Quentin Valois es el CEO de una empresa transnacional que le ha dado más dinero de lo que podría imaginar sin embargo, su vida cambia cuando en un accidente de auto pierde a su esposa y a sus dos hijos. Cuando despierta del coma y se da cuenta de su situación, decide cerrarse al amor y vivir el resto de su vida sin volver a amar a alguien... o al menos eso pensaba. Registrada en SAFE CREATIVE bajo el código: 2101016477027
"Ya está despertando doctor"
Escucho a lo lejos mientras mis oídos vuelve a adaptarse al sonido. Escucho un "pi, pi, pi" constante y me percato que es mi corazón.
"Mmmm" hago tratando de encontrar las palabras para hablar.
―No se agite señor Valois, sé que es un poco difícil pero ya ha salido y todo estará bien.
Siento como el efecto va pasando y mi cuerpo reacciona poco a poco, el dolor sube por mis piernas, sube a mis brazos y por fin a la cabeza, empieza una jaqueca.
―¿Dónde? ― Trato de decir.
―En el hospital.
«¿En el hospital? » pienso mientras mi corazón comienzan a latir agitado.
―Agua.― Murmuro.
―Tráigale un poco de agua al señor Valois.― Dice el médico a la enfermera y escucho como ella sale―¿Puede abrir los ojos?
Asiento con la cabeza. Lo hago poco a poco pero al sentir el primer destello de luz los cierro de inmediato y las imágenes vienen a mi mente. Mi esposa, mis hijos, la nieve.
―Trate de nuevo.― Me pide el doctor.
Lo intento y poco a poco me acostumbro a la luz hasta ver el techo del cuarto del hospital.
―¿Mi esposa? ¿Dónde está Nadine? ― Pregunto.
―¿Le duele la cabeza? ― Me contesta el doctor.
―Un poco... ¿Dónde está Nadine? ¿Mis hijos? ¿Qué hago aquí?
El rostro del doctor me da las malas noticias antes que la noticia en si, pero aún quiero escuchar qué paso.
―Señor Valois, está en el hospital porque usted y su familia tuvieron un accidente mientras viajaban a la casa de campo.
―¿Qué? ― Pregunto y luego trato de hacer memoria.
De nuevo lo veo, la nieve, la camioneta patinando y después... todo se nubla―¿ Y mi esposa? ¡Dónde está mi esposa! ¡Nadine! ― Gritó y trato de quitarme la intravenosa del brazo.
―¡No! ¡Espere! ¡Espere! Acaba de salir de un coma.
Las palabras del doctor me impactan «¿Coma? ¿Cómo que un coma?» Pienso.
―Señor Valois. ― Vuelve a hablar el doctor.
―¿Cuánto tiempo llevamos en coma? ― Pregunto.
―Un mes... pensamos que no despertaría.
―¿Un mes? ¿En coma? Pero... ¿Ellos también llevan el mismo momento? ― Pregunto.
La enfermera entra con el vaso con agua en sus manos y el doctor aprovecha para ponerse de pie y mover el cuello relajándose. Su movimiento se me hace familiar, yo hago lo mismo cuando debo hacer algo importante o entender a algún discurso o despedir a alguien en mi empresa, así que sé que lo que viene es algo crucial.
―Señor Valois.― Empieza.― Usted y su familia tuvieron un accidente hace un mes. El rescate llegó a tiempo pero...
―¡Pero qué! ― Gritó asustado.
―Pero sólo usted llegó vivo. Su esposa, sus hijos y el chofer...
Entonces me cierro, lo hago por completo. No escucho, no siento, mi corazón se rompe en pedazos y lo único que quiero es morir.
―Su empresa ya se hizo cargo de los funerales, se avisó a la familia y... se le dio la indemnización a la familia de su chofer y bueno, es un milagro que haya despertado, pensamos que no lo haría.
Me quedo en silencio mientras las imágenes de mi esposa y mis hijos pasan frente a mis ojos. No lo puedo creer ¡Está muertos!
―¡No! ― Expreso agitado.― ¡No! ¡No! No puedes ser... ¡no! ¿Qué no hicieron nada para salvarlos? ¿Por qué a mi si?
―Señor Valois, no es que no quisiéramos ellos no llegaron vivos.
―¡Pues hubiera hecho algo para revivirlos! O mejor ¡Me hubiera dejado morir a mi en la nieve!
―Señor Valois... tranquilo.
El "pip, pip, pip" del monitor comienza a sonar más fuerte y de pronto se acercan dos enfermeras más, una trae una jeringa.
―¡Nadine! ― Grito mientras me toman de los brazos y una me inyecta algo que inmediatamente me comienza a relajar.
No puedo creerlo, mi familia murió, mis hijos eran tan pequeños sólo tenía 2 y 4 años y Nadine. Los ojos comienza a cerrarse de nuevo y la imagen de la nieve, el auto y ahora un camión de carga me viene a la mente. Ella quería viajar para ver a sus padres en Navidad, yo la amaba tanto que me arriesgué, los arriesgué y ahora estoy solo, completamente solo.
