es, se mantuvo fuerte y logró dominarlas. Abigail Montgomery observó aquella habitación con detenimiento, aún

recordaba la escena con total nitidez. El retrato que sostenía en sus manos era el reflejo del pasatiempo de Nana Addie. Si cerraba sus ojos le

ardes de los sábados tras cocinarle unas deliciosas galletas de chocolate -ritual de muchísimos años- la llevaba a la s

osa sobre las piernas. Ahora tras su muerte se sentía sola...vacía. Su

descubrió que estaba embarazada fue tras unas vacaciones fuera de Boston, nunca le avisó a

aba la ubicación. Abi siempre se había considerado a sí misma como una persona p

ña razón todo había a

homicidio, incidente que las obligaba a marcharse de Boston aún más rápido de lo planeado. Todo sucedió varias semanas

te años ser acorralado por otro sujeto. Sin saber porque, había caminad

nó hacia ella, Abi se alejó internándose e

as horas en el departamento de policía, le pidieron sus datos y le informaron que la llamarían para que declarase ante el juez que llevaba el caso,

Abi asistió a una audiencia donde fijarían si el sospechoso tenía derecho a solicitar libertad bajo f

mpre y cuando regresase