Durante su matrimonio de dos años, Brian ignoró a su esposa, Rosalynn, por completo; la consideraba una mujer fea. Él la evitó como si fuera la peste. Para colmo, su nombre adornaba las portadas de los tabloides numerosas veces por salir con diferentes mujeres. Harta de ese matrimonio que nunca había funcionado, Rosalynn pidió el divorcio y se fue con determinación. Sin embargo, todo cambió en solo unos días. Brian se interesó en una estilista que trabajaba para su compañía de forma anónima. Con un simple vistazo sabía que Cupido le había tirado la flecha y había acertado: no podía resistirse al encanto irresistible de la muchacha. Hizo todo lo posible para descubrir su verdadera identidad. Poco sabía que recibiría el mayor shock de su vida. Brian se arrepintió mucho al recordar el trato que le había dado a su exesposa.
En una tranquila noche de verano en Wragos, Rosalynn Fuller se encontraba sentada en el sofá de su hogar echándole un vistazo a las noticias en su teléfono.
"Brian Hughes, el CEO del Grupo Hughes, asistió a un evento social con la famosa actriz Eleanor Hilton. Más tarde se retiraron a un hotel y se dice que pasaron la noche juntos. A continuación, les mostramos imágenes exclusivas de la pareja...".
Ese artículo en particular estaba en tendencia, por lo que rápidamente se había extendido por todos los rincones de internet.
Allí, Rosalynn se ajustó sus lentes y chequeó con atención las fotos publicadas.
Si bien las imágenes se veían un poco borrosas, se podía distinguir las siluetas de un hombre y una mujer besándose junto a una ventana.
El sujeto era Brian Hughes, su esposo, el heredero de una de las familias más ricas e influyentes de la ciudad.
Brian era un tipo muy poderoso que tenía el control sobre las actividades económicas de toda la ciudad, y por ridículo que sonara para la mayoría de la gente, nunca había puesto un pie en su casa desde que se casaron dos años atrás.
De hecho, ni siquiera se había presentado cuando se registró su matrimonio.
En cambio, envió a su abogado para que completara el proceso por él.
Por supuesto, Rosalynn desde el principio sabía que Brian estaba en contra de su unión, y que la única razón por la que había cedido era por su abuela, Debora Hughes.
Resultó que, por cosas de la vida, el abuelo de Rosalynn había salvado una vez a Debora, de modo que cuando ella expresó su deseo de devolverle el favor, él le pidió casar a sus nietos con la intención de darle una vida cómoda y sin preocupaciones a la propia Rosalynn.
Al inicio la chica había albergado la esperanza de que su matrimonio fuera armonioso.
No obstante, durante los últimos dos años, había visto a Brian salir de forma constante con varias actrices, acto que era más que suficiente para decepcionarla y hacer añicos sus ingenuas ilusiones.
Tras terminar de leer el artículo, la joven llamó por primera vez a Brian desde que estaban casados.
"Hola, soy Rosalynn".
"¿Rosalynn? ¿Cuál Rosalynn?", preguntó él con su profunda voz. A pesar de que su tono era inequívocamente frío, escucharlo era una experiencia bastante agradable.
Claro, el contenido de sus palabras era otro asunto... Esbozando una sonrisa irónica, Rosalynn apretó los dedos con fuerza alrededor de su teléfono.
¡Brian ni siquiera recordaba el nombre de su esposa!
"Tu esposa, al menos en papel".
"Ahh... ¿Qué quieres?", escupió el chico con indiferencia.
"Quiero el divorcio", respondió ella con determinación.
Después de unos segundos de silencio, él consultó: "¿Esa es tu decisión?".
"Sí".
"Bien, ¿cuánto quieres como compensación? Te daré la cantidad que desees".
"No hay necesidad de eso, no me importa tu dinero, así como tampoco me importa compartirte con otras mujeres. Ya he preparado y firmado el acuerdo de divorcio, me voy sin nada", soltó Rosalynn sin detenerse a respirar, e inmediatamente colgó la llamada.
Ciertamente, estaban unidos por la ley, pero eran como extraños, así que con una simple firma ya no tendrían nada que ver el uno con el otro.
Con eso en mente, la bella Rosalynn subió las escaleras para empacar sus pertenencias en una sola maleta, dejó el acuerdo de divorcio sobre la mesa, y salió de la villa sin mirar atrás.
Mientras tanto, en la oficina del director ejecutivo del Grupo Hughes, Brian se recostó en su silla mirando el teléfono con desdén.
Por fin, su supuesta esposa no pudo soportar más su ausencia y ella misma le propuso el divorcio.
En ese momento, alguien llamó a la puerta, y su asistente, Edwin Byrd, entró.
"Señor Hughes, es casi la hora de su cita con el señor Foster".
Asintiendo, Brian se puso de pie, agarrando la chaqueta de su traje que estaba en el respaldo de la silla.
"Edwin, deshazte de todos los artículos que encuentres relacionados conmigo en internet, y pídele a mi abogado que vaya a buscar el documento de divorcio que mi esposa dejó en la villa".
Edwin se entusiasmó al escuchar esas órdenes, pues él sabía mejor que nadie que su jefe realmente no había salido con ninguna mujer en todo ese tiempo. De hecho, los escándalos que lo involucraban habían sido inventados para desacreditarlo y obligar a su esposa a pedirle el divorcio, y parecía que había logrado su objetivo.
Por su parte, Rosalynn tomó un taxi hasta el apartamento que se había comprado.
