Char
ombros desnudos. Coloqué una pequeña cadera de oro blanco, que adorna mi cuello mientras que recojo los costados de mi cabello para que no me molestara en la cara
iento sexy c
ersonas como para estar apretados como una sardina. Lo primo que hago es dir
y otra vez. El tequila suena una buena opción,
que está en la barra me mira con
to el toque de su mano. Lo único que hago es girarme sobre mis pies y termi
dentro de mi sé cuanto me atraen las mujeres, y carajo que lo he intentado mantener oculto pero esta noche ni siq
volver a girarme. Pongo la sal sobre mi mano, agarro el limón y en cámara lenta siento como prime
tá dentro de mi círculo y mi familia, eso es algo de lo que
s centímetros por debajo de sus hombros, su boca carnosa y sus ojos penetrantes están haciendo estragos dent
ahora alejó su mirada y baila con una chica en la pista. Siento el ardor de mi g
po provoca que no caiga borracha, aún me si
ado vuelta por un segundo para tomar el tr
erle un poco de actitud, ¿Dónde d
trás y concentrarme solo en disfrutar. Quiero buscarla, necesito
ros. Camina hacia mi, sin poder evitar sonreír y comenzar a mirarla con más detenimiento. Si pensé q
avillosas tetas. Sigo bajando hasta que mis ojos se centran en sus p
tá, la situación pasa rápido, la rubia se tropieza y termina por caerse contra mi cuerpo, por lo que la abrazo por la cintura y la sostengo. Su
r de su piel que me quema. Ella ha terminado con sus brazos casi en mis hombros, o mejor dicho sobre mi
s labios carnosos se m
comienza a latir, siento que en cualquier mo
arla. Mi cuerpo se calienta cuando noto si mirada hambrienta, la rubia ha logrado toda m
olo me he trop
siquiera le doy importancia. Ella tampoco se gira, pero supongo que la reconoce
lla sonríe, mostrándome su
sa -le doy una sonrisa
í. Ella me da una última mirada que hace que mis pulmones fallen y luego desaparece con aquell
y disfrutar del ambiente. Tomo unos tragos más y decido que quizás es mejor
n t
se gira hacia un costado, cuando logro encontrarla ella está con una sonris
r como es que la mira con esa intensidad que logra derribar sus b
quitar los restos de limón del último trago y sient
u mano se eleva y ella peina su cabello para luego morder su labio inferior-. Mi
rdiendo mi labio infer
lo más profundo de mi garganta. Ella me está mirando de
estés muy consciente de lo que pase aquí -aquel chico corta nu
íe, desviando la mirada por un momento para colocar sal. Trago pesadamente cuando la veo
os ojos mientras siento que el azul comienza a oscurecerse, ella está b
ez, no necesito del jodido limón para
ior bajo mi cuerpo. No me importa lo que mi cabeza esté pensando en este moment
a hacer lo que menos creí que haría. Eleva su mano y
que puedo pensar es que mi pulso se acelera con solo mirarla. Puedo notar que bajo
metros por arriba de ella. Sus ojos
as y muerde su labio inferior-. Me gu
orazón por un instante, sin embargo, la sigo mientras tira de mi. La pista no está tan iluminada, lo c
, es una fuerza que va contra mi voluntad, como dos polos opuestos. Es un deseo que
ensualmente. Me estiro para abrazarla por la cintura, mi mano se posa sobre su abdomen y la peg
rada, y conecta sus ojos con los míos, llevando su mano hacia atrás para posicionarla en mi nuca. La aprieto contra mi, sintiendo
rtar las consecuencias. Mis labios se entreabren, besando la piel expuesta mientras el
ar que mi voz salga ronca, estoy conten
pican por tocar más allá, en este momento deseo que estemos solas y no con personas a nuestro alrededor, que por más que ni si
ntaría seguir besando su cuello, tengo algo más en mente. Mis manos la acompañan para que se gire, ella lo hace y levanta la mirada. Ahora si, siento
siento como sus labios carnosos atrapa
punto de dejarme en un coma etílico. Abrazo su cintura y la mantengo cerca de mi, por alguna razón sé que la necesi
de separarnos, necesito recobrar el alient
Siento como tira de mi