―Yo los maté.― Murmuró.
―Señor Valois, todo fue un accidente.
―Yo los maté...yo los maté... ― repito constantemente hasta que vuelvo a quedar dormida con el rostro de Nadine frente a mi.― Nadine, no quiero vivir así.
SEGUNDO LIBRO DE ENTRE BIRRAS Y CHELAS Después de haberse conocido en Ibiza, Diego D’Angelo y Valle Sandoval se casaron en Las Vegas en contra de todos los pronósticos de sus familias. Para que Diego pudiese ganarse el favor de la familia de Valle, él llegó a un trato con su padre y debió pasar 6 meses en San Diego viviendo con ella y conociendo a su familia. Sin embargo, ahora es el turno de Valle de pasar 6 meses en Argentina con él, donde tendrá que adaptarse a una nueva rutina, ciudad y ritmo. Además de conocer la cultura, el país y a la familia de Diego, mientras debe aguantar a la fastidiosa de Sam que le trata de hacer la vida imposible. No obstante, Valle y Diego tienen algo muy claro, ya sea en San Diego o en Argentina, no dejarán de amarse y harán todo lo posible por vencer los obstáculos que esta nueva aventura les prepara. ¿Logrará su amor sobrevivir a esta nueva etapa? Registrada en SAFE CREATIVE Bajo el código: 2108118723106 TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS ©
"Déjame contarte la historia sobre la llamada que cambió mi destino." Javier Montenegro es un importante empresario que lo tiene todo, dinero, amor, respeto y popularidad, todo eso conseguido gracias a su dedicación y trabajo. Sin embargo, no todo es perfecto, porque a pocos meses de contraer matrimonio, su prometida lo engaña, rompiéndole el corazón. Javier, harto de la situación y queriendo liberarse, llama a un "número mágico" donde sabe que puede encontrar a la mujer perfecta que cumpla sus deseos y fantasías sin ningún tipo de responsabilidad; lo que le lleva a un mundo distinto y prohibido que nunca pensó visitaría. Ahí, entre fiestas y bares, encuentra a Candela, una mujer que no solo le dará la libertad que él añora, sino también un destino que no pensaba fuese posible.
Paula de la O y Fernando Saramago nacieron y crecieron parte de su vida en el puerto de San Carlos. Sus padres, dos empresarios de la industrial pesquera son mejores amigos por lo que ellos también entablan una fuerte amistad. Sin embargo, una noche lo cambia todo, cuando el padre de Fernando y la madre de Paula mueren en un accidente automovilístico sacando a la luz una supuesta infidelidad que dejará secuelas más allá del dolor y la pérdida. Ahora, años después, Paula y Fernando unirán las piezas del rompecabezas para descubrir lo que verdaderamente pasó esa noche.
Dicen que cuando encuentras al amor de tu vida, no hay nada ni nadie que te pueda alejar de éste, no importa el lugar de donde viene o el pasado del mismo. Esto no lo creía Diego D'angelo hasta que, después de una noche en Ibiza, conoce a Valle Sandoval una chef mexicana que le roba el corazón y lo hace emprender la aventura de su vida. Sin embargo, no sólo el amor será lo único que esté presente en esta relación, un nuevo país, un nuevo hogar y una nueva familia entrarán a la vida de este guapo empresario, ¿podrá ser el amor el lenguaje que una a esta pareja tan diferente? Registrada en SAFE CREATIVE Bajo el código: 2108118723106 TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS ©
Rhonda era una chica que amaba demaisado. Después de que su novio de varios años perdiera su trabajo, ella no dudó en apoyarlo económicamente. Incluso lo mimó, para que no se sintiera deprimido. ¿Y qué hizo él para devolverle el favor? ¡Engañó a Rhonda con su mejor amiga! Ella estaba tan devastada. Para hacer que su ex infiel pague, aprovechó la oportunidad para casarse con un hombre que nunca ha conocido. Eliam, su esposo, era un hombre tradicional. Él le dijo que él sería responsable de todas las facturas de la casa y que ella no tendría que preocuparse por nada. Rhonda se rio de él y concluyó que era uno de esos hombres a los que les gusta presumir de su habilidad. Pensó que su vida de casada sería un infierno. Al contrario, Eliam resultó ser un esposo cariñoso, comprensivo y hasta un poco pegajoso. Él la animó a ascender en la escala profesional. Además, la ayudaba con las tareas del hogar y le daba carta blanca para decorar su hogar. No pasó mucho tiempo antes de que comenzaran a apoyarse mutuamente como un verdadero equipo. Eliam sabía cómo resolver los problemas de la vida. Nunca dejaba de acudir en ayuda de Rhonda cada vez que ella estaba en un aprieto. A primera vista, parecía un hombre común, por lo que Rhonda no pudo evitar preguntarle cómo podía poseer tantos conocimientos acerca de diferentes áreas. Pero Eliam siempre ha logrado esquivar esta pregunta. En un abrir y cerrar de ojos, Rhonda alcanzó la cima de su carrera gracias a la ayuda de su esposo. La vida les iba bien hasta que un día, Rhonda encontró una revista de negocios global. ¡El hombre de la portada se parecía exactamente a su marido! ¡Qué significaba eso! ¿Eran gemelos? ¿O le estaba ocultando un gran secreto todo este tiempo?
