tierras y, al cabo de l
odos allí tendrían que enco
nuestro difunto jefe era
erencia de la hija
mostrando ser una persona m
r...
AR
razonar sobre lo que
taba asimilando todo
ojó a la cara como si
suponía que deb
el idiota me hubiera e
ocó la pérdida del maldi
ofunda mientras me frotab
conmigo misma y con to
. De repente, miré a m
a imposible no recordar
que conocí a Mel
derritiera con los recu
qui
mis quejas, de hech
perra que tratar de
signifcó
a en que se me humedeci
abajo, para limpiar los re
e separaba el potrero
ercándose, con un Samuel m
vola
al vehículo, restrin
do a f
ñora ahora?" -se que
siquiera dignarse a baj
vola
ante sus burlas y me ace
a puerta, noté la confus
av
ñalé con un dedo. Lueg
que esa era la única f
la forma en
ír, pareciend
es realme
, maldita sea!" exc
ado a escucharte?" Respon
scuras lo hacían lucir tan sex
que defnían su
ara él, parpadeando pa
sito de educación sol
Resopló, pero déjame
nda, preparándome. - Me di
me miró con incredulid
a palabra correcta
- concluyó para
ió la la
e r
r ahí..." comenté
luciendo más ligero
tí más
nuestra compañía
quieres quedarte aquí?" -
rada de la fnca. "Está
v
onesto. "Es lo mínim
ord
da, solo asi
hacia el cent
utos mirando el paisaj
hé la pregun
extrañas la tra
hacia él, notan
ves puedas escuchar e
muchos", agregó sonr
tes eran todos rectos y
so con su vanidad. - N
l dinero del mundo
ión de costumbre
hace muchos años, así q
e todavía te gust
[
Un buen sor
ible conten
scuchado esas expres
ndome de su forma de
, mirándome intensa
y la ca
uiera tengo tiempo para
ías están tan llenos q
pir
da es esta? preguntó,
la felicid
ceño, hacien
ar persiguiendo mis su
o. "¿Por qué
taba mal", dijo. "Ac
ncogió de hombros. - Livin
r respirando todo ese aire cont
be
plicar, pero mi intenc
sado por
lamó Samuel, forzando s
, se
té mientras lo veía s
que esa vieja la
uí -siseó-. "
que todo lo que podía hac
, abrí la puerta y sal
desierto, que solo estaba cubie
lar de mi bolsillo,
mal
apucha levantada, j
vieja lata me dio
ba a él. Puse mis manos
es el mejor lugar del mun
Dudo que alguien se
l bosque
quejarte?" Se quejó,
Su piel quedó manchad
ud
vantando mis manos como s
y volví a entrar en el
a atrás, oj
volví a bajar, cerrando
ansado d
que no vas a arre
r a la granja a pie", argume
o viajar a São Paulo
erdido
scamente, abriendo mucho los
dis
ón?" Me crucé de brazo
puesto a
los ojos p
elto a conver
nté mi
eso lo que e
do, pero igno
nga este cable aquí p
o quieres sa
puesto que
ciarte las delicadas manos
deja de
puñetazo a tu cara bonita po
sin embargo, con
ió y luego me alejé
aliento por un segundo, sintiend
existent
que me estaba mordiendo e
necesitaba agregar más
s que er
a de mi mirada codiciosa,
e de la
a manija, sin embargo
o, muy mal, y un líquid
o
Gr
o! ¡No creo
os, con los ojos cerrados,
ra ta
a puerta del camión, av
li
ó acercándose. "
Qu
mpiando mi cara con una
do. Eso es todo", explicó.
ntré a Samuel a solo u
e solo tuve que inc
sus rasgos, aprovech
erto, característic
r, pero me quedé en sile
a su pecho defnido.
