Denzel Carpentier es un hombre atractivo, arrogante y mujeriego; que no conoce de lÃmites cuando de mujeres se trata. Es el vicepresidente de una de las cadenas de tienda de ventas al por menor más famosas del paÃs y futuro heredero de la corporación multinacional. Sin embargo, nunca imaginó la sorpresa que su padre y su abuelo le tenÃan preparada. SerÃa despojado durante seis meses de todas las comodidades y beneficios que su apellido le ofrecÃa y, a cambio, debÃa conseguir la manera de forjar una nueva empresa durante el plazo sugerido, sin la ayuda de ninguno de sus conocidos o familiares, hasta convertirla en un negocio exitoso y rentable. Goldie Moore es una joven emprendedora que se gana la vida diseñando tarjetas de invitación para poder costear sus estudios en la carrera de publicidad. Sus múltiples compromisos la obligan a buscar a una persona que se encargue de las tareas del hogar mientras ella se dedica de lleno a su negocio. ¿Qué puede pasar cuando la persona que contratas es un hombre que ni siquiera tiene idea de cómo usar el detergente? Identificador 2302033332256 Fecha de registro febrero-2023 © Todos los Derechos Reservados
Observo la hora en el reloj sobre la mesa de noche y noto que están cerca de dar las ocho de la mañana. Me levanto a toda prisa, pero un intenso dolor de cabeza que está a punto de hacerme volar la corteza cerebral me obliga a quedarme sentado al borde de la cama durante algunos minutos más para esperar a que las palpitaciones de mi cerebro se detengan.
¿Qué demonios sucedió anoche?
Miro a los alrededores y me doy cuenta del enorme desastre que hay en la habitación. Hay un par de botellas de champaña en el suelo, ropa desparramada por lugares inimaginables y platos servidos y a medio comer sobre la mesa. Intento recuperar los recuerdos de lo que sucedió después de dejar mi oficina y dirigirme al club, no obstante, la resaca no me lo permite.
Me levanto de la cama y camino como zombi en dirección hasta el cuarto de baño. Saco un par de pastillas del gabinete y las bebo con un poco de agua del chorro. Pongo las manos en la encimera y me observo al espejo. ¿Qué carajos? ¿Quién demonios hizo esto? ¡No puedo creerlo! Tengo la frase, vete a la mierda, escrita con marcador negro sobre la frente. ¡Joder!
Necesito recordar cuanto antes qué carajos hice anoche. Me devuelvo hasta mi habitación para buscar mi teléfono, pero, para ser sincero, tampoco recuerdo qué hice con él. Agacharme no es una opción si quiero mantener mis sesos en el mismo lugar. Salgo del cuarto y en lo que llego a la sala escucho las carcajadas de mis amigos que se retuercen y se revuelcan de la risa mientras me miran con diversión.
Bajo la mirada y observo con asombro que llevo puesto un calzoncillo de elefante en color rojo y en cuya trompa llevo guardado mi miembro. ¿Qué jodida broma es esta? Elevo la mirada y fulmino con ella a mis buenos y fieles amigos que, estoy más que seguro, son los artÃfices de esta broma de mal gusto.
―Juro que me las van a pagar imbéciles ―menciono con enfado al llevar las manos hacia mis partes nobles para ocultarlas―. ¿Eso es lo mejor que se les ha ocurrido hasta ahora?
Niegan con la cabeza.
―No fuimos nosotros ―comenta Gonzalo, aún cuajado de la risa―. Vinimos tan pronto como vimos las imágenes en las redes ―agrega divertido―, papi y el abuelo no estarán felices con esto.
¿De qué habla?
―Te van a desheredar ―anuncia Walter―. Después de la amenaza que recibiste de ellos, creo que en esta ocasión no te salvas de esta.
Sus palabras comienzan a ponerme nervioso.
―Pueden decirme de una jodida vez, ¿de qué están hablando?
Gonzalo se levanta del mueble y me tiende su móvil para que le dé un vistazo. Una ráfaga de escalofrÃo recorre mi espina dorsal y me paraliza las pelotas. Esta vez me pasé de la raya. Llevo la mano hasta mi cuello y lo froto con preocupación. El dolor de cabeza se esfuma de un plumazo y la preocupación ocupa su lugar.
