n Si
ación de la aplicación, había sido seleccionada y tenía una ci
encontré un rostro aún muy hermoso a pesar de su madurez, el cabello tan gris como sus ojos, me quedé como ida observando esos ojos de mirada tan
or marrón que destacaba mis amplias caderas, un sweater beige cuello alto, pero ajustado a mi busto que siempre ha
dejé el cabello suelto luego de hacerle algunas suaves ondas en las puntas, me vi al espej
me parece irrespetuoso que te dejen esperando más de diez minutos, en ese
ita aparezca porque en este lugar no creo que pueda pagar ni un café. Le digo al mesonero que espero a al
DE FL
gastos a cambio de un encuentro que podía durar desde horas hasta meses, al principio me pareció imposible que yo m
adicta insaciable a quien no puedo dejar sola, ya que a fin de satisfacer su adicción ha vendido casi todo
oblema para lo cual es necesario ingresarla en un centro especializado, el as
os no sobrevivió de una sobredosis, mi mamá colapsó y supongo que por la depresión se hundió más
compañeros de droga que vienen con ella como depredadores a acabar con
los ojos de mi madre y siempre quiero creer que en el fondo de ellos encuentro un destello de esperanza que me
as y a mí me tocaba ir a buscarla a casas de drogas o cualquier otro fumadero). En fin, mientra
l verme, me ofreció un café, le contaba de mi plan para esa noche cuando llegó Laura, bien ves
olocando sobre esta un teléfono de última generación que pare
naste la
carcajada
ción a todos mis p
livia y yo al uníso
s mejores amigas, pero n
tido –d
eto, habla ya. –L
emostrar parte de esos atributos e indicas tus aspiraciones, de allí te conectan con otra apli
tus aspiraciones?
is estudios", o "tengo una gran deuda", o "
epago? –interr
bilidades de ayudarte, son personas con dinero suficiente para
a prepago
jo y por un tiempo determinado, no es c
, son viejos, ¿verd
nguno menor a 60 años,
ro? –quise
n privacida
s de esa aplicación
rarías? –me p
mis computadoras y ahora estoy frita, porque n
que obtuvo? –
do, la debe tener en sus venas o en
o cuando le pongo un fajo de billetes en la mano me reg
tamente lo mismo –s
er trabajar, aunque lo primero sería inter
edan curarla? –
ar, poniéndome de pie y despidiéndome p
*
una semana en decidirme, prácticamente obligada por el hambre, ya que, en mi alacena, solo quedaba una lata de frijoles que abrir
me registré, cruzando los dedos esp
tear lo de mi virginidad, así que en las aspiraciones coloqué algo sutil a ver si era lo
en el fondo aspiraba a que me seleccionara un señor que no quisiera intimar
un tono especial en mi teléfono pa
E FLA