Él un hombre de negocios, empoderado, y mujeriego, con uno de los peores defectos, la prepotencia. Una noche decide ir a un club nocturno, a celebrar el cierre de un negocio importante, es ahi donde conoce a vanesa, una chica linda, la sensación del momento, todos los hombres deseaban tenerla , cosa que empeoró su deseo. Vanesa una mujer trabajadora, estudiada y con muchos problemas financieros, esta a punto de quedarse sin techo, cuando una compañera de piso le propone un trabajo un poco indecente, pero ante su necesidad, no le quedas más de otra que aceptar la propuesta. Una noche, igual como todas ella recibe la proposición más con indecorosa de toda su vida, jamás olvidaría los acontecimientos de esa noche, ese hombre había marcado su vida. Pasaron los meses, se establece y decide abandonar ese trabajo en el club nocturno, la vida le ofrece la oportunidad de conocer el empleo decente y de sus sueño, pero ¿que pasará con Vanessa, cuando se entere que su nuevo jefe, es el hombre de aquella noche.?
Estaba sentada en la terraza de mi edificio, tenía un cigarro en la mano y en la otra una botella. Mi vida era un jodido infierno, no encontraba la manera de salir de esta maldita miseria. Debía cinco meses de renta y ya no tenía nada para comer. Me botaron del trabajo porque no quise acostarme con el jefe. Por muy necesitada que esté, jamás me acostaría con un hombre casado y viejo. Me gustaban las cosas buenas. Si me iba a comer un trozo de carne, que fuera de primera calidad.
Estaba viendo el cielo cuando mi vecina, Tiffany, se sentó a mi lado.
-La vida te está dando duro, Vanesa. ¿O son ideas mías? -me dice mientras me mira.
-La vida me está dando durísimo, Tiffany. He quedado sin empleo, debo muchos meses de alquiler, van a correrme, no tengo qué comer, no tengo nada, estoy demasiado deprimida -digo llorando.
-¿Por qué no vienes a trabajar a mi local? Es un poco indecente y chulesco, pero necesitan una bailarina. Luego podrías subir de cargo y llegar a ser la administradora del lugar -dice mirándome mientras le da un jalón a su cigarro.
-No sé, es solo que nunca he intentado trabajar de bailarina o prostituta, no sé realmente. La vida es una mierda.
-Si quieres o necesitas, avísame y te ayudo. Debo irme.
La veo salir de la azotea y me quedo aquí sentada viendo la Luna. Había perdido a mis padres en la frontera entre México y Estados Unidos. Me había tocado luchar sola. Mi hermano se perdió en el desierto. Esa era la película que mi mente tenía grabada siempre. Quería trabajar, ganar suficiente dinero y poder recuperarlo, pero al parecer la vida me tenía otros planes. Nunca he podido estar económicamente estable, ni tampoco he sido feliz. Llevo tres cruces en mi hombro y en mi alma, nadie podría con eso.
Camino directo a mi pequeño apartamento en el último piso. Demás está decir que esto era una verdadera pocilga, pero no tenía suficiente dinero para arrendar otra cosa, así que tuve que morir aquí. Ahora el problema está en que no tengo empleo, así que tampoco podré pagarlo. Abro la puerta haciendo magia con la vieja manilla. El dueño se negaba a arreglarla, es un tacaño extremo. Deberían invitarlo a uno de esos programas donde las personas tienen esa enfermedad impulsiva.
Después de luchar con la puerta, logro abrirla. En el interior del lugar no había nada, ni muebles, ni mesa. Ni siquiera había bombillos. Vivía sumida en la oscuridad. Me bastaba con la luz de la luna. No es que quisiera vivir así, es lo que me había tocado.
Cuando estoy a punto de acostarme en aquel viejo colchón, alguien toca la puerta. Camino con toda la paciencia del mundo. La persona que tocaba estaba impaciente. Al abrir, me encuentro con la cara furiosa de Tomás, el dueño de este cochinero.
-Señor Tomás -digo fingiendo respeto.
-Ningún señor. Quiero que te vayas de mi departamento. Debes muchos meses de renta. O pagas o te vas.
-Señor, no tengo dinero. Por favor, solo déjeme quedar esta noche. Le prometo que mañana le pagaré.
Suspira: -Si no pagas antes de las cuatro de la tarde, estás fuera. Estás advertida.
