da solo le dio dolores de cabeza, desde muy joven, mostro sus instintos hacia lo malo, haciendo padecer terrible
dinero, el cual casi siempre rechazaba,
de sangre, me sobra y me basta
ce falta para tus medicinas, sé que ha a
re te digo, yo quiero a un hijo p
vivir bien, de más chico era un problema tras otro, no duraba en ninguna escuela,
r primera vez la cárcel, asustada, su mama casi a diario lo veía, pero su hijo lejos de mostrar pena
er a su mamá, la cual, lo abraza
beza? Mira que un día de estos no
esta vida, además pues ya tengo mujer y nos iremos para
ía, pero, yo no ando con miedo en la calle o brinco si veo
pasa, todo el dinero está en una cuenta, que nadie
o tú, preferiría que fueras un hombr
a de su hijo, constantemente caía en el reclusorio y así como
da ella fue a abrir, entro su hijo heri
ooo!!! ¿
ncía de contrabando y nos madrugaron, como pude llegue aq
as no dejaban de salir, unos fuertes toquidos la asustaron, pero cuando miro a su hijo, él ya h
lo persigno por última vez, beso su frente y solo sería esperar, e
que ver en los actos delictivos de su hijo, le entregaron el cuerpo, al velorio asistieron po
aparto su hijo lo puso a su nombre, lo utilizaba para sus medicamentos, momentos muy amargos vivió
su pan, en eso vio unos tipos que la seguían, al darse cuenta de ello, a
ijo tiene dinero que no le corresponde, ¿Más le vale que d
abarían con su vida, una voz
e de ella o
ue era Octavio, que pis
estas muerto!!
irada perdida en los ojos de Octavio, el cual descargo su arma ma
sabe aquí tiene a su ángel guardián, aparte es un modo de pedirle
rque sé que tú eras bueno, solo Dios puede juzgart
madre, despidiéndose y perdiéndose en las calles, mien
y cansada se veía, una noche que rezaba an
con mi hijo, ves que soy un costal de huesos viejos, perdone a
s pasos se acercaron a su cama, al abrir sus ojos,
i, para que me acompañes allá
los seguía, en esa calle vacía y finalmente el perdón de un alma en pena