Mi primavera eres tu

de

o que los transeúntes disfruten de su exquisito aroma, además de la belleza que le brinda al lugar, ha

sido cómplice de sus sueños y aventuras. Se sentía al fin completa y realizada, su pastelería estaba creciendo, su d

un año, haciendo que todo se viniera abajo. Ese día se quedó dormida entre lágrimas,

lista -Alana cor

cando que su uniforme esté bien puesto, ya que su hija quiere hacer las cosas po

emana con su padre y Pilar, a pesar de que ha pasado un año desde que se estableció la

o a las chicas nuevas. El olor a pastel recién horneado invade el lugar y los pocos

que no quiere que algo quede pendiente por hacer y así no estar retrasada con algo, está

e pisos, fuente, muñecos y es para este domingo- le informa Pía entrando

posible hacerlo en tan

de hacer un pastel de semejante dimen

insistiendo y la chica está llorando -le cuenta la s

lo que Madelen decide salir y tratar de llegar a un acuerdo, una posición que n

a ella está uno de mis pasteleros mostrándole otras opciones. Es capaz de per

-se presenta sentándose junto a ellos- Me informaron

ro para mi boda, es con lo que siempre he soñado -su novio le ent

te elaborado, tal como Pía se lo había descrito. Dirige la mirada a la novia y luego a la fot

stel de seis pisos, te puedo colocar una fuente ya diseñada, los muñecos es imposible, mi escultor demora un día comp

levanta y sale llorando desconsol

-dice el pastelero que tengo a mi l

poco mal por la chica, lamentando mucho no haber podido ayudarla en ese d

ono, es su padre, resopl

ija ¿có

-le responde con amabilidad, sabiendo que tod

a decirte que tu amigo Esteban, el de la escuel

é pasó con él? -le pregunta, aunqu

a de sus hermanas acaba de tener

, cansada de que su padre quiera estar busc

preguntas? ¿A qu

y tonta, lleva me

ca, que te compre.

cenar con

é hora cierre, esta semana hem

do de igual forma,

tiempo contactando a los proveedores, pagando algunas cuentas pendientes, hasta que su espalda empieza a doler, además

, ve a Pía ir hacia ella con una sonrisa