Desde el principio de los tiempos el mundo fue gobernado por cuatro especies, las cuales convivían en total armonía, las ninfas, las brujas, los vampiros y los lobos, hasta que un amor no correspondido rompió con todo aquello y el humano trato de tomar un lugar para el que no estaba capacitado. Miles de años después, cuatro seres de estas especies se enamoraron, marcando el comienzo de un nuevo cambio. Una ninfa se enamoró de un vampiro, ¿raro? Solo un poco, teniendo en cuenta que son seres naturales y protectores, ¿Que vio en un vampiro despiadado? Una bruja blanca, se enamoró de un hombre lobo, parecería un cliché, de no ser porque los lobos odian a los brujos, ella una mujer de luz libre, con un hombre posesivo y agresivo. La hija híbrida de la ninfa y el vampiro se enamora del hijo híbrido de la bruja y el hombre lobo, procreando a una joven con la belleza de una ninfa, cabello color blanco característico de las brujas, la piel pálida como vampiro y carácter explosivo de lobo, pero aparte de ello, nada más, parece que esta hermosa joven será una mortal sin poder alguno. Pero aun así tan hermosa como la luna, y así la llamaron Aysel, como la luna. Pero ¿que pasara cuando un humano, un vampiro, un mago y un hombre lobo la reclamen como su amor eterno?, ¿cuándo la lastimen y se enfrenten entre ellos? Tarde se darán cuenta del error cometido, cuando ella sea la primera meta morfo híbrida teniendo las capacidades de ser dadora de vida e inmortal como las ninfas, la primer Luna capaz de transformarse en loba, la única vampiro cuya sangre les permitirá a esta especie vivir mejor y la única bruja en manejar los cuatro tipos de magia. ¿Podrá vivir con sus personalidades múltiples?, ¿con quién se quedará para compartir toda la eternidad? TRAVOS EL BRUJO - "Eres mi media alma Yunuen, nuestro amor no entiende de tiempo, gracias a una maldición de los humanos estamos condenados a vivir nuestro amor por solo unos años, antes de perecer y renacer, solo para seguir con nuestra maldición." AYSEL- "Rompiste su corazón, consumiste su alma, Yunuen está herida y es solo por ti Travos. Pero ella te ayudara a encontrar la paz." CALIXTO EL VAMPIRO- "Soy tu eterno enamorado mi hermosa Levana, te he buscado por miles de años y al fin has regresado, esta vez no te dejare marchar. Soy tu esclavo te pertenezco." LUNA- "Tu espera y lealtad será recompensada, pero no como tú crees, Levana tiene una sorpresa para ti Calixto." KASUMI - "Aysel, no te dejare sola, y si te pierdes, yo te guiare, no me subestimes, soy humano, pero soy el mejor cazador." LEVANA- "El amor es algo que está fuera de tu entendimiento humano, veremos qué tan buen cazador eres." ANUK EL LOBO- "Luna, eres mía, mi mate, mi pareja designada, mi luna blanca, estarás a mi lado, aunque yo no te quiera." YUNUEN- "Alpha, tarde te darás cuenta de lo que realmente quieres, entonces serás tú el que sufrirás."
La manada Vanagandr, tenía su nombre bien merecido, de todas las existentes, era la única donde sus ALPHAS doblaban su tamaño y poder al ascender a su puesto, siempre y cuando hallaran a su luna, hasta el momento, solo un Alpha había sido bendecido por la Diosa luna de tomar su lugar como cabeza de la manada, duplicar su tamaño y poder, sin conocer a su luna y ese había sido Fenrir, todos decían que fue por su nombre que consiguió aquel favor, y es que tanto Fenrir como Vanagandr hacen referencia a la misma criatura nórdica, el gran y poderoso lobo que ni siquiera Odín pudo controlar, pero aho
ra la manada estaba bajo el mando de Anuk, quien enfrentaba un gran dilema.
ANUK:
"Maldición, odio tener que hacer esta reunión estúpida, solo espero que esa dichosa Luna blanca no sea mi mate, no me gusta dejar entrar a cualquiera a mi manada. Además ¿cómo será tener una Luna Blanca? Si ya de por si es complicado manejar a las lobas, que una Luna se pueda transformar traería muchos problemas, los Alphas de otras manadas la buscarían cuando este como loba para atacarla, más en época de celo."