Vuelvo a adentrarme a la pequeña habitación. A pesar de ser un nido de ratas, trataba de mantenerlo limpio. Me gustaba la limpieza, y aunque fuera difícil de creer, me gustaba andar limpia. Pero casi ni tenía ropa, así que hacía magia con lo poco que tenía. Intento dormir, pero la angustia me quema. ¿Qué se supone que debía hacer? De repente, las palabras de Tiffany llegan a mi mente. No quedaba de otra, debía aceptar su oferta.
Me pongo los zapatos y salgo corriendo hacia la puerta de Tiffany. Justamente va saliendo, así que la llamo.
-Tiffany.
-Dime, nena.
-Acepto.
-¿Qué cosa?
-Acepto trabajar en tu bar -digo no muy convencida, pero no hay otra opción.
-¡Oh! Qué bueno, entonces vamos de una vez -contesta mientras cierra su puerta. Este lugar se parecía mucho a su personalidad. No era una mujer fea, pero estaba acabada. Vestía vestidos de lentejuelas y tacones altos. A mi parecer, se maquillaba demasiado. Todos sabíamos a lo que se dedicaba, pero nadie la ofendía ni la juzgaba. Al final, este era el peor barrio del país, y cuidado si no del mundo
Mary es una joven estudiante de medicina, brillante pero humilde, cuya vida ha estado marcada por el esfuerzo y la determinación. Una noche, mientras realiza sus pasantías en el hospital, conoce a un hombre misterioso que deja una profunda impresión en ella. Él acompaña a una joven maltratada, pero lo que más la intriga es el silencio colectivo que rodea el caso. Nadie habla del tema, y él desaparece tan rápido como llegó, dejándola con más preguntas que respuestas. Días después, Mary recibe una inesperada invitación para formar parte del equipo médico de una prestigiosa empresa privada dirigida por el CEO más poderoso del país. La propuesta resulta desconcertante, ya que aún es solo una pasante. Cuando llega a la entrevista, la sorpresa es aún mayor: el hombre que la espera en la oficina no es otro que el extraño del hospital. Con una mirada fría y una propuesta tan impactante como inusual, él le ofrece un trato: convertirse en su "juguete" por un tiempo a cambio de abrirle las puertas a un mundo de lujos y oportunidades ilimitadas. Dividida entre el deseo de cumplir sus sueños y preservar su integridad, Mary deberá decidir si aceptar el oscuro y tentador acuerdo de un hombre cuya influencia parece no tener límites. Pero, ¿quién es realmente este poderoso desconocido? ¿Y por qué ella, una chica común, ha captado su atención?
Maximiliano, un exitoso empresario en el mundo textilero, es dueño de un imperio que ha construido con esfuerzo y dedicación. Su vida cambia drásticamente cuando descubre que su hermano menor, Simón, ha muerto en extrañas circunstancias, aparentemente por culpa de una mujer. Determinado a descubrir la verdad y buscar justicia, Maximiliano se sumerge en un oscuro mundo de venganza. En el centro del misterio están Valentina y Valeria, dos hermanas hijas de un influyente heredero de la industria textil. Valentina es dulce, amable y elegante, la perfecta imagen de la hija ideal. En contraste, Valeria es fiestera, inmadura y conocida por sus comportamientos impulsivos. Mientras Maximiliano desentraña las pistas, la línea entre la culpa y la inocencia se difumina. ¿Quién de ellas será la responsable de la tragedia que ha destrozado su familia? A medida que las verdades ocultas salen a la luz, Maximiliano descubrirá que en el mundo del poder y las apariencias, nada es lo que parece ¿Acaso se habrá equivocado? ¿Sera que se caso con la mujer equivocada
Andy Trevoll, una joven huérfana, ha conocido más tragedias de las que debería soportar una adolescente. Tras la muerte de sus padres, se ve obligada a huir con su hermana menor, esquivando a las autoridades que podrían separarlas. Pero la suerte, disfrazada de oportunidad, llama a su puerta cuando consigue un trabajo en las prestigiosas Empresas Craffor. La vida parece ofrecerle un respiro hasta que el señor Craffor, el presidente de la empresa, fallece repentinamente. Su hijo, Adrian Craffor, asume el mando, revelándose como un déspota manipulador, decidido a hacerle la vida imposible a Andy, a quien desprecia por considerarla insignificante y poco atractiva. Sin embargo, lo que Adrian desconoce es que su difunto padre dejó una última sorpresa en su testamento, un secreto que podría cambiarlo todo y darle a Andy una inesperada ventaja. En un entorno hostil y lleno de intrigas, Andy deberá desentrañar el misterio del legado oculto del señor Craffor para proteger a su hermana y reivindicar su lugar en un mundo que parece dispuesto a hundirla.
