El prisionero del cielo nos relata la historia de Carlos Marín. Un joven que está enamorado incondicionalmente de su amada, o más bien, ex-novia. Y buscará recuperarla escribiendo mil cartas, al menos hasta que pueda salir de la prisión e irla a buscar. El prisionero del cielo le escribe cartas constantemente, pero ella nunca responde. El director de la prisión le ofrecerá liberarlo a cambio de que escriba un libro para el, siendo este el comienzo de los misterios del director y sus planes para Carlos Marín. Su mejor amigo, Martín. Estará muy presente en la historia, siendo el quien note cada detalle que Carlos no puede ver. El director llevará a Carlos por su propio camino, haciéndolo pensar que su novia es la culpable y que tiene que aceptar la última oferta del director. - Está historia esta relatada con algunas cartas de Carlos Marín. Lo que al principio parecerá un duelo de amor entre Carlos y su novia, tendrá un trasfondo más oscuro y fuera del alcance de ambos.
Hoy por la mañana me he despertado pensando en ti, de nuevo. Una vez más soñé que estábamos en la librería de viejo y que tomados de la mano nos adentrabamos al pasillo del drama y el romance. Nos perdimos entre las estanterías que guardaban mil almas, las almas de cada escritor y de cada lector. Entre todas ellas volví a ver la portada de ese misterioso libro que en cada sueño aparece « El laberinto de los espíritus » decía el título, con las letras negras de siempre y con ese brillo único en su lomo.
Por un momento sentí que no estaba soñando y que nuestra búsqueda por el libro perfecto nunca terminaría, que podría volver a sentir tu mano tomando la mía, a la espera de que yo avanzará para que me siguieras.
- Nunca te vuelvas a ir cariño - te susurré sin mirarte.
Asentiste y seguimos en busca del libro perfecto.
Alguna vez tu y yo escribimos uno, y déjame decirte que fue el mejor que he podido leer, el mejor libro de mi mundo, de nuestro mundo. Aquel libro que ambos escribimos una tarde de otoño bajo el árbol, ese árbol donde solíamos pasarnos la vida entera y nos hundiamos en su sombra mágica. No habrá mejor lugar que debajo de ese árbol para pasar mi vida, no habrá mejor sitio para recordarte. Creo que sí un día vuelvo a ir aún podré vernos ahí, sentados y enamorados, sin miedos y sin dudas.
La vida se me está escapando y ya no sé cómo volver a ella, siempre que lo intento me encuentro tu recuerdo a medio camino y no puedo seguir más; siempre que lo intento pierdo de vista el camino e inútilmente busco tu voz para que me guíe de vuelta a el. Me di cuenta de que vives solo en mis sueños, y que hasta en ellos sigues sin responder mis cartas y mis peticiones de verte.
No se si mis cartas te lleguen, si acaso el director no deja que mis cartas salgan de estás cuatro paredes y te busquen. Pienso que si es así y que solo es una mala jugada del director, ¿Si te llegan, verdad?.
La hora de ver un poco de luz aquí, se acabó. Es momento de que deje este pedazo de papel y le ponga mi firma, y que con mucha esperanza lo leas y el siguiente fin de semana en el correo, llegué tu respuesta.
Te amo.
Carlos Marín
Kallie era una muda. Su marido la ignoró durante cinco años desde su boda, no solo esto, ella hasta sufrió un aborto por culpa de su cruel suegra. Tras el divorcio, Kallie se enteró de que su exmarido se había prometido rápidamente con la mujer que realmente amaba. Sujetando su vientre ligeramente redondeado, se dio cuenta de que él nunca se había preocupado realmente por ella. Decidida, ella lo dejó atrás, tratándolo como a un extraño. Sin embargo, tras su marcha, ese hombre recorrió el mundo para buscarla. Cuando sus caminos volvieron a cruzarse, Kallie ya había encontrado una nueva felicidad. Por primera vez, él se humilló ante ella y le suplicó: "Por favor, no me dejes...". Pero la respuesta de Kallie fue firme y despectiva, cortando cualquier vínculo entre ellos: "¡Lárgate!".