Anuk tenía razón en lo que pensaba, si bien todas las mujeres lobos, podían transformarse al igual que los hombres, las que eran destinadas a ser lunas, perdían esta capacidad cuando eran reclamadas por el Alpha de la manada, ya que así se les dificultaba ir a pelear en alguna batalla y era más fácil para los demás protegerla, Anuk incluso seria dichoso si su pareja destinada o mate, fuera una humana, cualquiera que no le ocasionara problemas, o por lo menos más de los que tenía, ya que al ser el Alpha de una de las más grandes y poderosas manadas del continente, eran muchos quienes lo desafiaban, para probar su valentía.
Pero estaba escrito que la Luna Blanca no perdería esta capacidad, lo que no tenían claro era porqué.
Una noche de luna llena hace poco más de 20 años, cuando esta brillaba como si fuese una perla en el cielo negro, la Diosa Luna dejo oír su voz, en todo hombre lobo que existía en la faz de la tierra, todos y cada uno escuchó a su Diosa.
"Aquella que es como yo está a punto de llegar, para guiar a todos mis hijos, ella será la única luz en la tierra que los guiara y reinará con sabiduría, todo hijo mío que desee mi gracia deberá cuidarla y obedecerla y a cambio ella será la única luna capaz de transformarse en loba, para cuidar de ustedes también. Aquella que es como yo, será eterna, brillante, una luz en la oscuridad, pero al ser mi hija, también tendrá su lado oscuro, y pobre de aquellos que la desafíen."
El Alpha fue sacado de su trance cuando uno de sus hombres toco la puerta.
- Anuk, un representante del consejo quiere hablar contigo.
- Que pase.
"¿Y ahora que quieren? Todavía tengo que ir a recorrer los límites de la reserva y cerciorarme que todo esté bien. Casi 300 años haciendo lo mismo una y otra vez, la inmortalidad es aburrida sin una compañera, me conformaría con una omega, incluso con una humana, Diosa Luna ¿acaso te has olvidado de crear a mi pareja?"
- Alpha Anuk, un gusto volver a verlo. - el hombre moreno saludo con un apretón de manos al Alpha que este año sería el anfitrión de la fiesta que llevaban a cabo para buscar a la luna blanca.
- Lo mismo digo, Jacob, ¿qué puedo hacer por el consejo? - Anuk trato de mostrarse lo más cordial posible, aunque toda esta situación lo estresaba.
- Tenemos un problema, han revisado los registros y tendremos que pedir una cabaña más para siete personas. - soltó sin más el representante del consejo.
- ¿Y eso?, que manada se me pasó por alto.
"No cometería un error tan estúpido. De eso estoy seguro, ¿qué es lo que se traen entre manos?"
Anuk era un hombre astuto, y era eso mismo lo que siempre le daba la ventaja ante sus adversarios, ya que al no tener a su Luna con él su tamaño y fuerza era casi el mismo que el de los demás Alphas.
- No ha olvidado a ninguna, la manada de Fenrir, ha dejado de asistir a las reuniones hace 21 años, y recién ahora lo notamos. - la sonrisa que se extendió por los labios de Jacob no era para nada sincera, y eso más lo alteraba al joven Alpha, porque a pesar de tener 300 años, Anuk aún era visto como un lobo joven.
- ¿Fenrir? ¡¿El que era nuestro Alpha y nos abandonó por una Bruja?!- exploto con la misma furia que lo hacía cada vez que oía ese nombre.
- Ese mismo, ya fue notificado que debe presentarse sí o sí. - el hombre se mostraba con la paciencia de alguien que ha vivido demasiado.
- ¿Acaso procreó cinco híbridos con esa mujer? - pregunto aun molesto y asqueado, los lobos y brujos no tenían una buena relación.
- No, ellos solo tuvieron un hijo, Caos.
- El nombre le va perfecto, pero no entiendo ¿entonces a que viene el pedido? están buscando a la Luna blanca, solo las híbridas y lobas que aún no tienen su transformación son requeridas y con ellas sus progenitores.
- Caos se casó con una híbrida, y tuvieron una niña, hace 21 años. - termino de explicarle.
- ¿Dices que la han ocultado apropósito? ¿Acaso la bruja de su abuela vio su suerte? - ahora Anuk se sentí inseguro, ¿Qué era lo que ocultaba ese lobo viejo?
- No es eso Alpha, sabemos que en tu reserva son conservadores y rigen viejas leyes, pero esto será así, quiera o no. - aclaro el hombre en tono serio.
"Esto no me gusta ni mierda ¿por qué no habla de una puta vez?"
