especial lo único que quería era salir corriendo de ese lugar era invierno en la manada de la pradera, pero para nosotros el lugar era muy
ido muy agotador frustrado me destapé llevaba puesto un conjunto de algodón muy liviano de color negro el short me qued
me coloque mis zapatillas y salí de mi habitación tratando de no hacer ruido camine por el pasillo y llegue a una gran puerta roja era
largo suspiro miré a mi alrededor el inmenso bosque que había cubierto con un poco de nieve comencé a sentirme algo incómoda como si alguien me
e hacia el barandal podía sentir todo su cuerpo presionándome era un hombre alto y muy grande sus manos se acercaron hacia mi cuerpo su mano izquierda estaba s
a un jadeo y un pequeño quejido salió de mí al sentir su lengua recorrer mi hombro hasta mi cuello mi mano izquierda se posó sobre su muñeca sujet
favor... ~ traté de decir
e mi cuello quedé aún más expuesto a él trate de liberarme, pero no podía moverme su cuerpo era muy grande
ir, te lo advierto~, trate de amenazarlo, pero ap
una voz tan oscura e imponente. Sentí miedo por un momento de tratar de luchar, pero s
rrepentirás de esto, acaso no saber quién soy
interesa lo que hagas, pero no te libr
ras la amenaza en su voz hacía que mi cuerpo se helara temía por mi vida no entendía cómo yo una gran guerrera podía temerle a un hom
den ~es suficiente, me
esto, quédate quieta y déjame saborearte, conejita ~dijo
ridícula manera, soy todo menos una débil e inútil conejita. Este maldito s
a detrás de mi volviendo a inmovilizar mi cuerpo tiro de mí hacia atrás haciendo que me recueste un poco sobre el barandal recorrió con
no veía bien, pero se veía enorme en verdad su tamaño era imponente y tenebroso mi mano estaba en su pecho tratando de apartarlo, pero él
olmillos, clavarse en mi cuello. El dolor era insoportable, trate de luchar pero no