rano para poder prepararme tra
dicho que uso labial, aunque mis labios suelen tener un color
i cuarto, y me dirigí a la cocina, de donde ya se podía
i sale mal te invitaré a comer- s
ve tú, esas cosas a mí me molestan- Nathan por
vores como esos a Nathan, es triste ya que a veces si acepta y termina saliendo con algu
o curiosa, hasta que noto cierto detalle en
esayuno! ¡Ve, cómete el de Jayden!- molesta le quitó mi tazón
a saber que, Jayden se ríe disimuladamente y me pone un plato con alg
do que desayunemos en paz, por favor- pide mamá
ba comiendo mis cereal
además puedes compartir- dice con amabilidad
e no se merece
al instituto, no estamos muy lejos, así que
o a los dos chicos que caminan delante de mí. Esto sucede todos los días, y es aquí donde procedo a ponerme los auricul
los auriculares y me senté e
Nathan vienen a mi salón donde charlamos un rato y claro, Jayden se queja por ser popular y tener que pasa
ene con la popularidad- Nathan intenta anim
mi asiento, yo que suelo sentarme
a capucha alguna vez?- moles
aba en el asiento a mi lado y Jayden se se
rte cada mañana Jayden?- preg
que ocultes lo bonita que eres- me conmueve que me diga eso, pero hará falta
ió agra
cómoda asi- le explico dánd
t tiene el cabello rosa y tu no Jay?- p
a mayoría piensa que es teñido y bueno n
ela de mamá tenía ese color de pelo, pero en definitiva nadie sabe la r
a confirmar que lo que
no yo lo heredé, pero Jayden no-
ases sonó y era la hora d
olet- se despidió Jayden con un gest
mi cabeza sobre la capucha del buzo y
en el salón y dio
ue estoy en el promedio, me es fácil, pues no me cuesta co
ivertían en el patio de la escuela mientr
ue soy bonita, pero que podría ver Nathan en mí, sus novias anteriores eran chicas súper bonitas, tuvo una que era un año mayor que él, rubia de ojos celeste y con un cuerpo envidiable, otra era de ojos
tima es tan baja qu
ya la mayoría empez
es entendible, al fin y al cabo, tiene la desgracia de ser tu hermano- suspiré al esc
el solía competir casi siempre con Nathan
eneno cada que respiras Magali-
e la cintura y besó su mejilla, odio esas muestras de cariño entre ellos, son asq
a, contigo aquí es como respirar veneno todos los días- su tono
, como dicen siempre, Dios los cría y ellos se juntan
en el aire al verme e
n en este mundo, si no, n
ro lado de Nathan una chica de rubio con las puntas teñidas de azu
encantadora, como dije siempre
r los celos que afloran en mi interior, r
eteaba y le tomaba del brazo ocasionalme
la voz, sacándome de mis cel
escuche- me disculpe volviendo y