Belinda pensó que, tras el divorcio, separarían sus caminos para siempre: él podría vivir su vida como quiera, mientras ella podría dedicarse a disfrutar el resto de la suya. Sin embargo, el destino tenía otros planes. "Cariño mío, estaba equivocado. ¿Podrías volver conmigo?". El hombre arrogante, al que una vez ella amó profundamente, bajó humildemente la cabeza. "Te ruego". Belinda apartó con frialdad el ramo de flores que él le había regalado y respondió fríamente: "Es demasiado tarde".
Nicol es una joven que perdió a su madre al nacer, su padre se vuelve a casar. Su madrastra la odia, tanto la madrastra como su media hermana la maltratan. Nicol crece en una familia donde no resibe amor y cariño. Todo cambia cuando decide transformarse y vengarse de todos los que la han lastimado. Podrá ella descubrir el amor.
Charles tenía novias diferentes cada día del año, nunca salía con la misma chica. Su nombre había sido vinculado a innumerables mujeres. Autumn, por su parte, se vio obligada a casarse con Charles sustituyendo a su hermana, quien se había escapado. Su único deseo era divorciarse después de un año. Ninguno de los dos había esperado que se enamoraran el uno del otro. Tampoco esperaban que el mundo entero los desafiara. Una ex novia quien causa problemas cada dos por tres. Una hermana fugitiva quien regresa con la intención de recuperar a Charles. Una suegra que siempre se entromete en sus momentos íntimos. ¿Te gustaría leer más? ¡No dudes! ¡Vamos allá!
Sabrina tardó tres años enteros en darse cuenta de que su marido, Tyrone, era el hombre más despiadado e indiferente que jamás había conocido. Él nunca le sonrió y mucho menos la trató como a su esposa. Para empeorar las cosas, el regreso del primer amor del hombre no le trajo a Sabrina nada más que los papeles del divorcio. Con la esperanza de que todavía hubiera una posibilidad de salvar su matrimonio, le preguntó: "Tyrone, aún te divorciarías de mí si te dijera que estoy embarazada?". "¡Sí!", él respondió. Al comprender que ella no significaba nada para él, Sabrina finalmente se rindió. Firmó el acuerdo de divorcio mientras yacía en su lecho de enferma con el corazón hecho pedazos. Sorprendentemente, ese no fue el final para la pareja. Fue como si Tyrone despejara la mente después de firmar el acuerdo de divorcio. El hombre que alguna vez fue tan desalmado se arrastró junto a su cama y le suplicó: "Sabrina, cometí un gran error. Por favor, no te divorcies de mí. Te prometo que voy a cambiar". Sabrina sonrió débilmente, sin saber qué hacer…
El amor es ciego. Lucinda renunció a su acomodada vida por un hombre. Se casó con él y se ocupó de todo durante tres largos años. Un día se le cayeron las escamas de los ojos. Se dio cuenta de que todos sus esfuerzos habían sido en vano. Su marido, Nathaniel, siempre la trataba como a una mierda, porque su amor ya pertenecía a otra mujer. Se dijo a sí misma: "¡Ya basta! He terminado de malgastar mi tiempo con un hombre desagradecido". El corazón de Lucinda se rompió en pedazos, pero de todos modos, reunió el valor para pedir el divorcio. La noticia causó un gran revuelo en Internet. ¿Una joven rica que acababa de divorciarse de su marido? ¡La mujer soñada! Innumerables directores ejecutivos y jóvenes apuestos acudieron a ella como abejas a la miel. Nathaniel no aguantó más. Dio una rueda de prensa y suplicó con los ojos llorosos: "Te quiero, Lucinda. No puedo vivir sin ti. Por favor, vuelve a mí". ¿Le dará Lucinda una segunda oportunidad? Siga leyendo para descubrirlo.