- Bien viejo, ya me advertiste ahora habla. - estaba cansado de todo el rodeo de Jacob, como del silencio de su lobo, hacía mucho tiempo que no contestaba a los comentarios de Anuk, su lobo se comportaba como lo que era, un animal, siempre había sido así, de pocas palabras.
- Fenrir y la bruja Minerva tuvieron un hijo hibrido, Caos, sus genes de Lobo predominan aun así maneja un poco la magia, él se casó con Moiras, la hija híbrida de la ninfa Xylon y... Vidar un vampiro, en ella predominaron los rasgos de la ninfa, y de la unión de Caos y Moiras nació una niña, Aysel, es ella a quienes el consejo solicitó. - si la relación de los lobos con los brujos era mala, no debía de mencionarse que con los vampiros eran enemigos jurados.
- ¿Sabes que me acabas de revolver el estómago? eso es sumamente asqueroso. – dijo con verdadero asombro.
- Alpha, todas las híbridas tienen que venir y lo sabes, mientras tenga sangre de lobo ella puede ser la Luna blanca. - le aclaro por última vez el representante del consejo.
- Me pides siete lugares y ella es una, no me está gustando...- el hombre no estaba dispuesto a escuchar quejas, por lo que lo interrumpió.
- No tienes opción, vendrá toda su familia, esa fue la condición.
- ¡Condición! ¡¿Fenir pone condiciones, después de lo que hizo?!- Anuk estaba a muy poco de sacar a su lobo.
- Su nieta es humana, no es inmortal, por lo que ellos viven juntos, saben que el tiempo será mínimo teniendo en cuenta que ellos son inmortales y ella no. Han vivido juntos desde que nació. - Anuk rompió a reír para asombro de Jacob.
"Gracias Diosa Luna, gracias por hacer pagar a Fenrir, que mayor castigo que ese, tener que vivir con un vampiro mientras ves morir a quien amas."
- ¡Tú actitud no es la de un Alpha! - la indignación de Jacob no le afecto al Alpha.
- Déjame disfrutar de su desgracia, ¡¿acaso te olvidas de que cuando él se fue mi padre tuvo que tomar su lugar por ser el Beta y por eso murió?! ¡Perdí a mi madre y padre por su culpa! Nos dejó por una bruja. - el rencor que tenía Anuk hacia el ex Alpha tenía sus razones.
- Ten cuidado de que la Diosa Luna no te castigue, Fenrir también creía que mezclar razas estaba mal, y ya vez, dejo todo por su mate, una vez que encuentras a tu compañera, solo ella importa. - le advirtió el hombre con gran sabiduría.
- Es por eso por lo que dejo de asistir a las reuniones ¿verdad?
- Parece que su abuela tuvo una visión cuando Aysel nació.
- ¿Dices que puede ser la Luna Blanca? - por un momento esto lo inquieto, que todo ese poder lo tuviera Fenrir.
- No, no lo creo, pero Minerva vio que moría joven y es por eso por lo que la protegen y no se separan de ella. Eres el Alpha de la manada más grande y poderosa del mundo, sé que sabrás comportarte, tienes 300 años, no te matará tenerlos tres días en tu territorio.
- Sí, lo que digas. De todas formas, no tengo opción. - contesto con ironía, pero aun así con la verdad, no podía reusarse.
"Como si fuera tan fácil, me llevo más de 100 años dejar ir las ganas de matar a Fenrir, y ahora tendré que soportar a todos los que desprecio en una cabaña. Aunque eso puede ser bueno"
El Alpha espero que Jacob se retire y puso en marcha su plan, como si de un niño berrinchudo se tratara.
- ¡Kalu! - llamo a su amigo y Beta.
- ¿Qué sucede amigo?
- Busquen la cabaña más alejada y precaria en estas tierras, tiene que ser grande, para siete personas.
- ¿Y eso?
- Fenrir vendrá con su familia. Lo recibiremos como se merece. - y un brillo de maldad se instaló en sus pupilas.
- Lo siento por ti, escuche lo que el viejo Jacob dijo, pero piensa que, si encuentras a la luna blanca y llega a ser tu mate, podrás separarlos o matarlos, lo que lo haga sufrir más como él hizo contigo.
- ¿A qué te refieres?
- Estuve hablando con el hermano de Jacob hace un rato, dicen que la luna está cambiando y que este fin de semana al igual que el día que se dijo la profecía será la luna llena más blanca y brillante vista en décadas, piensa, la profecía dice que la Luna Blanca, será la que una a todas las manadas, todos caerán a sus pies, y vivirá tanto como el tiempo que la luna exista en el cielo, si ella le diera la orden a Fenrir, de abandonar a su familia o destruirla con sus propias manos, él tendrá que obedecer sería la venganza perfecta. No podría negarse, sería como negar su propia existencia.