Julianny era una mujer próspera, amorosa, exitosa y entregada a su familia. Vivía con sus padres y era ese prototipo de chica que, con su sola presencia, iluminaba el momento. Nadie nunca la había visto llorar, siempre con la mejor sonrisa. Estaba cursando el último año de la universidad cuando conoció al chico de sus sueños. Edder era un chico carismático, adinerado y extrovertido. Estaba cursando el último año de administración de empresas. En una de sus locas salidas nocturnas, conoció a Julianny y quedó perdidamente enamorado, flechado a primera vista. Y aunque suene cliché, Cupido hizo bien su trabajo con esa flecha, porque los dos habían conectado de igual manera. Después de conocerse por un tiempo, descubrieron que eran la pareja perfecta. Los años pasaron y vivieron un amor loco y desenfrenado, desencadenando todo tipo de sentimientos, tanto para ellos como para el resto del mundo. Pero como todo lo que brilla no es oro y los seres humanos no son perfectos, ¿qué pasaría si descubres que tu príncipe azul está pintado de negro? ¿Podrá Julianny superar todas las pruebas que le ponga el destino para poder estar al lado de Edder?
Laila, una joven de 21 años, se ve obligada a casarse bajo un matrimonio arreglado con Miguel Toro, el hombre más rico de la ciudad. Miguel necesita una esposa para finiquitar unos negocios y ve en Laila la candidata perfecta para ello. Laila, por su parte, siempre ha estado enamorada de su mejor amigo, pero el compromiso con Miguel le obliga a confrontar sus verdaderos sentimientos. A medida que avanza la historia, Laila se ve envuelta en un torbellino de emociones y confusiones. ¿Podrá descubrir la verdadera naturaleza de sus sentimientos antes de que sea demasiado tarde? ¿Podrá aceptar su destino y casarse con Miguel, a pesar de sus dudas y temores? Con giros inesperados y dilemas emocionales, esta historia nos sumerge en un mundo de amor, amistad y sacrificio, donde Laila deberá tomar una decisión que cambiará el rumbo de su vida para siempre.
Monzerrat es una joven sin hogar, cuya vida ha sido marcada por la tragedia. Después de perder a su madre en un trágico accidente aéreo, se ve obligada a vivir en las calles, enfrentando la crueldad del mundo. Para empeorar la situación, es expulsada de la casa de su padrastro por la madre de este, dejándola sin hogar ni refugio. Desamparada y sin opciones, Monzerrat se enfrenta a la dura realidad de la vida en las calles. Es en este difícil momento cuando conoce a un hombre atractivo y carismático, que resulta ser un líder de la mafia. Conmovido por la historia y la vulnerabilidad de Monzerrat, decide ayudarla y le enseña todo lo que necesita saber para sobrevivir en este mundo peligroso. A medida que Monzerrat aprende de su mentor, también se enamora de él. Juntos, forman una extraña pero poderosa conexión, enfrentando juntos los desafíos y peligros de la vida en la mafia. Pero la vida insiste en destrozar los sueños de Monzerrat una vez más, cuando su gran amor es arrebatado de su lado. Devastada y llena de ira, Monzerrat decide que ya no puede ser una víctima y que es hora de tomar las riendas de su propia vida. Decidida a vengarse y hacer justicia, Monzerrat se convierte en la reina de la mafia, tomando el control y enfrentando a quienes le han hecho daño.
Para Alejandro, un Ceo poderoso, millonario, atractivo, mujeriego y caprichoso, fue una sorpresa que su nueva secretaria se negase a acostarse con él, cuando todas caían a sus pies. Tal vez por eso ninguna le duraba más de dos semanas, es que se cansaba rápidamente de ellas, sin embargo, Valeria se negó, provocando que él la persiguiera pensando distintas estrategias para lograr su cometido, eso sin dejar de lado su diversión con las demás mujeres. Sin darse cuenta, Valeria se convirtió en su mano derecha y él la necesitaba hasta para respirar, no obstante no reconoció su amor hasta que ella llegó a su límite y partió.