que brillaba co
aquí arriba, Marian
e de mi d
illas enr
aldi
a propósito", acusé, de
diaba el hecho de dej
fruncir
qué yo h
de brazos, descarad
[
sí que puedo
rró de inmediato y m
mis ojos, sorprendi
duro para haberlo
untó su dedo índi
con la cabeza. - ¡Argh! ru
ante que h
re sus talones y se fue,
sm
intiendo mi corazó
a la fnca, ya eran co
que era mejor que si
que estaría más cerca
iendo en cuenta que no est
ch
Samuel consiguió u
que afrmó que iría tras
ue se quedó atas
h se tapó la boca,
osa y despeinada. - ¿Qué
que fue atropell
a junto a ella. Cada uno
h, casi allí. Empecé
elajante y una buena n
s del día. Sobre todo, de to
atado peón q
AM
noche cuando crucé
Por suerte, había encon
señor João, ya que v
fue una pieza que fue
João me aconsejó que h
haría todo lo posibl
entrada de la mansió
r con bolsa en mano. A
ridad se apoderó del lug
r una cierta luz a través
os a una de las ventanas d
ence
ía ser donde dormía M
eintidós, podría
oy haciendo? Me q
a cabeza ne
ía la bolsa de alimento e
el lugar, y lo dejé en una
an tranquilos, y sin hacer
trás de la casa grande. n
y, peor aún, todavía tenía
ando traté de arreg
ía trabajo quitar la
la puerta, yendo a mi habi
junto en el rincón al lado
toalla y salí de la habi
baño de
rminé de lavarme, tard
ho la limpieza y, al se
í la puerta, regresando al do
ado de las otras plántulas su
Al llegar a uno de los p
quité la toalla, desnudán
cuché un grito agudo y a
abierta, como era cost
esa dirección y no pud
persona co
a ahí? grité, preocup
os hasta sostener esa f
sos y girarse hacia mí, l
, como sucedió en la ma
que no quería senti
it
rada y los latidos de mi cor
bios, incrédula de tener
esta hora, señora?"
mi pecho por un ti
rdiendo el control de
o estaba en su compañía. D
os en el camino sin ayuda,
re nosotros dos. Nada
rar la manera de mantenerse
n mi cabeza, di un
, observándola tragar sal
ome con los ojos, midi
oy esperando que me diga
irada en la mía, parpad
s pensando, peón", se defend
rla acusad
e mordí el l
amente lo que pens
stía un conjunto de s
jado. En tu cara, a di
en las mañanas que v
nada en su piel, most
es en sus mej
ó de hombros y c
ido del camión cu
ue decidí venir aquí", menc
j
lguna señal de que habí
ra! Dije en tono de regaño
La coloraci
sus me
error. Lo siento -me pr
los labios, mirándome. S
se... um... inva
min
asqué
n", la
espués de llegar a la
da y mañana tengo que
a la escuché hablar por
tá abandonando nuestro ac
ilidad, le
a romper el trato, solo n
a los dos días
ciendo la verd
e una pierna a la
u
mpre dudas de m
ueña perdió su verdader
eté, y ella se quedó pen
ejar escapar u
señora. Yo también
eriendo poner fn al asu
es acompañarme... -Hice
atmósfera extraña entre nosotro
do en
ue quieres mi compañí
a qué cocinar", br
rá mejor que me vaya, s
broma, y se ri
, peón insolente?" - El
e un po
na. Es pequeño y s
o ponerme una camisa y
intió, siguiendo por donde l
cua
s genial, pero esto...
nrió un poco
tí así frente a una
rente y tenía que admitir q
o conf
eso de la dueña, ya que
c -dije, y ella se rió,
os l
e no sabes sobre mí, p
prendí
cio por un rato hasta q
en arroz, frijoles, carne
o Mariana se lo comió com
e dio la esperanza de
un gran vaso de ag
l jugo de maracuyá que a
arme, ella tomó la dela
ta
ratando de detenerla
a cargo desde aquí", dijo,
ces, señora, eso lo pue
o la mesa. Me a
edo hacer por invitar
e reí a carcajadas
ñora", supliqué, bajando
estaba haciendo, volviéndose
del
e estoy haciendo esto,
que lo pronunció fue u
oi
tivamente no en
charla decir mi no
factor
dándome cuenta de que m
é por terminar nu
o lo creo. En fn,
rtunidad de concluir, Mariana
sa divertida, sabiendo muy
eguiría nada
e de mí, así que tendr
o, lo prometo", tartamud
ado pa
espués, Mariana terminó
a es bastante tarde, pero
traigo de esta manera, sin prác
ún asunto urgente que
tengo que lidiar constantemen
ajetreada y muy difí
es pesado, pero de todos
eso tenemos un buen desc
lo tiene, yo no, porque pr
s -señalé-. "Tien
labios co
que te gusta a
ije, aunque sabía q
gun
iempre decía que la muj
estuve en desacuerdo -confesó,
ación, ya que yo n
diaste tanto que pensa
rió a carcajadas. Era in
as un ogro arrogante y
mi padre. Por el poco t
presión equivocada de
ar que este acuerdo
e concepto erróneo de l
se contrajeran en un
eso, señora", le
que me vaya entonces," anu
mío, tardando más d
s de mi cuerpo. Al mismo
illo de mis pantalones de
esitaba ponerm
tad de estas tierras a
era como un hermano
la dueña de todo allí, ademá
ía, siempre sería un s
os dos días siguientes
ga
estaba empezando a sentirm
tado por la falta de u
atención en ella cu
na noche y hasta lueg
vemos -dije, y ella se
ará má
uerta, eché llave, yendo
y cerré los ojos, sin
o dentro de mí, inc
rno! Mald
CAPÍT
ARI
ue tendrás que quedarte allí
se abría paso a través del es
c
almuerzo y yo acabab
e una
Samuel me obligó. Ro
"Él piensa que duran
ión sobre la ve
rió, sacudien
no te conoce", se burl
imaginarte ordeñan
fui yo qu
es un hombre realm
mposible evitar que
ros momentos, por cier
ami
Parpadeé ante la voz de V
anos en las caderas. Lo
o sonrojado", observó,
se lo has
ensifcó ante su irr
vergonzado. '¿Te has vu
adero, necesitaba un vaso
ón de que me estaba obliga
agua a la boca, que
zó de brazos y m
l amor van de
a la fuerte risa que m
vio
bromear, por favor?"
