suavemente sobre su hombro derecho. El vestido rojo que llevaba re
cubriendo perfectamente la cicatriz
quila, por lo que podía llevar co
delicados, con unos ojos alerta y cl
tranquilo que atrajo el afecto de
l guarda de seguridad a cargo del estacionamiento en la entrada principal de
ser una persona influyente, lo que hizo que mucha
y cuando ella y Teresa giraron simultáneamente
con piernas largas y una expresi
esperaba encontrarse co
a inusual que Leonor a
er negocios con
uirir un tono aún más fresco, y sus piernas rectas y esbeltas esta
y podía convertirse en un paisaj
lucía completamente diferente con ropa
ndo: -Vamos, vamos a
sa se disculpó: -Lo siento por eso,
o lo más posible -dijo Quinn,
tante difícil evitarlo
punto de salir del estudio de Douglas, el mayordomo de la familia G
Douglas mientras miraba a Quinn antes de dec
Douglas. Ya estaba paralizada deb
mía se estaba desarro
una rápida salida con ella. -Abuelo, dado que tienes un distin
irse con el Señor Benavidez, verdad? -Douglas dijo
ido, incluso sus zapatos estaban pulid