Rena se acostó con Waylen una noche cuando estaba borracha. Y como ella necesitaba su ayuda mientras él se sentía atraído por su belleza juvenil, lo que se suponía que sería una aventura de una noche se convirtió en algo más. Todo iba bien hasta que Rena descubrió que el corazón de Waylen pertenecía a otra mujer. Cuando esa mujer regresó, dejó de volver a casa, dejándola sola por muchas noches. Finalmente, un día, la pobre chica recibió un cheque y unas palabras de despedida. Para sorpresa de Waylen, Rena solo sonrió y dijo: "Fue divertido mientras estuvimos juntos, Waylen. Pero espero que no nos volvamos a ver nunca más. Que tengas una buena vida". Sin embargo, por voluntad del destino, los dos se volvieron a encontrar. Al ver que Rena tenía a otro hombre a su lado, los ojos de Waylen ardieron de celos y gritó: "¿Cómo diablos lograste seguir adelante? ¡Pensé que solo me amabas a mí!". "¡Es pasado!", Rena se burló, "hay demasiados hombres en este mundo, Waylen. Además, tú fuiste quien pidió la ruptura. Ahora, si quieres salir conmigo, tendrás que hacer cola". Al día siguiente, Rena recibió un anillo de diamantes y un mensaje del banco de que alguien había transferido miles de millones a su cuenta. Waylen apareció, se arrodilló frente a ella y dijo: "¿Puedo saltarme la fila, Rena? Todavía te quiero".
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
Jennifer Bennett, la legítima heredera de los Bennett, luchó denodadamente por el reconocimiento de su familia, solo para verse eclipsada por una impostora. Enfrentada a falsas acusaciones, acoso y humillación pública, Jennifer acabó renunciando a ganarse su aprobación. Con la promesa de superar la injusticia, ella se convirtió en la pesadilla de quienes la agraviaban. Los esfuerzos de la familia Bennett por doblegarla no hicieron sino alimentar su éxito, llevándola a la altura con la que sus rivales solo podían soñar. Alguien le preguntó: "¿Te sientes defraudada por tus padres?". Con una sonrisa tranquila, Jennifer respondió: "No importa. Al final, el poder prevalece".
Dos años después de su boda, Ximena perdió el conocimiento en un charco de sangre durante un parto difícil, olvidando que su exmarido se iba a casar con otra persona ese día. "Nos vamos a divorciar, pero el bebé se queda conmigo". Estas palabras resonaron en su mente. Sabía que él no estaba allí para ayudarla, sino para quitarle a su hijo. Ximena preferiría morir antes que ver a su hijo llamar madre a otra mujer. Posteriormente perdió la vida en la mesa de operaciones con dos bebés en su vientre. Pero ese no fue el final para ella... Años más tarde volvió a encontrarse con Ramon, que ha cambiado mucho. Quería quedársela para él a pesar de que ya era madre de dos hijos. Y cuando supo que ella se iba a casar de nuevo, irrumpió como un loco. "Ramon, ya morí una vez antes, así que no me importa volver a morir. Pero esta vez, quiero que muramos juntos", gritó ella, mirándolo con angustia en sus ojos. Ximena pensó que él no la amaba y estaba feliz de estar fuera de su vida. Pero lo que ella no sabía era que la noticia de su inesperada muerte le había roto el corazón. Durante mucho tiempo lloró de dolor y agonía. Siempre deseó poder retroceder en el tiempo o ver su hermoso rostro una vez más. Todo esto fue demasiado para Ximena, cuya vida estuvo llena de idas y venidas. No sabía si debía volver al lado de su exmarido o seguir adelante con su vida. ¿Cuál elegiría ella?
Joelle pensó que podría cambiar el corazón de Adrian después de tres años de matrimonio, pero cuando se dio cuenta de que ya pertenecía a otra mujer, ya era demasiado tarde. "Dame un bebé y te liberaré". Sin embargo, el día en que Joelle se puso de parto, Adrian viajaba con su amante en su jet privado. "No me importa a quién ames. Ahora ya he pagado lo que te debo. A partir de ahora, no tenemos nada que ver el uno con el otro". No mucho después de que Joelle se fuera, Adrian se encontró suplicando de rodillas: "Por favor, vuelve conmigo".