luché por ocultarlo. Neg
el fregadero - "Voy a d
ente
supuesto,
squina, volví a
en el trozo de chocola
el baño, y
, pero su risa detuvo
ó mostrarle
Ponta Porã, mi ment
ortura que serían
São Paulo, arreglé
a empresa, asegurando que
os a seguir en contacto
el aeropuerto, tomé un t
an
tí ansiosa por volver
rque apenas podí
s extrañas reacciones, s
o mis rede
paró en un semáforo
ena que me puso pens
do frente a un estab
a mujer. Era una muj
stó cuando vi la for
é
dquirió un
por qué, aparté la mir
elular en mi bolso y me cr
te
ñorita?" preguntó el t
e porque notaste mi cam
pondí co
Si e
a la fnca, pag
los empleados de la gra
ez, considerando qu
n la puerta, esperándom
ie
-dijo, apretándome
é tu dul
uve fuera dos días,
tontería co
mente para poder
alguien, no soport
go, qu
o su mano, que e
Me tomó del brazo,
delgazado estos día
ble no reírs
astante rápido, lo que,
e intrigó fue el hecho de
visto a Samuel, lo qu
be haber sabido que yo re
mi regreso como si
aldi
ndo como un mo
levanté de la cama y agarr
era tarde en la noche.
abitación y dar un paseo afu
dormir por
al enorme porche, cerré
cielo estaba hermoso, ll
luna, perdido en pens
me encantaba dormir a la
En ese momento, nunca h
gen
no queriendo continu
che y comencé a caminar p
l aire gélido abr
a mis piernas me
avilló. Pensé en volver
me motivaron a seguir
eño, igu
celeré mis pasos. Sin emb
frenar en el lugar
por qué, me acerqué a
a simplemente darse l
n la misma mujer qu
con él abrazándola y r
ó en s
a, en agonía por seguir
ener el grito de frustració
gan
tan enojado? Porqu
algo en mi pe
aldi
aba volv
e allí lo más rápido posi
ezando con un tocón de ma
aca m
Gr
sí misma en el suelo cu
biertos po
proximó. - ¿Qué paso
qu
ado, preocupado porqu
i
rganta, nerviosa y avergo
nía calor y sueño, así
a refre
empieza a hinchar el to
nchada al hombro de Sa
era hermoso. Pelo rizad
que la d
urmuré, queriendo
ía hecho era sufciente, au
, pero no pude. El d
u peso sobre ese pie
su atención a su com
a Mariana a la casa gr
ó. Luego ella sostuvo s
b
dían ningún movimien
To
ra levantarme con l
ñó, luciendo molesto porqu
endac
do, comencé a al
ecesito ayuda," gruñí,
chica. Mi boca se tor
lestar la no
n el camino", dijo. "S
ue no empeore el
! ¡No necesito tu m
ndo la humedad de las lá
j
do? Me agarró del brazo,
rme en
rostros s
' le espeté, levanta
lo
me agarró por la cintura
o fuera u
e, peón insolente!
us b
eguemos a la casa
sintiendo mi peso, ya que me
un
echo a hacer est
. ¡A
ando mi amenaza
o te daré una palm
í mis
atrevería
r cuando sentí el impacto
dome g
ejé, golpeándol
mis agresiones le es
qui
ás? insinuó c
una mezcla de revuelta,
ur, tomando mi sil
esta que
durante los sig