―No sé cómo vas a explicarle esto a tus viejos, pero te prometo que de esta no te salvas.
Trago grueso. No pasan ni cinco segundos cuando el sonido de mi teléfono apaga las sonrisas de las bocas de mis amigos. Ellos reconocen el tono que está sonando y eso solo significa problemas.
Atravieso la sala a toda velocidad y me dirijo hacia la barra. Ni siquiera recuerdo haberlo dejado en aquel lugar. Aprieto los ojos antes de pulsar el botón y responder la llamada.
―Abuelo...
Maldigo por lo bajo al escuchar el alarido estridente que sale de mi boca.
―Tu padre y yo te estamos esperando en la oficina Denzel y más te vale que traigas tu maldito trasero o te prometo que te vas a arrepentir por el resto de tu vida.
Cuelga sin permitirme decir una sola palabra más. ¡Mierda, mierda, mierda!
―Se te viene al Armagedón, viejo ―expresa Walter con semblante de preocupación―. Ahora mismo no quiero estar en tu pellejo.
Gonzalo se levanta del sillón y se aproxima hacia mà después de darle una mirada a su reloj de pulsera.
―Más te vale que muevas tu trasero o Cruella De Vil, no tardará en publicar tu obituario en las páginas principales de todos los diarios y revistas de la ciudad. Esa mujer quiere tu puesto y no dudo que lo consiga después de esto.
La sangre se drena de mi rostro. Asiento en respuesta antes de salir corriendo hacia mi habitación. Tomo un baño rápido y saco uno de mis mejores trajes para asistir a la reunión. En menos de diez minutos estamos bajando al estacionamiento.
Me despido de los chicos y cojo la avenida a una velocidad que está al lÃmite de lo permitido. Cinco minutos después, bajo del elevador y hago el recorrido por el camino de la vergüenza, antes de detenerme frente a la puerta de la oficina del presidente de Carpentier Amazing Holdings Inc.
Respiro profundo y adopto mi actitud de hombre seguro y responsable antes de abrirla y enfrentarme al gran jurado. Al ingresar, veo los rostros furiosos y contrariados de dos de las personas más importantes de mi vida.
―Siéntate.
No hay saludo de buenos dÃas ni la tÃpica sonrisa de admiración y orgullo que siempre he visto en la cara de mi viejo. El segundo al mando de esta gran corporación.
―Papá, puedo explicar...
No puedo terminar la frase, porque mi abuelo no me lo permite. Después de entregarle el mando a mi padre, se convirtió en el único miembro honorario de la corporación y en nuestro asesor principal, además de ser uno de los accionistas mayoritarios de esta empresa.
―¡Cállate la boca y siéntate!
Mierda. Sà que están furioso y no es para menos, sobre todo, después del semejante espéctalo que di en vivo por las redes sociales.
―¿Estás consciente de la posición en la que nos pusiste con lo que hiciste anoche?
Cómo explicarles que ni siquiera recuerdo lo que hice.
―Lo lamento abuelo, no fue mi intención.
Respondo avergonzado.
―¿Crees que un lamento lo soluciona todo?
Esta vez es mi padre el que interviene.
―Se que no, pero yo...
Vuelvo a ser interrumpido.
―Haz puesto la seriedad y el prestigio de nuestra empresa en entredicho y has arrastrado nuestro apellido por el fango sin ningún respeto y consideración ―no tengo palabras para refutarlo―. Te lo advertimos, Denzel ―sisea mi padre con enojo mientras me acribilla con su mirada―. No te Ãbamos a dejar pasar una sola más de tus locuras ―carajos, tengo el presentimiento que esta vez la boté del campo de juego y con las bases llenas―. Te hemos dado demasiadas oportunidades y esta vez no estamos dispuestos a aguantar uno más de tus malditos desastres.
Trago grueso y los miro con nerviosismo.
―Tu padre y yo tenemos dos horas conversando al respecto ―expresa mi abuelo con la voz carente de emoción―. Ya no eres el mismo chiquillo de quince años atrás que solÃa ir por la vida actuando sin ningún reparo ―escupe furioso―. Eres un hombre de treinta y cuatro años que sigue negándose a madurar, pero es lo que menos nos importa, lo que está en discusión es el hecho de que eres el maldito vicepresidente de esta empresa y con tus acciones has puesto en peligro la reputación de la corporación.
