lgún tipo de reunión, de la cual yo no podía participar, y posiblemente nunca lo pueda ha
que yo no debería estar vivo. Mi madre se suicidó cuando yo nací, según lo que me han contado y he escuchado. Ella fue raptada meses después de casarse con mi padre. Nadie sabe realme
mí, me miro y sonrió de oreja a oreja, el tan solo era
s Fabien? -
os ojos e
sabes lo que es un libro?
profundamente, a Mariano le encantaba sacarme de quicio, pero lo ha
mbién se acercó, tod
va porque le das lástima! Ni siquiera tus abuelos te quieren,
mente, ¡este imbéci
e aquí -
no" empez
ros, así que mejor vámonos - le d
adre ya un
una patada en la cara, sentí un dolor terrible en
erecías! ¡Tú no pertenece
n riendo de mí y después corri
e estaba allí con sus hermanos
Me preguntó des
tíos empez
s solo? - Me pr
ecías hasta que encontré un bate, si iba a ser castigado,
límite, no iba a permitir que nadie me pisoteara nunca más. Si no iba a tener su aceptación
Gritó m
s mis fuerzas al infeliz que se atrevió a golpearme! Nad
ndo, tiré el bate a un lado y lo ag
é de este mundo - le advertí
bula dislocada, y eso de alguna
Me gritó mi her
uelo de cul
taré todo! - Me gritó ayudand
mucha sangre, y sabía que pronto habría mucha más,
me hubiera encantado marcarlo por toda la cara,
o me quede allí tumbado en el césped, con el cor
barbilla y me levante del suelo, respire profundam
adultos, allí me dio una bofetada que me hizo doler hasta el alma
con tus abuelos? - Me pr
rle, defenderme, pero si lo hacia, est
Te voy a mostrar lo qu
e llevó a la cocina, he hizo q
disculpar? -
a, iba a asumir las c
y a cortarla y haré que veas cómo s
o saco del cajón de la cocina
iempo de discul
travesó la palma con la filosa hoja. Contuve un
evos, niño.
uvo en el aire, este, teni
agarrarlo con la ot
a mano herida y él me pus
que no te corte u
e ver en sus gélidos ojos, un atisbo de orgullo, y eso, hizo que el dolor en mi
a herida, no quiero que
cocina. Todos allí reunidos me
*
habían permitido ir con Mariano en el coche a la escuela. Ten
legar más rápido, pero
! - Grité co
lorando, tal vez tenía frío igual que yo.
a casa? - Le pregunté
asa. Escondí al gato en mi habitación, le
en una caja y lo escondí en el armario. Salí de
*
mente tenía hambre. Abrí el armario, pero la caja no estaba, yo bajé
s esto? -
lo que podría pasar, mi padre había dic
e apegas emocionalmente a alg
empezó a formarse, sabi
ndo ya no está
ió con l
ime, ¿lo quiere
adre apreto al pequeño gato en sus manos,
- Grité y é
ojos, pero no iba a
- Me preguntó
ú, o lo hare
e lo impensable, sentí como algo dentro de
a pasar, ¿entend
su pequeño cuerpecito, si tan solo lo hubiera dejado en medio de la lluvia. tire arena sobre él y lo sepulté. Me qued