quier problema. Ellas le ayudaban a mantenerse centrada,
un trío divertido
ian.
dulce y hermosos labios llenos. Ella era la tímida, la sensata, Gillian siempre
ba; los libros. Ella, con su carácter dulce y dócil era considerada por muchos como el típico ratón de biblioteca
os los días soñaba en cómo sería ser amada
bien educados, amantes de la buena literatura, una hermosa casa, se imaginaba a ella como la mejor de las
nie
n cuidada cabellera color oro, unos dulces ojos verdes, una nariz delicada y respingada, una boca de
a realidad estaba muy lejos eso. Era explosiva, rebelde, impulsiva, loca, le encantaba vivir en fiestas y hacer lo que le dictaran sus
mía usarla, quién la viera pensaría que esa dulce rubia necesitaba ser
ue en su opinión "no era digno de una dama", a lo que Connie solía resp
imo estab
te y larga cabellera negra, que caía con naturalidad en bellas on
absurdas tradiciones, conoció a un atractivo hombre italiano y se casaron, de aque
te, nunca dejaba que su explosivo carácter tomara las riendas de su vida. Quienes la conocían, las descr
til, y la ayudó en todo sin dejar de sonreír en ningún momento. Era una chica tan dulce que logró conectar con ella de inmediato, ella trabajaba com
donde el anfitrión era un socio del padre de
hacia mucho, encajaban cómo piezas perfectas de un rompecabez
zonaba y la ayudaba a comprender que quizás fuese beneficioso de alguna manera, pero Connie gritaba impr
tonces la dulzura y serenidad de Gillian lograban aplacarla, mientras que
ta nunca lo había dudado, desde que conociera a Michaell, había pensado que él era el hombre de su vida, tan dulce, tan atento con ella, así que
a rodeada de los dulces brazos de Gillian, que le ofrecía tiernamente
se encantado, al meno
tierna voz- nada solucionarás con la violen
mataran al desgraciado. Pero cómo eres tan buena y Rita tan racional sé que no lo harían, pero no importa, tengo mi arma, ella me basta pa
oca!- Rita le sonrió
a Rita, y que por tí, no teme dispar
ante drástico!
ó Connie, y el trio de amigas se fundió
e, cariño- le susu
e con ironía- la pelirroja tiene razón- sonríe- sal
ta se sorbe la nariz- no
- tendrías que llevar la carga sola, p
eguntó Gillian, acariciando
ser una maldita broma, Gillian!. .
Conni
cuerno!- grit
onnie. . .quizás
e Michaell se pudri
a decisión- i
, poniendo sus manos sobre
a divo