Sigo escuchando sin atreverme a abrir la boca. No hay nada que hayan mencionado que no sea verdad. Está bien, la jodÃ, pero tampoco es para tanto.
―En vista de que sigues negándote a escuchar nuestros consejos y recomendaciones ―dejo de respirar hasta escuchar lo que viene a continuación, mucho me temo que no me va a gustar para nada―. Tu padre y yo hemos decidido separarte del cargo a partir de este momento.
¿Qué? No pueden hacerme esto.
―Pero, abuelo, ¡es una decisión exagerada!
Digo exaltado al levantarme de la silla.
―¿Exagerada? ―grita mi padre―. ¿Crees que tu abuelo y yo, vamos a arriesgarnos a dejar las riendas de esta corporación en tus manos? ¿Qué vamos a permitir que tires a la basura todos los años de esfuerzo y sacrificio que hemos dedicado para poner el nombre de esta empresa entre las mejores del mundo?
Niego con la cabeza.
―¿No pueden estar hablando en serio?
Mi abuelo pulsa el interfono para llamar a su secretaria.
―Nos tomamos muy en serio cualquier decisión que tenga que ver con esta empresa, pero, sobre todo, con nuestra familia.
Un par de segundos después entra Cruella de Vil, con una sonrisa de satisfacción dibujada en su boca. Deja una carpeta con una serie de documentos delante de mi padre. La muy lameculos le facilita un bolÃgrafo cuando nota que mi padre no logra ubicar el suyo.
―Aquà tiene, señor Carpentier.
Aprieto los labios en una lÃnea fina.
―Griselda, este es el comunicado para que a partir de este momento se notifique a todos nuestros empleados, socios y clientes que, mi hijo, Denzel Carpentier; ya no tiene ningún tipo de relación con esta empresa ―las pelotas se me suben a la garganta―. De la misma manera se inhabilitarán todas las tarjetas corporativas, el acceso a cualquiera de sus cuentas, asà como también, se le expropiarán todos los activos que estén a su nombre.
¿Qué demonios es lo que están haciendo? ¡Me acaban de robar toda mi vida!
―Por supuesto, señor Carpentier, lo haré de inmediato.
La muy zorra se acerca y se para delante de mÃ.
―Le agradezco, por favor, que me entregue todas sus tarjetas de crédito.
Giro la cara y miro a mi abuelo y a mi padre.
―Papá, abuelo, no pueden hacerme esto.
Les digo con un susurro.
―Podemos y lo estamos haciendo ―indica papá con un gesto de decepción en su rostro―. Haz el favor y evÃtanos este trago amargo y doloroso ―me pide con un tono de voz plano. Hacer esto no es fácil para él―. Entrégale las tarjetas y haz el favor de abandonar esta oficina.
Con la mano temblorosa saco la cartera de mi chaqueta y extraigo todas las tarjetas. La bruja toma una tijera y las hace pedacitos en mi propia cara. Lo está disfrutando como nunca. Me doy la vuelta y sin decir una sola palabra más, me dirijo hacia la puerta. No obstante, antes de que abandone la oficina, mi abuelo, dice sus últimas palabras.
―Si estás dispuesto a demostrarnos que vas a cambiar y que quieres que te demos una nueva oportunidad, vendrás a esta misma oficina en un plazo de setenta y dos horas ―detengo mis pasos para escucharlo, pero no me doy la vuelta―. Tendrás que convencernos con hechos, que eres un digno representante de esta familia y que estás preparado para asumir la presidencia de esta corporación. Caso contrario, no vuelvas a asomar tu nariz por este lugar.