El lugar estaba ubicado en un punto privilegiado del centro de la ciudad; este tenía tres dormitorios, una amplia sala, y además estaba amueblado y contaba con el sistema de seguridad más avanzado.
Al llegar, la chica guardó su maleta y se acercó al ventanal para observar las brillantes luces de la ciudad. Acto seguido, llamó a su mejor amiga.
"Karina, me he divorciado".
"¿Qué? ¿En serio? ¡Vaya, querida, esas son buenas noticias! ¡Felicidades por tu soltería! ¡Deberíamos salir a celebrar tu libertad!".
"Claro, ¿por qué no?", respondió Rosalynn.
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
La felicidad era como un espejismo para Rocío Ouyang, cuando más se acercaba a la felicidad, más se alejaba. Ella acababa de casarse con Edward Mu, pero en su noche de boda todo se derrumbó. Dejando a Rocío embarazada, Edward la abandonó en su noche de boda. Pasados unos años, Rocío renació por completo, cambiando totalmente su personalidad, convertiéndose en la única coronel del ejército. En este momento Rocío comenzó a reflexionar varias preguntas que eran misterios para ella: ¿Por qué los padres de Edward estaban actuando de manera tan extraña? ¿Por qué su padre la odiaba? ¿Y quién estaba tratando de dañar su reputación en el ejército que ella había trabajado tan duro para construir? ¿Y por qué sigues leyendo la sinopsis? ¿Por qué no abres el libro y descúbrelo tú mismo?
El matrimonio no fue más que en beneficio de las dos familias. Podía elegir a cualquiera para que fuera su esposa, pero en el momento en que la vio, supo que ella era la que quería. Sin embargo, su matrimonio no duró mucho debido a su indiferencia. Hasta el momento en que firmó el acuerdo de divorcio, finalmente fue testigo de sus verdaderas intenciones. Resultó que ella también se aprovechó de él. Su divorcio no fue el final sino el comienzo del verdadero juego del amor.
El día de su aniversario de boda, la amante de Joshua drogó a Alicia, que acabó en la cama de un desconocido. En una noche, Alicia perdió su inocencia, mientras la amante de Joshua llevaba a su hijo en el vientre. Desconsolada y humillada, Alicia pidió el divorcio, pero Joshua lo consideró una rabieta más. Cuando finalmente se separaron, ella se convirtió en una artista de renombre, admirada por todos. Consumido por el remordimiento, Joshua se acercó a su puerta con la esperanza de reconciliarse, solo para encontrarla en brazos de un poderoso magnate. "Saluda a tu cuñada", dijo este.
Se suponía que era un matrimonio de conveniencia, pero Carrie cometió el error de enamorarse de Kristopher. Cuando llegó el momento en que más lo necesitaba, su marido estaba en compañía de otra mujer. Carrie ya estaba harta. Decidió divorciarse de Kristopher y seguir adelante con su vida. Sin embargo, solo cuando ella se marchó, Kristopher se dio cuenta de lo importante que era ella para él. Ante los innumerables admiradores de su exesposa, Kristopher le ofreció 20 millones de dólares y le propuso de nuevo: "Casémonos de nuevo".
Clara Goodman, es la primogénita de la familia Goodman, una familia de empresarios de Nueva Zelanda, su madre murió cuando ella tenía seis años, y su padre volvió a casarse poco después con una mujer que la odiaba, más aún cuando nació su hija, y hermana de Clara, Karen, a la que su madrastra consideraba la verdadera heredera de la fortuna Goodman. Justo por eso hace que la vida de Clara durante su infancia un auténtico infierno. Los años más felices de la heredera, fueron cuando fue enviada por su padre, que desconocía lo que verdaderamente pasaba en su casa, a los Estados Unidos, exactamente a Washington, para estudiar en la Universidad, cumpliendo así la promesa que le hizo a la madre de Clara. Una noche que una compañera de la universidad le hicieron una jugada, tras emborracharla, Clara acabó pasando la noche con un desconocido, que resulto ser el multimillonario turco más poderoso de Asía, Azize Osman, Dueño del grupo Osman. A la mañana siguiente, Clara huyó, avergonzada sin dejar rastro de quién era ella, por el contario Azize pensó, en un principio, que ella era mujer de la noche, hasta que descubrió unas manchas rojas entre las sábanas, y supo que él había sido su primer hombre, y eso él nunca lo olvidaría. Pero lo peor estaba por llegar, cuando dos meses después Clara descubrió que estaba embarazada. Ella quiso pedir ayuda a su padre, pero eso nunca llegó, gracias a la manipulación de su madrastra, que le ofreció una cantidad de dinero enorme para que pudiera vivir, a cambio de que ella rechazara su herencia, todo lo que Clara conocía acabó, fue así como Clara se encontró embarazada, y expulsada de su familia. Pero todo cambio siete años después, cuando el inteligente hijo de Clara, Mack Goodman, quiso saber quién era su padre biológico, y gracias a su excepcional inteligencia, y a sus habilidades informáticas de genio, sin que su trabajadora y famosa arquitecta madre lo supiera, no sólo descubrió quien era, sino que, además, ideo un plan para que ambos estuvieran juntos para siempre. ¿Saldrá el plan como quiere este pequeño genio? ¿Es ya demasiado tarde? ¿Podrá Clara vengarse de quiénes le hicieron tanto daño? Muchas preguntas por responder, en mi próxima novela.