- Eso sí lo entiendo, pero de todas formas por más tentador que suene, que la Diosa Luna me libre de que sea mi mate, demasiado tengo lidiando con los problemas de la manada como para manejar los conflictos de los demás, ahora sal y has lo que te pedí. - Apenas quedo solo Anuk dejo volar su mente, a esos recuerdos que tanto lo atormentaban.
"Mi padre murió en frente de mis ojos, y no pude hacer nada, nada más que matar a ese clan de vampiros, pero era un clan sin líder, por más años que lo busque no pude saber a quién obedecían, fallé como hijo en vengar su muerte, pero ahora tengo al verdadero culpable, solo te pido Diosa Luna, si tanto ama a su nieta, que esta muera joven y de la forma más dolorosa posible, que él viva durante toda la eternidad con ese sufrimiento, el mismo que sentí yo al perder lo que más quería, mi familia."
Lo que Anuk no sabía, era que lo que le deseas a tu prójimo se te es devuelto, y que con su ruego estaba sellando su propio destino.
La familia Zhao era la dueña indiscutible de casi todo el oriente, su clan, el tigre blanco, manejaba todo dentro del país, aunque no siempre fue así, antes, casi 20 años atrás, existió otro clan igual de poderoso, el dragón rojo, pero dicho clan encontró su fin por ir tras lo prohibido, ahora la suerte le sonreía al tigre blanco o al menos eso pensaban, hasta que su líder, Loan Zhao, decidió que era tiempo de retirarse y acudió a los monjes para que vieran su tatuaje, ese que los más ancianos le hacen en la espalda cuando asumen como líder y que solo puede ser descifrado, cuando se retiran de su lugar, y así pudieran decir cuál de sus hijos seria la nueva cabeza del tigre. Lo que menos espero escuchar, era que el futuro de sus hijos estaría regido por amores prohibidos, esos que pueden llegar a matarte, por destino o casualidad, el pasado se uniría con el presente, dejando solo dos caminos, la unión con familias poderosas a través de lazos indestructibles, o el dolor y la agonía de arder en amores prohibidos.
Mi nombre es princesa Antara primera del reino Kael, o al menos ese era mi nombre, pero cuando el reino de las brujas cayó, mi vida cambio, pase de vestir sedas y ser adornada con oro, a ser cubierta con harapos y lodo, una vagabunda mendigando en las calles del reino de Joako, los lobos son crueles con los extraños, pero entre todos ellos, creí tener una posibilidad de vivir, fingiendo ser una simple humana, el Duque White sufría por la pérdida de su hija y me acogió como remplazo, no fue fácil, pero pensé que había logrado al menos ganarme su cariño, pero luego entendí que no podía dar nada por sentado, comprendí que si no queria regresar a las calles, solo me quedaba una opción, atrapar al futuro rey Alpha, cualquiera diría que sería fácil salir embarazada de semejante hombre, claro que teniendo en cuenta lo loco que ese bastardo esta, lo genial seria salir viva luego de estar con él.
Si amas a alguien déjalo ir, si vuelve es porque es tuyo, sino nunca lo fue, al menos eso se dice, el problema es cuando alguien que nunca fue tuyo, regresa a tu vida, despertando demonios que creías enterrados. El gran empresario Mateo Zabet coloco una muralla entre ellos en su adolescencia, respetando que la joven que amaba tenía novio, casi dos décadas han pasado desde que la vio por última vez, hoy frente a él está el amor de su vida ¿feliz mente casada? — Esto no está bien, estoy casada y tengo hijos y... — susurra con voz temblorosa. — Esto es lo único que está bien Elizabeth, siempre fuiste tú, mi amor, mi vida, mi todo y no sabes cuanto odio no habértelo dicho antes. — reconoció tomando sus labios con verdadera pasión. gratis hasta finalización.
Mi vida fue un calvario, un mal cuento, aun así, me aferre a lo único que me daba esperanzas, mi compañero, no me importaba de que especie fuera, solo queria que me encuentre, y tener al fin un poco de felicidad, pero claro que nunca nada sucede como deseo. Ahora se supone que mi vida cambio, incluso hasta mi nombre, pero, sin embargo, el dolor permanece, se supone que debía cuidarme, amarme y respetarme, era mi Alpha después de todo, pero resultó ser un maldito, y lo peor, es que me embarazo, estoy embarazada del maldito Alpha, y ya no sé qué hacer con mi vida, ni siquiera sé si tengo una.
