Naya era una profesora, 25 años, soltera amante de los gatos que no sentía que encajaba en la sociedad, ella se sentía diferente. Hasta que un día su diferencia hizo que encontrara el amor.
Naya era una joven estudiante de pedagogía de una universidad muy prestigiosa, ella se sentía sumamente inferior a sus demás compañeros y compañeras, pues era de escasos recursos; aspecto que se notaba a la hora de expresarse a través de su lenguaje oral.
Sus profesores la consideraban una estudiante inteligente y responsable.
Ella vivía con su abuela, una mujer de roble y notoria personalidad, ella quería mucho a su amada nieta, pues claro la había criado, prácticamente era como su madre.
Naya:
Hoy debo hacer lo mismo de siempre, levantarme, bañarme y arreglarme para la universidad. Menos mal queda este semestre para poder licenciarme y poder ser más independiente. Pensaba, mientras se levantaba lentamente de su cama para dirigirse al baño a ducharse.
Toma tranquilamente su baño, en lo que piensa en el tiempo que le queda para su graduación y como desea que su abuela esté allí con ella para acompañarle, mientras las gotas de agua caen por su cuerpo y limpian cada mala energía absorbida de cada día y de aquellas pesadillas que la aquejaban todo el tiempo. Pero solo había una cosa que realmente la quejaba más que esas pesadillas, perder a su abuela.
Naya:
Listo ya estoy lo suficientemente lista para irme a la universidad, pero no puedo irme antes de preguntarle a mi leli ( así le llamaba a su abuela) si necesita algo o dejarle comida, necesito mantenerla sana y saludable.
Leli: buenos días pequeña, ya te levantaste.
Naya: si leli, antes de irme quería saber si necesitas algo. ¿Quieres algo de comer?.
Leli: jajaja, mi pequeña, solo necesito una cosa, que te sientes a mi lado y que almorcemos juntas. He preparado tu comida favorita.
Naya: Oh leli , pero yo debo ser quien cuide de ti, no debiste haber cocinado, sabes que yo amo cocinarte.
Leli: lo sé amor, pero hoy quería regalonearte, así como tú lo haces conmigo cada día.
Naya: gracias abuela, no sabes lo feliz que soy a tu lado. ( la mira con sus ojos llenos de lagrimas, pues ella sabe que es la única persona que la ama de verdad).
Naya se sienta a comer con su abuela antes de partir a la universidad. Le lava los trastes, pues cree que su abuelita ya hizo mucho al hacerle el almuerzo. Agradece su rica comida y se despide de ella con beso en su frente. Su abuela la mira y le dice que la quiere mucho, que siempre será su pequeña niña, y que está ansiosa de verla en su graduación.
Todo el mundo esperaba con impaciencia que Rhett se divorciara de Jillian para poder estar con su amor de la infancia. Pero cuando él por fin convocó una rueda de prensa, no fue para anunciar su divorcio, sino para presentar con orgullo al público a su hijo recién nacido. "Ha habido rumores de que mi mujer y yo nos estamos separando. Estoy aquí para aclarar las cosas de una vez por todas. Estamos felices y enamorados, y recientemente hemos sido bendecidos con nuestro angelito".
Mi nombre es Alicia, y solo tres palabras han podido definirme durante toda mi vida: adicta al placer. Sí, soy una jodida ninfómana y no temo a decirlo. He vivido cientos de aventuras y he cumplido todas y cada una de mis fantasías más retorcidas, esas que nadie se atrevería a contar en voz alta. Nadie excepto yo. ¿Te atreves a descubrirlas? Eso sí, te advierto que necesitarás dos cosas: lo primero, una mente muy abierta y, lo segundo, un par de bragas limpias...
El amor es ciego. Lucinda renunció a su acomodada vida por un hombre. Se casó con él y se ocupó de todo durante tres largos años. Un día se le cayeron las escamas de los ojos. Se dio cuenta de que todos sus esfuerzos habían sido en vano. Su marido, Nathaniel, siempre la trataba como a una mierda, porque su amor ya pertenecía a otra mujer. Se dijo a sí misma: "¡Ya basta! He terminado de malgastar mi tiempo con un hombre desagradecido". El corazón de Lucinda se rompió en pedazos, pero de todos modos, reunió el valor para pedir el divorcio. La noticia causó un gran revuelo en Internet. ¿Una joven rica que acababa de divorciarse de su marido? ¡La mujer soñada! Innumerables directores ejecutivos y jóvenes apuestos acudieron a ella como abejas a la miel. Nathaniel no aguantó más. Dio una rueda de prensa y suplicó con los ojos llorosos: "Te quiero, Lucinda. No puedo vivir sin ti. Por favor, vuelve a mí". ¿Le dará Lucinda una segunda oportunidad? Siga leyendo para descubrirlo.
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Santino Rivas, es un exitoso abogado de 35 años que no ha perdido un sólo caso en toda su carrera. Se caracteriza por ser un hombre vanidoso, frívolo, narcisista, y por sobre todo alexitimico, es decir, que es una persona incapaz de sentir cualquier emoción que esté relacionada con el amor, impidiéndole demostrar nada que tenga que ver con ese sentimiento, motivo por el jamás se le ha conocido una pareja y esto lo ha llevado a ser el soltero más codiciado en el mundo de las leyes. Abril Evans, es una joven de 21 años quien al fallecer sus padres y quedarse a cargo de su hermana, que necesita una operación para volver a caminar, se ve obligada a dejar sus estudios y trabajar duro para poder juntar la cantidad de dinero que necesita. Con una personalidad totalmente opuesta a lo que es él, termina siendo completamente seducida y arrastrada a su mundo lujurioso donde deberá arrodillarse a los deseos de un hombre que se cree el amo supremo de su vida y de su cuerpo y quien para obtener de ella lo que desea, le ofrecerá un acuerdo al cual, aunque quisiera, no se podrá negar. Pagar la operación y el tratamiento completo de su hermana. Pero no todo es tan sencillo como parece, porque este contrato tiene tres reglas fundamentales que bajo ningún concepto ella debe infringir. 1 - Discreción: nada de lo que suceda en la intimidad de ambos debe filtrarse. 2 - Exclusividad: no puede estar con ningún otro hombre a no ser que él lo autorice. 3 - Cero Sentimentalismo: tiene prohibido enamorarse. ¿Aceptará Abril arrodillarse a los placeres sexuales, poco comunes, de Santino Rivas a cambio del dinero? y aun así ¿Podrán ser capaces de no quebrantar ninguna de esas clausulas? YA PODES ADQUIRIR TU LIBRO POR LA PÁGINA DE ÁMAZON.
Durante tres arduos años, Emily se esforzó por ser la esposa perfecta de Braiden, pero él todavía se mantenía distante con ella. Cuando él le pidió el divorcio por otra mujer, Emily desapareció. Sin embargo, cuando reapareció más tarde, se convirtió en su última fantasía. Despidiendo a su ex con una sonrisa burlona, ella le desafió: "¿Te interesa una colaboración? ¿Quién te crees que eres?". Los hombres no le servían para nada; Emily prefería la independencia. Mientras Braiden la cortejaba sin descanso, descubrió las identidades secretas de Emily: hacker de alto nivel, chef, médica, talladora de jade, corredora clandestina... Cada descubrimiento aumentaba el desconcierto de Braiden. ¿Por qué los conocimientos de Emily parecían ilimitados? El mensaje de Emily era claro: destacaba en todos los aspectos.