Rachel Ward se habÃa convertido en la obsesión de Ludwig Reeves. Desde el momento en que la vio, juró que aquella mujer iba a ser suya. La chica mojigata de mirada profunda y perturbadora, labios sensuales y rostro angelical; se convirtió en un reto que no estaba dispuesto a rechazar, aún y cuando, su inocencia y timidez fueran un gran obstáculo para un hombre tan perverso. Después de aquella noche, en la que tuvo una probada del fruto de la tentación, del olor a inocencia, del ángel caÃdo del cielo; decidió ir tras ella y satisfacer sus deseos más oscuros y prohibidos, sin saber que, aquel reto, se convertirÃa en su perdición; en la manzana prohibida de su propio paraÃso. Una chica inocente y angelical entrará en un mundo oscuro y lleno de depravación que cambiará toda su vida de la noche a la mañana. Su ingenuidad será el motivo de sus desgracias y la causa por la que dos hombres se obsesionarán con ella y estarán dispuestos a hacerlo todo para tenerla. Un enfrentamiento que provocará terribles consecuencias y en la que solo uno será el gran vencedor. Reeves, hará lo que sea para quitar de su camino a todo lo que se interponga en sus planes de hacerla suya. El destino de Rachel estará en las manos del hombre más oscuro y peligroso, uno capaz de llegar hasta las últimas instancias para obtener lo que quiere, un hombre al que todos llaman... Amo de la perversión. Reeves, está aquà y ahora la quiere a ella. Identificador 2108259036837 Fecha de registro agosto-2021 © Todos los Derechos Reservados
La felicidad y el amor se convirtieron en el tesoro más importante y valioso que Paúl Nicholson y Priscilla Davis, habÃan encontrado juntos. Se amaban como jamás imaginaron, podrÃan hacerlo y se juraron amor eterno, incluso, más allá de sus propias vidas. Solo que, el destino se interpondrÃa y les jugarÃa una mala pasada, para obligarlos a romper la promesa que el dÃa de su boda se hicieron frente al altar. Sin embargo, y a pesar de la terrible tragedia que acabó con todos los planes que habÃan trazado, sabÃan que ni siquiera la muerte podrÃa hacerles olvidar el juramento que un dÃa se hicieron, ni con el gran amor que estaban seguros perdurarÃa y prevalecerÃa; aun después de que sus vidas terminaran. Estarán dispuestos a luchar contra destino que un dÃa los separó, para reencontrarse de nuevo y volverse a amar… más allá de sus vidas. Solo que el destino tenÃa algo más previsto para ellos… Anthony McGregor. Un hombre adinerado, imposible, insoportable y el más detestable de todos; aparecerá para complicar sus propósitos. Una mujer que lo ha perdido todo. Un hombre que no estará dispuesto a perderla por segunda vez y que hará todo lo posible para recuperarla. Otro, cuyo único objetivo es él mismo y su amor propio. Dos hombres convertidos en uno solo, el amor por una misma mujer y una lucha sin treguas en la que solo uno de ellos… será el vencedor. Identificador 2210252494214 Safe creative Fecha de registro 2022 © Todos los Derechos Reservados
A sus veintisiete años, Victoria Kent ha logrado todo lo que en su vida soñó: Ser una reconocida ejecutiva y la futura esposa de un abogado muy exitoso. Ethan Callaway, es el director de marketing de Sutton International Design; un hombre muy astuto en los negocios, sexy como el demonio, seductor y atractivo. Pero tiene un molesto y gran problema... Victoria Kent. Victoria llega como la nueva CEO de la empresa de diseño, sin saber que esta designación le ha arrebatado de las manos a Ethan, el cargo para el que él se ha estado preparando durante algunos años. Ella está decidida a ser la mejor y para ello debe lograr que, Ethan, se incorpore a su equipo y trabajen juntos para garantizar un trabajo exitoso. Sin embargo, él... tiene otros planes. Usará todo su ingenio para acabar con las pretensiones de Victoria, quitarla de su camino y hacerse del puesto por el que el tanto ha trabajado. Una guerra en la que todas las estrategias serán utilizadas y en la que el más astuto será el vencedor. Una batalla en la que se verán comprometidos dos corazones sin que lleguen a darse cuenta que hay una brecha muy estrecha entre el odio y el amor. ¿Podrá sortear Victoria las trampas que él tiene preparadas para ella? ¿Logrará Ethan resistirse a los encantos y a la irresistible sensualidad de su nueva jefa? ¿A su inocente dulzura y a los confusos sentimientos que despertará en él? Identificador 2301273276160 Fecha de registro Enero-2023 © Todos los Derechos Reservados