Pertenecer a la mafia no es fácil, mantener tu lugar mucho menos, atrapar a uno de los lideres más grandes del bajo mundo… es casi imposible. Dasha Morozova solo queria su lugar en el mundo, al lado de quien amaba, sabia los riesgos, creció con ellos, y cuando al fin creyó conseguir a quien queria… la vida le demostró que no todo es un cuento de hadas, más cuando vives rodeada de enemigos, ahora el amor ya no es su prioridad, busca venganza, quiere recuperar lo que por ley es suyo y no le importa a que demonio deba tentar para ello. Lukyan Neizan, sabe que el legado de sus padres pesa sobre sus hombros, el don de ver destellos del futuro es su gran aliado cuando debe cuidar su espalda y destruir enemigos, pero… hay imprevistos que escapan incluso de su don, es así como el gran mafioso dueño de casi toda rusia y apodado la muerte blanca, despierta un día con la noticia de que tiene un hijo, del cual ni siquiera sabe quién es la madre. Dasha debe atrapar a un mafioso que la ayude en su venganza. Lukyan debe honrar las leyes de su clan y casarse solo con la madre de su hijo. La venganza es un plato que se sirve frio, y atrapar a un mafioso puede hacerte arder mucho antes de conseguir lo que quieres, pero eso Dasha… aun no lo sabe.
Cuatro mujeres que fueron asesinadas por los hombres que amaban un mismo día, a la misma hora, en diferentes lugares del mundo. Pero el universo les tenía preparada una grata sorpresa, darles la oportunidad de renacer de los elementos, agua, tierra, aire, fuego, según como fueron asesinadas, en una nueva vida donde son elegidas para convertirse en hadas. Luego de estar en un complejo donde les enseñan a controlar sus poderes, son enviadas al cumplir 18 años a modo de última prueba a ayudar a cuatro hermanos que son responsables de un gran imperio empresarial, ellas creen que su misión es convertirlos en personas de bien, ya que estos hombres cargan con sus demonios personales, sin embargo, la última prueba es no enamorarse y así poder obtener sus alas y la vida eterna. ¿Podrán lograrlo? ¿O sus corazones volverán a latir por amor? ¿Podrán superar el dolor y la furia que les causó ser traicionadas por sus parejas, amigos y familia en sus vidas pasadas? ¿O desquitaran su ira en los hermanos Romanov? ¿Estos hermanos podrán jurarles amor eterno o están jugando con ellas? ¿Obtendrán sus venganzas, cuando el destino las ponga frente a sus homicidas? ¿Los enfrentarán ellas o los cuatro hermanos a los que han hechizado con su belleza? ¿Podrá más el amor o el sufrimiento? “Si un hombre espera que la mujer sea un ángel en su vida primero debe crear un cielo para ella. Los ángeles no viven en el infierno.”
Kallie era una muda. Su marido la ignoró durante cinco años desde su boda, no solo esto, ella hasta sufrió un aborto por culpa de su cruel suegra. Tras el divorcio, Kallie se enteró de que su exmarido se había prometido rápidamente con la mujer que realmente amaba. Sujetando su vientre ligeramente redondeado, se dio cuenta de que él nunca se había preocupado realmente por ella. Decidida, ella lo dejó atrás, tratándolo como a un extraño. Sin embargo, tras su marcha, ese hombre recorrió el mundo para buscarla. Cuando sus caminos volvieron a cruzarse, Kallie ya había encontrado una nueva felicidad. Por primera vez, él se humilló ante ella y le suplicó: "Por favor, no me dejes...". Pero la respuesta de Kallie fue firme y despectiva, cortando cualquier vínculo entre ellos: "¡Lárgate!".
Durante siete años, Jillian estaba enamorada de Bryan con pasión inquebrantable, pero él permaneció distante, con sus emociones herméticamente selladas. Descorazonada, ella se marchó al extranjero tras graduarse de la universidad. Tres años después, Jillian, ahora una abogada de éxito, se sentó provocativamente en el regazo del hombre. Con una sonrisa juguetona, le espetó: "¿Qué te pasa, Bryan? ¿Eres impotente?". Bryan ya no podía contenerse. Con un rápido movimiento, la tomó en brazos y la arrojó sobre la cama. A la mañana siguiente, cuando él se despertó, Jillian esbozó una sonrisa traviesa. "Solo es una aventura, ¿de acuerdo?".
