ha estado bien en la oficina y que canceló mi cita en la tienda de lencerÃa, me levanto y miro mi reflejo en el espejo, estoy ojerosa, y
que no puedo sostenerle la mirada sabiendo que me engaña. Me siento débil y me lanzo de nuevo a la cama
Clau
vas a hacer, Isabella?». Suspiro y trato de tomar una decisión desde la cabeza porque yo a Claudio lo amo, es el amor de mi vida y podrÃa perdonarle esta infidel
pasó y espera el momento para descubrirlo, cuando
ué atenerme en caso de divorcio, debo prepárame fÃsica y emocionalmente par
año que he usado como terapia y voy a buscar la lencerÃa que habÃa comprado para la ocasión, corpiños blancos con encaje que no dejan nada a la imaginación, agrade
das maneras, es beige con blanco, tirantes de cuero sobre mis pechos, falda ceñida y muy sexi, querÃa que quisiera follarme al verme sobre cualqui
cer mucho con él, me veo muy sensual, bajo hasta la sala y lo espero. Mientras lo hago med
mucho los ojos y me r
ba ahora mismo -dice relamiéndose los labi
su entrepierna y gru
o? Quiero ver
uelta, me tendiera sobre el sofá y me pusiera en cuatro patas, pero ho
estro aniversario de bo
ha a
a que te trate r
adeo y me sobresalto, paso saliva. Me abraza desde atrás y siento su ere
a donde tenÃa planeado llevarte, pero no puedes pretender estar ves
a su cercanÃa, a su calor, a su sexo duro contra mi t
o una celebración de aniv
ado bajar uno de los tirantes de cuero y hala uno de mis pezones con rudeza mientras besa mi c
us caricias. Su olor a recién baña
manos con una sola de las suyas, se abre el pantalón y espero hasta que lo siento, me embiste repetidas veces, jadeo contra la mesa de madera, no me juzgo,
a, que buena qu
vo, besa mis labios con pasión que le devuelvo, me cuelgo de su cuello
i no puedo respirar, nos separamos, me
para esta noche, te lo juro que cancel
e hiciera el amor hasta que me desmayara, que me follara sin descanso, pero hoy nec
-susurro
de medi
va a estar mirando las tetas, e
a y recojo
y vestida como
a el cabello
, estás casada. No sales de aquà vestida a
finjo otr
rme rápido -d
astigarlo, pero mi cuerpo estaba muy deseoso de su contacto. Limpio mis lágr
omplacido y me besa en
o que te vean conm
espera sino uno de sus helicópteros, uno de los empleados me coloca unos audÃfonos y me ayuda a subir al he
odo está bien, recuesto la cabeza de su hombro y él besa mis labios un par de veces, el aparato se eleva y él me invita a mirar por la ventana, la ciuda
hace dos años, que tengamos cuatro de relación y los que faltan -dice y saca de su bols
creerlo, es un diamante rosado groseram
é? -
especiales que hay en e
ariciando mi espalda, olvido por compl
ngua cuando me
hable. Pasa sus dedos por mis labios con rudeza y suspira, mi respiración se ag
a que comienza a crecer su erección, lo estimulo entonces con mis manos, la pres
ués,
deberÃa decir que sé que me engaña, deberÃa al menos ponerme celosa y dudar, pero soy incap
disfrutado mucho la noche. Sacudo la cabeza y me reprendo, pues sà que disfruté como me folló sobre la mesa. Siento que quiero sal