no anoche; la doctora Debora Griffit

la sala y echó un vistazo al nombre que estaba

eguntó ella, comprens

esponder a su pregunta, simplemente tiró de ella con bastant

n su cuerpo esbelto y musculoso recargado en una posición casual y sus largas piernas cruzadas frente a sí. Se necesi

impregnaba las paredes del hospital enmasc

las cuales de otro modo habrían alarmado a todos a su alrededor. Había un dejo de dureza en su expresión, el cual

te, probablemente por sus agresores, para asegurarse de no dejar ninguna huella y eliminar cualquier posible evidencia. Ella es la doctora Debora Griffith, la r

s Isaac leva

uenta de que el hombre que tenía delante

yudó anoche?", preguntó Isaac

ara, incapaz de encontrarse con

bargo, sabía que lo mejor para ella sería que Isaac Johnston estuviera

al Militar estaba a punto de seleccionar c

stria sabían que los pasantes eventualmente se mudarían

ar tenía acceso a recursos que eran m

a Isaac con la esperanza de usar sus conexiones

forma que quieras, incl

e tiempo, el rostro del hombre había lucido distante, pero el recuerdo

mucho más de lo que se había imaginado, tanto

ués de hacerle un gesto a Willie para que le diera su

ital se apresuró y se ofreció a

frío de nuevo. Luego se detuvo, como si se le hubiera ocurrido a

estó el hombre con u

a su jefe y, en voz baja pero urgente, le dijo: "Señor, usted ya está casado. No creo que el mat

stro se ensombreció aún más cuando pensó en la mujer con la que se había vis

do evitar preguntarse quién había hecho enfurecer más a su jefe, si su supu

gresó a la villa que debí

ecibió en el vestíbulo con el rostro marcado por la p

, respondió ella, cuyos ojos estaban enr

o, Glenda decidió n

a, sus pensamientos regresaron a la noche anterior, a la vez que sus mejillas se sonrojaban sin

cto eran complicados y no

ea de qué tipo de pe

ulpabilidad. A pesar de las circunstancias que los habían llevado a s

se, se vistió y se prep

cuando la vio bajar las escaleras. "¿Volverá a

e lo cual respondió: "No, grac

sara una cantidad excesiva de tiempo en el trabajo. "Al menos beba esto

en voz baja, conmovida por

ó esta última, sonr

a su patrona por eso. Por el contrario, aun sin el título de esposa de Isaac Johnst

leche, Camila le devolvió

el personal. A decir verdad, salió de casa temprano porque antes de c

ngresada en la unidad d

probó la condición de su mamá. Al notar que su es

ndición era crítica. La única forma de que ella se mantuviera viva er

asarse con Isaac fue que su papá la había amenazado con

apá se lo había exigido, todo lo que necesi

jer en coma y susurró con voz algo tembloro

s cercana a ella, su prin

nto, sonó s

ó de su bolsillo y r

hagas un favor!", excl