La vida era un lecho de rosas para Debra, la hija del Alfa, hasta que tuvo una aventura de una noche con Caleb. Estaba segura de que él era su pareja designada por la Diosa de la Luna. Pero este hombre odioso se negó a aceptarla. Pasaron semanas antes de que Debra descubriera que estaba embarazada. Su embarazo fue una vergüenza para ella y para todos los que amaba. No sólo ella fue expulsada, sino que su padre también fue perseguido por los usurpadores. Afortunadamente, sobrevivió con la ayuda de la misteriosa Manada Espina. Pasaron cinco años y Debra no supo nada de Caleb. Un día sus caminos se volvieron a cruzar. Ambos estaban en la misma misión: llevar a cabo investigaciones secretas en el peligroso pueblo de Roz por la seguridad y la posteridad de sus respectivas manadas. Caleb todavía se mostraba frío con ella. Pero con el paso del tiempo, se enamoró perdidamente de ella. Intentó compensar el abandono de Debra, pero la chica ya no lo quería. Estaba empeñada en ocultarle que tenían una hija y también en hacer una ruptura limpia. ¿Qué les deparaba el futuro a los dos mientras viajaban por el pueblo de Roz? ¿Qué tipo de secretos encontrarían? ¿Caleb se ganaría el corazón de Debra y conocería a su adorable hija? ¡Descúbralo!
Jacob Morgan se ve obligado a contraer matrimonio por obligación su única intención es salvar su compañía de la bancarrota asumiendo el liderazgo de las empresas Morgan, puesto que es batallado por su primo Derek, a regañadientes acepta un encuentro orquestado por su madre con Natalia Redmond de inmediato queda prendado por la belleza de la dulce e inocente chica, pero rápidamente se da cuenta que sus exigencias no serán bien recibidas por la joven cuyo carácter obstinado se convierte en la horma de su zapato, lo que ignora Jacob es que Natalia oculta sus verdaderas intenciones al aceptar el matrimonio. Muchos secretos, muchas intrigas y muchos obstáculos. ¿Qué pasará cuando Jacob descubra la verdadera razón por la que Natalia acepta ser su esposa?
Hace cinco años, la familia Powell quebró. Madeline Powell dio a luz a gemelos; dejó uno con el padre del niño y se llevó al otro. Años espués, Madeline regresó como líder de Internet de opinión. Sin embargo, alguien se enteró de su regreso. El hombre la pellizcó por la barbilla y se burló fríamente: "Has publicado muchos videos en Internet, ¿qué tal filmamos algo picante juntos?". Los ojos de Madeline se abrieron y su garganta se secó. Al día siguiente, vio a un niño pequeño que se parecía exactamente a su hijo en la casa del hombre. Madeline no pudo evitar besar la mejilla regordeta del pequeñito. Sorprendentemente, el niño no estaba contento. Puso una cara solemne y preguntó: "¿Qué estás haciendo?". Madeline estaba furiosa. ¿Cómo pudo ese hombre haber hecho que su hijo fuera tan desagradable como él?
Eden McBride pasó toda su vida siguiendo las pautas de la sociedad. Pero cuando su prometido la dejó un mes antes de su boda, Eden deja de seguir las reglas. Una furia insaciable es justo lo que recomienda el médico para su corazón roto. No, en realidad no era así. Sin embargo, era lo que necesitaba Eden. Liam Anderson, el heredero de la empresa de logística más grande de Rock Union, era el tipo perfecto. Apodado el Príncipe de los Tres Meses porque nunca estaba con la misma chica por más de tres meses, Liam había tenido una buena cantidad de aventuras de una noche y no espera que Eden sea nada más que eso. Cuando se despertó y la encontró con su camisa de mezclilla favorita, Liam comenzó a estar irritado, pero extrañamente intrigado. Ninguna mujer había abandonado su cama voluntariamente ni le había robado. Eden había hecho ambas cosas. Necesitaba encontrarla y arreglar las cuentas. Pero en una ciudad de más de cinco millones de habitantes, encontrar a una persona era como buscar una aguja en un paja. No se vieron hasta que el destino los volvió a reunir dos años después. Eden ya no era la chica ingenua que era cuando saltó a la cama de Liam; en ese momento tenía un secreto que proteger a toda costa. Liam estaba decidido a conseguir todo lo que Eden le robó, y no fue solo su camisa.