Sabrina tardó tres años enteros en darse cuenta de que su marido, Tyrone, era el hombre más despiadado e indiferente que jamás había conocido. Él nunca le sonrió y mucho menos la trató como a su esposa. Para empeorar las cosas, el regreso del primer amor del hombre no le trajo a Sabrina nada más que los papeles del divorcio. Con la esperanza de que todavía hubiera una posibilidad de salvar su matrimonio, le preguntó: "Tyrone, aún te divorciarías de mí si te dijera que estoy embarazada?". "¡Sí!", él respondió. Al comprender que ella no significaba nada para él, Sabrina finalmente se rindió. Firmó el acuerdo de divorcio mientras yacía en su lecho de enferma con el corazón hecho pedazos. Sorprendentemente, ese no fue el final para la pareja. Fue como si Tyrone despejara la mente después de firmar el acuerdo de divorcio. El hombre que alguna vez fue tan desalmado se arrastró junto a su cama y le suplicó: "Sabrina, cometí un gran error. Por favor, no te divorcies de mí. Te prometo que voy a cambiar". Sabrina sonrió débilmente, sin saber qué hacer…
Como simple asistenta, enviar un mensaje al CEO en plena noche para solicitar películas pornográficas fue un movimiento audaz. Como era de esperar, Bethany no recibió ninguna película. Sin embargo, el CEO le respondió que, aunque no tenía películas para compartir, podía ofrecerle una demostración en directo. Tras una noche llena de pasión, Bethany estaba segura de que perdería su trabajo. Pero en lugar de eso, su jefe le propuso: "Cásate conmigo. Por favor, considéralo". "Sr. Bates, está bromeando, ¿verdad?".
Traicionada por su pareja y su hermanastra en la víspera de su boda, Makenna fue entregada a los despiadados príncipes licántropos como amante, pero su propio padre ignoró su difícil situación. Decidida, ella intentó escapar y buscar venganza, pero, sin darse cuenta, captó el interés de los tres príncipes licántropos, que la deseaban en exclusiva entre muchas admiradoras. Esto complicó sus planes, atrapándola y convirtiéndola en rival de la futura reina licántropa. Enredada en deseo y celos, ¿podría Makenna lograr su venganza en el intrincado baile con los tres príncipes?
Durante dos años, Bryan solo vio a Eileen como asistente. Ella necesitaba dinero para el tratamiento de su madre, y él pensó que ella nunca se iría por eso. A él le pareció justo ofrecerle ayuda económica a cambio de sexo. Sin embargo, Bryan no esperaba enamorarse de ella. Eileen se enfrentó a él: "¿Amas a otra persona y siempre te acuestas conmigo? Eres despreciable". En cuanto ella firmó los papeles del divorcio, él se dio cuenta de que era la misteriosa esposa con la que se había casado seis años atrás. Decidido a recuperarla, Bryan la colmó de afecto. Cuando otros se burlaban de sus orígenes, él le dio toda su riqueza, feliz de ser el marido que la apoyaba. Eileen, que ahora era una célebre CEO, lo tenía todo, pero Bryan se encontró perdido en otro torbellino...
Rena se acostó con Waylen una noche cuando estaba borracha. Y como ella necesitaba su ayuda mientras él se sentía atraído por su belleza juvenil, lo que se suponía que sería una aventura de una noche se convirtió en algo más. Todo iba bien hasta que Rena descubrió que el corazón de Waylen pertenecía a otra mujer. Cuando esa mujer regresó, dejó de volver a casa, dejándola sola por muchas noches. Finalmente, un día, la pobre chica recibió un cheque y unas palabras de despedida. Para sorpresa de Waylen, Rena solo sonrió y dijo: "Fue divertido mientras estuvimos juntos, Waylen. Pero espero que no nos volvamos a ver nunca más. Que tengas una buena vida". Sin embargo, por voluntad del destino, los dos se volvieron a encontrar. Al ver que Rena tenía a otro hombre a su lado, los ojos de Waylen ardieron de celos y gritó: "¿Cómo diablos lograste seguir adelante? ¡Pensé que solo me amabas a mí!". "¡Es pasado!", Rena se burló, "hay demasiados hombres en este mundo, Waylen. Además, tú fuiste quien pidió la ruptura. Ahora, si quieres salir conmigo, tendrás que hacer cola". Al día siguiente, Rena recibió un anillo de diamantes y un mensaje del banco de que alguien había transferido miles de millones a su cuenta. Waylen apareció, se arrodilló frente a ella y dijo: "¿Puedo saltarme la fila, Rena? Todavía te quiero".