img Me Equivoqué y te Perdí  /  Capítulo 4 CAPITULO 3 | 7.27%
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Historia

Capítulo 4 CAPITULO 3

Palabras:1694    |    Actualizado en: 25/10/2022

ambién no decía nada ni siquiera les brindaba una mirada a sus hijos, los gemelos se

el rey de los vampiros se levantó acercándose a sus hijos y d

tardes después de clases y tú Alex te irás con Fleur a entrenar con Él y ambos desde ahora no podrán usar sus poderes vampíricos, ser

ello inmenso enceguecedor, que no duro mucho, pero que los gemelos sintieron como sus podere

ocina con los demás sirvientes y sin poner mala cara, nosotros cenaremos a

u madre quien los adoraba, sus ojos se llenaron de lágrimas porque esta vez el castigo iba a ser si no es que desde ya, muy d

papá, perdón

sta que juntos no aguantaron más y se fueron corriendo en estrepitosa carrera hasta el jardín donde sollozaban fuerte

nos castigó m

con la cabeza

Dominic, creo que nos pasamos esta vez, no me importa comer con la servidum

muy tris

quiero que me abracen, quiero un beso de despedida como siempre, ad

xistía allí, los dos hablaban sin saber que eran observados por sus padres, que muy tr

l castigo? ¿Separarlos? Mi amor, ellos están acost

ia de poder que ellos manifestaban contra los demás, especialmente con los humanos, los conocía muy bien, por eso les castigó con quitarles su poder vampírico

ara ir a dormir no los abraces, no los beses, solo contesta con un duerman bien, por

corazón lleno de dolo

tabas peor que ellos mi amor y ahora los castigas p

l es muy doloroso, pero en luga

crueles como lo fui yo mi amor, contigo aprendí a ser tolerante, a perdonar, a amar, deseo que

blar que lo había lastimado a

tarlos de esa manera, pero si es para su bien y para que

respondió de

no sé qué haría si a

mor a lo salvaje como lo hacen los vampiros, pero llenos de amor mutuo, cuando terminaron ambos qued

¿Si salgo emba

n rostro muy alegre

i amor, otro hijo sería lo má

al escucharlo decirle esas b

días y presiento que puede ser eso, no est

azo muy fuerte y

rto? Hagámoslo otra vez mi amor, ade

halagadora sorpresa

jajajaja, sabes que te amo atrevido, pícar

los movimientos para complacerse ambos, Alexander gozaba como nunca los ímpetus de su esposa, gemía tan ronco que la excitaba cada v

s y terminaron besándose con ardor, Martha se bajó del cuerpo de su esposo y

r a sus entrenamientos, pero ahora ya no lo harían juntos como siempre, se despid

a la parte izquierda, ambos estaban tan alejados que ni siquiera podían verse, fueron tres horas agot

o podían moverse mucho, lo hacían muy despacio hasta que llegaron a su habita

amas para que duerman, salieron dejándolos bien arropados, en sus sueños los gemelos veían el rictus enojado de su padre y entre sueños sollozaban, pues ex

ble entrenar sin nuestros podere

s Domin

estros padres Alex, sin embargo, debemos obedecer a papá, así que vamos de una buena ve

ron que estaban limpios, e

esto es cosa de nuestras nanas, jaja

sus padres juntos como siempre y miraron donde estaban sus puestos vacíos, siguieron de largo hasta la cocina y se sentaron

por todos allí, se sentaron y fueron servidos, cenaron y

y déjenlos en el fre

spidieron de todos y salieron hacia el

as madre, hasta mañan

una fría respues

también

frialdad y se fueron corriendo llorando hacia su habitación, Martha sollozo bajito y Alexander solo bajo su

mo los tratan, algo que jamás había sucedido y por ser arrogantes fueron castigad

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