o vistazo a los jardines por donde solía pasear y disfrutar del sol durante los siete meses que estuvo casada con aquel hombre frío y cruel. Podría haberse qu
que el coche volcara y girara dos veces hasta que su vista se oscureció. Evelyn ni siquiera sabía que más personas h
delo pelirroja y olvidaría su existencia. El cielo se oscureció cuando finalmente salió del coche. El conductor
señorita? - El viejo cond
e había encariñado con la exesposa del patrón, ya que ella siempre paseab
mi hermano y le dije que iba a pasar unos días con él
aldea de pescadores cuando él llamó pidiendo dinero
ngas un b
a maleta y abrazó al hom
soltarlo y volver a aga
amente hacia la taquilla donde comp
estómago rugiendo, decidió ahorrar el dinero que la a
ver la densa vegetación en el paraíso escondido en el sur de Francia. La pequeña aldea de pescadores estaba entre Marsella y el puerto de La Ciotat. El lugar era muy visitado por turistas que apreciaban las calas de piedra caliza blanca y la roca ro
o. Evelyn se detuvo algunas veces para preguntar a los habitantes si conocían a Richard. Con una foto de su herma
aces aqu
onrisa se desvanec
hard estaba mucho más delgado y con un fu
extr
le ver a su hermana. Dejó la red
me ayu
Los ojos claros de Evelyn recorrieron la habitación d
o sabe que
mía decirle
endió mi granja, y después de
da lo suficiente como para saber que Mary no querí
furia de Richard. - ¿Hay algo para comer? - pregun
la alacena
acena y tomó un trozo de pan viejo. Al dar el primer bocado, pensó que debería ser sinc
ero, Evelyn! -
ntó después de tra
il e
, solo debo tene
sposo y pídele
engo c
razo de su hermana y la llevó
e a tu
, liberándose de la
vorcio y me echó, se
ó una marca roja en
ya! - arrojó a su
ntre mientras su hermano deambulab
uestras vidas porque no
trocedió algunos pasos hasta caer sentada en u
te para que pid
voz temblaba mientras confesaba. - Su hija y su esposa mu
- Le tiró del pelo y la ob
e en que murieron nuestros padres
te saltara de un pensamiento a otro, trayendo de vuelta la terrible noche. Los insultos de su hermano entraban y salían
ichard le dio un
, la arrastró direc
s gruesas de lluvia caían del
có con la esperanza de sua
ma mío, - la arroj
e puso de pie e intentó volver. - Mi equi
chard bloqueó su paso, impidié
la maleta quedará por el
al señor Relish y gastaste to
palda mientras Evelyn golpeaba la puerta, buscando refugio en el hermano que debía protegerla. La joven d