este bebé? Se abrió una puerta de
habitación con
zar? preguntó con
gos? George y Kira se acerc
é, ll
a para ti justo después
ente del resultado, siempr
char en la justicia por él
uimos nuestra familia que
n todos los sentidos porqu
dejar de llorar, sonre
mé, claro q
tro trato... Ahora e
endí que era un juez de pa
homp
ijo que sí..." Abrió
con él y no podí
eo Blackburn, ¿aceptarías
su legíti
nte sí. Romeo res
juez Thompson le pregu
illo y se la entregó al jue
omeo. Era de oro blanco,
o, deslizando el anill
suspiro al ver mi anill
otros más pequeños a su alrede
de Nueva York y en todo
declaro mar
tanto! - Me l
del suelo y besé su
levanté mi mano anillada
sin entender, pregunt
a quería mi regazo,
es Juliet Elizabe
una boda sorpresa, ¡qué d
preparar una boda so
ientos de la persona a t
ar a alguien por el resto
nada. No estaba nerv
como una simple tran
o. Sintiendo lo que sentía por Jul
phia. Porque los abrum
tor, aplastando cualqui
la semana anterior, me despert
mantha estaba durmiendo encima d
os en la cama en el futu
a maldito momento y ap
a levantarse, si ella
Juliet quisiera, me la da
mujer de mi vid
a mi madre y le dije lo que qu
a, si estaba disponible p
entos y respetarla. Le d
madre no cuestionó si e
e pidió el número de zapa
nviar el anill
umergieron en los prep
ercanos. No invité a
nuestra familia. Eleg
dres que se quedaran
n mi nueva esposa para u
de
a, sumergida en Sama
que quedaba de la renovación
os niños dormían, era
noche le decía sin pal
No había necesida
os sen