mo si Claire se hubiera convertido en un gran
nombre como nunca antes
cargada de sensualidad,
ado por cinco años cre
ido a esa mujer que ahora se encontraba ta
cero para las bebidas cargadas de alcohol. Él lo sabía y por eso evitaba tomarlas. Pero en esta o
la idea de encerrarse con ella
xesposa, no podía hacer otra cosa más que seguir besándola, saboreando su boca, qu
e volvieran más demandantes, más osados, primero notó resistencia por
torno, al menos él se encontraba ahí. No podía parar a menos que ella así lo quis
cual la hacía estremecer como el primer día, maldito, imbécil, que no pudo s
brazos tras su cuello e incapaz de renun
rios años sintiéndose vacía, porque lo único que la había llenado desde que lo dejó fu
hí estaba abandonándose a sus besos y necesitando má
ía a verlo, él regresaría a la otra punta del planeta y e
gió volviendo a besarlo para que no dijera nada
eth y la acarició sobre la tela del p
aba, el problema era que la
o y lárgate, así de simp
a. Llevó sus dos manos hasta la cintura de Claire sujetándola fuertemente antes de impulsar su c
, bajando con sus labios, dejando un camino húmedo hasta el valle de sus senos. Él ya se había encargado de hacer que el vestido que lle
muró su nombre en
ajando por su cuerpo deteniéndose en sus senos humedeciendo sus pezones por arriba del sostén, hasta endurecerlos, sin evitar que sus manos recorran ese cuerpo hasta la intimidad de Claire notando
sperado porque se apartara de ese hombre, pero el calor entre sus piernas le pedía otra cosa, la forma en que su pie
joder J
una mano mientras con la otra se aferra
de esa lengua, recorriendo su intimidad y haciendo que su humedad creciera incrementando más sus
para esto, Jareth van a pill
el baño, que necesitaban salir de ahí antes de que fuera sospecharan o e
ca de un poco más de más lengua, de más succión, de más roce húmedo hasta que
a su altura, solo para inclinarse hacia ella, no sin antes liberar
palpitar aún más la erección de Jareth al mome
ho que él deseara alargar ese momento, su cuerpo no se lo permitió, su pelvis se hizo hacia atrás saliendo casi del i