ida m

an me aceptó casi sin problemas aunque creo que su hijo Pablo tuvo bastante que ver. No he pasado frío ni hambre

que estés molesta pero quiero que entiendas que también necesitaba abrir mis alas para intentar tomar vuelo y

s posible para aunque sea abr

ere, Ka

e, pero no sabía siquiera donde enviarla

go me pidieron que me encargara de tender la ropa en otra habitación. Tuve que llevar la ropa a un lugar en una esquina del jardín donde solo había sogas para tender la ropa

llevado terminar de colgar todo, con el balde vacío me di vuelta de prisa, verlo hiz

ila -Di

e asusté mucho

o -Dij

erca de la puesta para poder d

bonito -Co

gracias

a música? -Pr

vida, no podría viv

lgún instrumento

abía que si ponía dos dedos, uno sobre otro, en el tercer lugar tenía una melodía muy aguda y que en cuando más me acercaba al cuerpo más grave se escuchaba, a veces cantaba con él pero solo en algunas pocas ocasiones,

cada prenda la doblaba y de

é- Nunca he tocado

ntó Pablo- Tienes un

nte- Supongo que mi pad

ó Pablo- Si algún día lo conozco qui

silencio un p

on él cuando yo me

aginé -Dijo rápidamen

no tenías por qué

prometo preguntar la pr

ien -Re

a pesar de que ya había fallecido hace cinco años. Independientemente de lo seguro que nos podamos encontrar sobre haber superado a una pers

en ese momento, aun sigo sin entenderlas, creo que simplemente las dijo por el deseo que tenía de tenerme, siempre fue muy cariñoso conmigo, en cada oportunidad que había

adres jamás morirían, pero a veces eso no nos garantiz

veces en el día, de esas que nuestra mente canta a la hora de dormir y no te dejan conciliar el sueño. Me quedé realmente sorprend

por favor

, no la con

ía que no lograra escuchar lo fuerte que sonaban, mientras se acompañaban de los retumbes de mi corazón que parecía q

o que volví a darme vuelta intentando calmarme. Suponía que los tomates rojos que tenía al frente

nzó a cantar una de las canciones qu

inúala -Ins

puedo, estoy trab

na -Pid

ntenciones de permitirme irme sin cantar así que cumplí con su pedido. Fue un momento realmente único, como si la hubiésemos ensayado durante meses, ¡Era magia! Su timbre mezclándose con el mío

colores vibraban, la vida dolía un poco menos. Su sonrisa se me tornó perfecta como sus oj

, pero debo seguir traba

sonreír como una niña con un juguete nuevo en una fecha insignificante, donde no esperas recibir nada, sólo es

ella, ni tampoco su cuarto: Tenía una puerta color rosa con su nombre escrito en letras cursiva, me hubiese

cos, peluches tan grandes y limpios, tenía que prestarle suficiente atención si quería contarlos ya que a simple vista no lo podía hacer. Me hizo recordar que cuando tenía su edad yo tenía dos: Uno como de veinte centímetros color blanco en forma de oso que se volvió bas

enía sentido! ¿Acaso no se dieron cuenta que había una barra delante de donde ponían el espejo? ¿O no se dieron cuenta de que la pusieron sobre el mismo? ¡Los ricos son ta

ampos. El día había sido bastante agotador, trabajé mucho más que en cualquier otro día de mi vida pero no iba a quejarme de nada, tan solo los pies me dolían por haber estado par

el privilegio de bañarme con agua caliente como pocas veces había podído deleitarme a lo largo de mi vida, ya que en invierno solamente calentábamos agua y aun así no era tan caliente como esta, prácticamente ni sentía el agua caer sobre mi cuerpo por lo muy

confortante pero no podía quedarme a vivi

paraba, no tenía dinero para comprar otra cosa, quizá no era el más d

nó mi ropa? -

s extendidos, los puños firmes y cerrados, y los hombros rígid

cerse cargo? -Grit

manta? -Pregun

novata? -Insi

la ropa en tu

arse respecto a una gama de colores, no como se te den las ganas. No es mi culp

aprendido desde niña era que si no me gustaba como alguien más hacía las cosas para mí, tenía la opción de hacerlas por mi cuenta y no quejarme por lo tanto de ello. Pero debía calmarme, no era mi casa, no

¿Acaso yo te he enseñado

son servidumbre

ele a Katia que ordene la r

a pero aún molesta. Juan se acercó h

s cuidado de preguntar la

uese correcto pedir dis

r -Dijo Juan y me sorprendí- Samanta tomó las malas costumbres que su madr

sculpas por comportamient

apenas un año que hemos perdido a su madre y aún le cuesta aceptarlo, en su cabeza hasta se le oc

os llenó de agua fresca, uno me lo ofreció y lo ac

e de la forma en la que querían sin importar si eso traía consecuencias, de lo contrario había que dejarle el lugar a otro. Trato todos los

cado su forma de hablar y actuar, ¡Y sí! Una niña pequeña lo había logrado, no quería ni imaginarme

ntiendas

-Dije- Muchas graci

s platos y tazas del desayuno con detergente por primera vez en mi vida, ya que antes sólo lo hacía con un trapo y agua ti

a -Llam

las manos rápidamen

le ofrece?

a comprar unas cosas, yo

- Cuando quiera, est

oda, yo te espero -Insist

ores celestes y violetas que llegaba hasta mis rodillas y cuyos hombros no estaban tapados, solté mi cabello y puse un

las demás sirvientas estaban ocupadas y por eso terminaban recurriendo a mi, a pesar de que tenía ent

llevar zapatos de vestir, no voy a negar que se veía sumamente atractivo vestido de esa forma, su perfume conseguía invadir toda la sala y

ante imaginé que me usarían como una bolsa ambulante, después de todo Samanta tenía razón: Yo

ista? -Pre

reo -R

-Dijo

de seguridad e hicimos un viaje de aproximadamente diez minutos. Un gran local había allí, entramos y proc

Exclamó Samanta- Papá, ¿

te acompañ

s y se fue rápidamente tras Samanta que hab

pasó? -

as que no acompaño a compra

so? -I

ien tampoco, y mi padre es un poco más cuidadoso con el d

una pausa- ¿Siempre v

es -Comentó Pablo- Mamá solía elegir las cosas, desde que murió solemos tra

nariz como si pudiese sentir su olor

co está bien -Com

rte sus ojo

n sus ojos? -Preguntó im

uy gracioso. Le señalé lo que dec

enté- Los ojos deben estar s

o la cáscara de costado

stá vacío

todo eso? -Pregunt

esumía de tenerlas y poder tener los recursos para comprarlo ya que no era algo tan barato de comprar. Presté atención a t

en la verdule

coco está bien!

llevarlo pero no t

ablo- Si gano tendré derech

tuviera bien según mis hipótesis y lo dejé en el carro. Pablo tomó un bolígrafo y marcó el que había elegido él como si fuera un pequeño n

lo que pedía la lista

studiado? -P

mo electricidad, biología, fisiología o ciencias matemáticas, pero no tengo títulos, porque debía pagar mucho para obten

penas la secundaria

ando ingeniería indu

llevó a es

eres? -Preguntó

istinto? ¿Qué es lo que te motiva a no querer aban

s que te hagan pensar? -R

mento

ón por ser como eres", y tenía razón, pero estaba tan estereotipado que debemos h

y a lamentarme p

ablo e hizo una pausa- Déjame pensar e