Nicole Matthews se casó profundamente enamorada de un hombre que no la querÃa en un matrimonio arreglado, manteniendo la esperanza de que algún dÃa él se terminarÃa enamorando de ella. Sin embargo, eso nunca pasó, él solo la despreció, tratándola de gorda y manipuladora. Luego de dos años de un matrimonio seco y distante, Walter Gibson, el esposo de Nicole, le pidió el divorcio de la manera más degradante. Sintiéndose humillada, Nicole acepta el plan de su amiga, Brenda, quien le sugiere darle una lección a su futuro exesposo, usando a otro hombre para demostrarle a Walter que la mujer que despreció y trató de gorda, podÃa ser deseada por otro. Solo debÃan contratar a un gigoló. * Patrick Collins, ha sufrido una decepción amorosa tras otra, todas las mujeres que han mantenido una relación con él, solo han demostrado interés por su dinero, pues Patrick es uno de los herederos de la familia más rica y poderosa del paÃs. Él solo desea enamorarse de verdad de una mujer que lo quiera por quien es y no por su apellido. Y una noche, en un bar, una mujer hermosa, curvilÃnea y desconocida se acerca a Patrick y le habla, confundiéndolo con un gigoló, esa mujer le hace una propuesta a Patrick fuera de lo común, que le parece muy interesante y no puede rechazar.
La vida era un lecho de rosas para Debra, la hija del Alfa, hasta que tuvo una aventura de una noche con Caleb. Estaba segura de que él era su pareja designada por la Diosa de la Luna. Pero este hombre odioso se negó a aceptarla. Pasaron semanas antes de que Debra descubriera que estaba embarazada. Su embarazo fue una vergüenza para ella y para todos los que amaba. No sólo ella fue expulsada, sino que su padre también fue perseguido por los usurpadores. Afortunadamente, sobrevivió con la ayuda de la misteriosa Manada Espina. Pasaron cinco años y Debra no supo nada de Caleb. Un dÃa sus caminos se volvieron a cruzar. Ambos estaban en la misma misión: llevar a cabo investigaciones secretas en el peligroso pueblo de Roz por la seguridad y la posteridad de sus respectivas manadas. Caleb todavÃa se mostraba frÃo con ella. Pero con el paso del tiempo, se enamoró perdidamente de ella. Intentó compensar el abandono de Debra, pero la chica ya no lo querÃa. Estaba empeñada en ocultarle que tenÃan una hija y también en hacer una ruptura limpia. ¿Qué les deparaba el futuro a los dos mientras viajaban por el pueblo de Roz? ¿Qué tipo de secretos encontrarÃan? ¿Caleb se ganarÃa el corazón de Debra y conocerÃa a su adorable hija? ¡Descúbralo!
Loraine era una esposa devota desde que se casó hace tres años. Sin embargo, a su esposo Marco no le importaba nada ella. Nada de lo que ella habÃa hecho ablandó su corazón. Por fin, Loraine se cansó de todo esto. Ella le pidió el divorcio y lo dejó sin pensar. Los demás la miraron como si estuviera loca. "¿Has perdido la cabeza? ¿Por qué estás tan ansiosa por divorciarte?". "Es porque tengo que irme a casa para obtener una fortuna de mil millones de dólares. Además, él ya no me gusta", respondió Loraine con una sonrisa. Todos se rieron de ella; algunos pensaron que el divorcio la habÃa afectado mentalmente. No fue hasta el dÃa siguiente que se dieron cuenta de que no estaba mintiendo, porque una mujer fue declarada repentinamente la multimillonaria más joven del mundo, ¡y era Loraine! Marco se sorprendió mucho con esas peripecias. Cuando volvió a encontrarse con su exesposa, ella ya era una persona diferente. Un grupo de jóvenes guapos la rodearon y ella les sonrió a todos. Esta escena lastimó el corazón de Marco. Dejando a un lado su orgullo, trató de recuperarla. "Hola, mi amor. Veo que eres multimillonaria ahora. No deberÃas estar con idiotas que solo quieren tu dinero. ¿Tal vez podamos volver a estar juntos? También soy rico. Juntos, podemos construir un imperio fuerte. ¿Qué dices?". Loraine entrecerró los ojos hacia su exmarido, y sus labios se curvaron con disgusto.
