etrás de mi escritorio y me dirigí hacia el ascensor. Tan pronto como escuché el ping del ascensor, entré. Presioné el botón del vestíbulo y esperé a que las puertas se cerraran. Justo cu
mi s
scensor. Realmente no quería estar cerca de él. Sin embargo, presionó el b
dad. ¿Por qué, oh, por qué tuvo que venir y p
is ojos sobre él. Dios, estaba caliente. De hecho, deseaba que fuera un buen tipo y no el típico mujeriego, pero lo dudaba. Los tipos co
unda desde mi izquierda. Salté sorprendida de ver al Señor Wesley mirándome con una expresión dura. Me sonro
o parecer nervioso y sereno.
-. Le dije, mi voz ligerame
ían nefastas. No me gustan ni acepto las tardanzas, así que ten mucho cuidado-. dijo en un tono serio, como de negocios, -también tenga en cuenta que
tos por la sorpresa. 7:30 am? ¿Excelencia?
amente, su mano sosteniendo mi mandíbula con un agarre seguro. De cerca, pude d
ance en el que estaba y me soltara la mandíbula. Estaba a punto de salir del ascensor cuando de repe
elta y salió del ascensor como si nada hubiera pasado. Mie
to D
enía escrita mi carta de renuncia. Tomé mi carta de renuncia y la doblé cuidadosamente antes de deslizarla dentro de
ito. Después de hurgar en el cajón de la cocina durante unos segundos, finalmente encontré una cu
ontró la puerta, ya sabiendo quién sería. Tal como esperaba, la puerta se abrió para rev
a mi amiga. No solo era la mujer más inteligente que había conocido, sino que también era uno de los seres humanos más cariñosos que ha c
o está-. Lanna comenzó con sus preguntas, pero no antes de ir a la cocina y
eligrosa. Alanna, por otro lado, escuchó atentamente, sin embargo, tan pronto como l
a dijo y puso una
estioné Alanna me ignoró y co
iablos, dime q
a mí y vi una foto del Señor
nna. Asentí, confundido en cuanto a p
lguna idea de quién es este tip
r Wesley?- D
o quiere destruir una empresa, lo hace de una manera tan inteligente que uno no se da cuenta hasta que la empresa se queda sin nada.
e Wesley; eso fue lo suyo. Y era conocido como el Franco
ue Lanna comenzó a sacudirme par
no puedes, haz tu mejor esfuerzo para no ponerte en su lado malo, de
es que no me gusta la gente peligrosa, Lanna, y si estás diciendo es cierto, entonces Nate es peligroso, y no quiero saber nad
ndré, porque sé que Nate Wesley es una mala noticia de pri
rmir. Nos vemos en la mañana, Laura-.
aba algo temiendo. Pero decidí que iría alrededor de las 6:00 am y dejaría la carta de renuncia antes
ra el pla