Se suponÃa que mi matrimonio con Mathias me harÃa la mujer más feliz del mundo. Aunque sabÃa que él no me amaba, pensé que se enamorarÃa de mà una vez que lo colmara de amor. Ya pasaron cinco años y Mathias me trataba como a una cualquiera. Para colmo, conoció a su verdadero amor y cortó todos los lazos conmigo por culpa de ella. Él la presentó a todo el mundo; algo que nunca hizo por mÃ. Su infidelidad me llevó a la depresión. Me sentÃa totalmente destrozada. Tristemente, incluso en mi lecho de muerte, mi supuesto marido nunca apareció. Cuando volvà a abrir los ojos, sabÃa que el destino me habÃa dado una segunda oportunidad. Yo todavÃa era la esposa de Mathias y pasamos dos meses antes de que conociera a su verdadero amor. En esta vida, me negué a que él volviera a lastimarme. Consciente del gran error de mi antigua yo, le pedà el divorcio. Mathias rompió los papeles del divorcio una y otra vez y al mismo tiempo me encerró. "¡Rylie, deja de hacer estupideces! ¡Hacerte la difÃcil no me funciona!". Para demostrarle que hablaba muy en serio, seguà adelante y solicité a la justicia. Finalmente entró en pánico. Abandonó a la "mujer de sus sueños" y se arrastró a mi lado. "Por favor, dame una segunda oportunidad, Rylie. Te prometo amarte con todo mi corazón. Serás la única mujer en mi corazón de ahora en adelante. No me dejes, ¿de acuerdo?". Una guerra estalló en mi mente. Por un lado, no querÃa que me hicieran daño otra vez. Pero, por otro lado, no querÃa dejar ir al hombre que amaba tanto. ¡¿Qué debo hacer?!
Sara en su fiesta de titulación descubre a su novio con una chica en su propia habitación. Su familia en lugar de apoyarla, reiteran su apoyo hacia él. Con la decepción sale esa misma tarde de su ciudad, para buscar empleo, deseando olvidar lo que vió. Tiene un encuentro el cual le deja un recuerdo que tendrá para siempre, por lo que decide hacerse responsable sola ya que ni siquiera sabe quién es el sujeto con quien estuvo, más que por su rostro y una marca de nacimiento que pudo ver esa noche. Dos años después, trabajando como fisioterapeuta de un hombre de la tercera edad, se entera que el nieto de este es el mismo con quién tuvo un encuentro fugaz, es su jefe. Aunque es el menor de sus problemas, pues también se da cuenta que es el jefe de un clan criminal. Temiendo por su vida decide escapar de esa casa antes que vean a su hijo cómo lo que es realmente. Lo peor es cuando Leonardo el mismo dÃa que se casará la descubre con un bebé que tiene la misma marca que él y toda su familia. ¿Como podrá detener a tiempo la huida de la mujer que lo dejó abandonado años atrás? ¿Podrá Sara evitar que su hijo sea reconocido como el heredero del jefe del clan que amenaza su paz y su bienestar? Pero aún ¿Evitarán sentir cosas que no deben por el otro?
"Tú no perteneces aquÃ. Lárgate". Hanna, la hija legÃtima de Wheeler, regresó sólo para ser expulsada por su familia. Su prometido la engañaba con la hija impostora, sus hermanos la despreciaban y su padre la ignoraba. Entonces, se cruzó con Chris, el formidable lÃder de la familia Willis y tÃo de su prometido. "Hagamos como si nunca hubiera pasado", dijo ella. Sin embargo, a pesar de la esperanza de Hanna de separarse, Chris insistió en que fuera responsable. Él amenazó con revelar los verdaderos talentos de Hanna como doctora sobresaliente, guionista brillante y cerebro de un famoso estudio de diseño, obligándola a casarse. Una vez le pidieron a Chris que protegiera a alguien. El destino los reunió en circunstancias delicadas. Él habÃa planeado mantener su promesa y proporcionar un refugio seguro, sólo para descubrir que Hanna estaba lejos de ser la delicada mujer que parecÃa. Era ingeniosa y astuta...